Tras dos horas en ferry con escala en Pico llegamos a Horta, en la isla de Faial. Las previsiones meteorológicas no eran buenas para ese día ni para el siguiente. Recogimos el coche y nos fuimos a comer al famoso Peter’s Sport Café. Desde la terraza hay unas vistas fantásticas de Pico, pero ese día estaba cubierto (del lado que da a Faial, en la foto se ve despejado desde el otro lado). La comida estuvo buena, aunque el servicio un poco lento.
Después de la comida y un paseo fuimos en coche al Monte de Guia, un cono volcánico con dos cráteres semicirculares, muy cerca de Horta. Dejamos el coche junto a la ermita y dimos un paseo con buena perspectiva de los cráteres.
De allí fuimos a la vecina bahía de Porto Pim, una de las dos playas de arena de la isla. La playa es muy bonita y dimos un paseo por ella, pero el baño estaba prohibido por una gran acumulación de carabelas portuguesas, una constante esos días en Faial.
Por último, visitamos dos miradores cerca de Horta, el miradouro de Nossa Senhora da Conceição y el miradouro da Nossa Senhora do Pilar, ambos con vistas a la bahía de Horta.
Después de eso, ya solo faltaba ir a comprar al supermercado y tomar posesión de nuestro apartamento.