Para esta noche elegimos el hotel Rosenbuch, cerca de Miltenberg, donde nos dieron una habitación enorme, con terraza, y un baño súper grande y con todo tipo de comodidades. El desayuno bastante normal en la zona de restaurante que tiene, 88 euros la noche con parking incluido.
El día amanece muy nublado pero no llueve, así que muy temprano quedamos con nuestros amigos y recorremos Miltenberg de punta a punta, consiguiendo otra perspectiva diferente a la de la noche anterior. Los mercados aún no habían abierto y apenas había gente (el día anterior tampoco, la verdad), es un auténtico placer visitar este tipo de destinos sin las masficaciones de Frankfurt, de la Alsacia, y de las grandes ciudades.
Nos detuvimos en el Gasthof Zum Riesen, la que dicen es la taberna más antigua de Alemania:
Recogimos los coches y nos dirigimos a nuestro último destino del viaje: MICHELSTADT
Nos íbamos acercando a Frankfurt y con ello al final de la aventura, pero para alargarla unas horas más paramos en esta preciosa localidad del distrito de Hesse.
Michelstadt tiene mucho que ver pero nosotros nos centramos en lo exclusivamente navideño. Aparcamos muy cerca del Burg, y justo al otro lado la Navidad toma la ciudad...lo primero que encontramos fue su Rathaus, el antiguo ayuntamiento en la Plaza del Mercado. Toda su estructura está construída en madera de roble, y en una de sus vigas está grabada la fecha de creación.
El mercado navideño se extiende por todas las calles aledañas al Rathaus, por lo que no tiene pérdida, además se respira un ambiente muy muy alemán, alejado de masas de turistas, por eso me encantó.
En la plaza Kellereihof , además de otro mercado navideño, encontramos el stadtmuseum que se puede visitar gratis, y alberga una colección sobre cómo se ganaban la vida los habitantes de Michelstadt: aperos de trabajo, armas, cerámica...muy interesante.
Y en la planta superior una exposición de trenes y un mega scalextic donde los peques echaron unas partidas por el módico precio de un euro, y además gestionado por niños de no mas de 15 años.
Antes de dejar Michelstadt, paseamos por el Diebsturm, la muralla de la localidad, junto al foso y la torre circular que en su día fue la prisión (no tenía puertas y subían a los presos a través de un sistema de poleas hasta la planta octogonal superior)
Y como última curiosidad sobre este destino, que leí al buscar información de la zona... deciros que los habitantes de Michelstadt, tomaron la iniciativa de hacer una investigación para buscar a los descendientes de los judíos alemanes asesinados, para disculparse por las atrocidades cometidas durante la Segunda Guerra Mundial . La investigación de los ciudadanos de Michelstadt fue primero un libro y después un encuentro cara a cara con los descendientes que localizaron en una ciudad de América Latina....no es sorprendente con los tiempos que corren?
Ahora sí...el aeropuerto nos espera, y de camino encontramos estas señales por la carretera...
No es que yo me haya sacado el carnet de conducir en la época de Paco Martínez Soria, pero no me suena nada que hoy en día los tanques circulen....mi no entender nada...


Busqué en internet al volver a Madrid, y no se sabe muy bien si es por un par de bases militares que tienen los americanos por la zona o a que se deben estas señales. Además curiosamente solo están colocadas en los puentes...debe estar relacionado con la cantidad de toneladas que pueden resistir al circular este tipo de vehículos.... a mi Alemania cada año me sorprende más...
Ahora sí, esto se acaba y empezamos a preparar maletas para el siguiente viaje...en 20 días nos vamos a LAPONIA FINLANDESA...
