Amanecimos en el camping de Skogar. Se trata de un camping con instalaciones muy muy básicas donde te cobran por el baño, por la ducha y por la electricidad. Como llegamos la noche anterior tarde y no llevábamos efectivo, no pudimos hacer uso de ninguna de ellas ni encontrar un puesto para conectarnos. Nos quedamos en un pedazo de asfalto en el parking de la cascada, que se supone que ya es camping. Fue el primer "sinpa" del viaje.
Me puse la alarma con el amanecer, y fui el primero en llegar a Skogafoss. La tranquilidad de tenerla para mi solo y poder hacer fotografías de larga exposición sin nadie de por medio, quizá hizo que fuese de mis preferidas.


Por lo que respecta a la fotografía, creo que el amanecer no es el mejor momento. El sol queda en la parte de atrás por lo que sale a contraluz. Debe de ser mucho mejor el atardecer, pero entiendo también que será más difícil tenerla para uno solo.
Después de ver la cascada fuimos a Seljavallalaug Swimming Pool, que se encontraba a menos de 15' de Skogar. El último tramo es un camino de grava que hicimos con la autocaravana sin problema. Hay una piscina con agua caliente (no en exceso), que se encuentra en un valle espectacular. La excursión que es apenas 20' andando vale más que la pena.


De ahí fuimos al glaciar Sólheimajökull. El trayecto fueron unos 30', todo asfaltado (tras deshacer el primer caino de grava de Seljavallalaug). El parking costó 750 ISK. Fue posiblemente el glaciar que más nos gustó. No es el más imponente, ni tiene el frente más alto, pero el color de la arena negra mezclada con el blanco del hielo fue algo espectacular que nunca habíamos visto en ningún otro lado. Estuvimos 1h aprox andando desde el parking hasta el glaciar y vuelta.



Desde aquí fuimos al mirador del arco Dyrhólaey. Estaba bastante brumoso y hacía mucho viento. Mucho mucho. Apenas hicimos fotos. Tardamos unos 50' desde el glaciar. El último tramo de subida a la montaña no lo pueden hacer autocaravanas, por lo que la dejamos en la parte inferior de la montaña e hicimos autostop. El primer coche que pasó nos subió a los 5, y lo mismo a la bajada.
Estos acantilados se supone que son un buen sitio para ver frailecillos. Nosotros no vimos ninguno, quizá por la hora, quizá por ser todavía un poco pronto finales de abril.
A continuación fuimos a Reynisfjara. El parking costó 1000 ISK. Vimos la playa en cinco minutos. Nos pareció curiosa, pero no la más espectacular de las que vimos.
Comimos en el parking, echamos una siesta y fuimos a Vik a comprar al Krönan, uno de los supermercados que junto con el Bonus mejores precios ofrece.
Respecto a los precios, es verdad que es más caro que España, pero no muchísimo más. De hecho hay cosas tipo Kit Kat y dulces que son hasta más baratos. Eso si, el pollo es prohibitivo. Una bandeja de 400gr costaba 40€. Los huevos por ejemplo salían a 1€ el huevo. Encontramos carne picada de vacuno de oferta al mismo precio que España, que caducaba ese día.
También pusimos diesel en la N1. Como curiosidad decir que pusimos 102€, y me bloquearon otros 102€ en la tarjeta durante una semana. Al final los acaban devolviendo pero si no hay mucha liquidez puede ser un contratiempo. El diesel costaba en ese momento alrededor de 329ISK.
Tras otra hora y media de coche, llegamos al camping de esa noche, Tjaldstæðið Kirkjubær II, cottages and camping, que se encontraba a mitad camino entre Vik y el Parque nacional Vatnajökull. El camping nos costó con duchas y electricidad 80€ para cinco personas. Fue uno de los mejores donde estuvimos. Buena zona común y buenas duchas. Eso sí, 3 minutos por ducha.