Siempre he querido conocer esta ciudad, me fascina el nombre. Pero no quería visitarla, como leía que suelen hacer mucha gente que hace escala en Hong Kong y salen unas cuantas horas a ver el Gran Buda de Tian incluso llegan al centro para una visita express.
Como el principio de mi viaje a Filipinas, coincidía con el Año Nuevo Chino, decidí dejarlo para el final del viaje, pues no soy muy de aglomeraciones y pensé que cuando pasase el Año Nuevo, no habría tanta gente en Hong Kong. Pero en Hong Kong siempre hay muchísima gente...
Imaginé que Hong Kong no tendría que ver nada con Filipinas, empezando por los precios. Así que reservé antes el Homestay de Hong Kong que los de Filipinas, donde estaría casi un mes antes. Y por supuesto, yo quería quedarme en la zona icónica de HK, Kowloon.
Tsim Sha Tsui fue la zona en particular elegida. "Cerca" de todo, con paradas de metro al lado, la zona del puerto a un breve paseo y de precio, muy bien, aunque yo me alojo en sitios bastante diferentes a los que leo en los diarios del foro, la mayoría, aunque también hay algunos de mi estilo. Una de las razones principales por las que me hospedo en Homestay o Guesthouse, es que considero que el viaje es más inmersivo, te duchas, duermes y sales zumbando a descubrir, ahí no tienes pijerios innecesarios , que te roben el precioso y a veces escaso tiempo, para explorar, visitar, conocer.
Casi cuatro días para visitar HK y Macao, otra de las regiones administrativas especiales de China. Ambas ciudades estado tienen su propia moneda, su propia bandera y es necesario llevar el pasaporte contigo si quieres ir a ver Macao y volver a HK o viceversa.
Me dió tiempo a ver más cosas de las que tenía marcadas en el Maps y en el Me, pues decidí que para esos cuatro días, no compraría tarjeta sim, tiraría de la wifi del homestay y de los mapas descargados, y así tendría una poca mayor sensación de aventura, en esa mega ciudad en la que no conocía absolutamente a nadie.
Salí de Cebú (Filipinas) en un vuelo directo hacia Hong Kong, que en poco mas de tres horas, estás en un mundo tan diferente del que había vivido durante casi un mes....Ya en el aeropuerto de HK, era todo otro mundo. Encima, es la primera vez que me han dado el asiento 1 en un vuelo, así que salí el primero con mi mochila e iba alucinando recorriendo los larguísimos pasillos, al principio solitarios, hasta llegar a la zona de inmigración, que allí si que había cientos de personas, aunque el trámite de entrada se suele hacer muy rápido y hay mucha gente trabajando allí, vamos, que está organizado como vería después en todo Hong Kong, perfecto .

Después, y de las cosas que más recomiendo hacer, es sacarte la Octopus Card, en el mismo aeropuerto, por ejemplo en Atención al Cliente, es fácil encontrar los sitios donde la venden, en cuanto preguntes a alguien. Ojo, hay que pagarla con dinero en efectivo.
Es una tarjeta monedero que vale para subir a todos los transportes públicos de HK, te va a hacer todo mucho más fácil y sobre todo, más rápido. La cargas cuando la compras y la recargas en las máquinas por ejemplo del metro, es es muy fácil y tardas 15 segundos. Cada vez que pasas la tarjeta por una barrera en el metro o en el bus, te sale el saldo que te queda.

Yo me bajé en la parada de Kowloon, totalmente atontado desde que me desperté en la mañana a las 5:30, cansado y sin tener ni p...idea de cómo debía hacer. La gente allí no son como los filipinos de amables...pero llegó mi ángel de la guarda en forma de mujer y me llevó justo hasta el autobús de dos pisos que debía coger, para llegar a la zona de Tsim Sha Tsui.
Iba flipando en el piso de arriba, totalmente de noche, viendo tantos rascacielos, tanto trafico y tanta gente, ya que era viernes . Cuando conté los stops que me dijo el conductor debía hacer antes de bajarme, piso al fin suelo real hongkonés al aire libre..que hostia me di...yo en pantalones cortos y camiseta, madre del Amor Hermoso el frío que hacía allí!!
Me pongo a buscar el Homestay con el maps me, que parecía se había vuelto loco, ya que no daba con el lugar. Claro, el hostel estaba en un quinto piso de un rascacielos y no había manera hasta que después de que salieran corriendo dos chavales a los que pregunté, y hombre de más edad, fue el que llamó al hostel por mi y me lo encontró.


La primera impresión de HK, no fue buena, estaba helado, desorientado y muy cansado.