[size=18][size=18]A las ocho y media estamos desayunando en la recepción, al final me reembolsan el dinero cobrado de más y a modo de disculpa nos dicen que a las diez y media de la mañana nos llevará una furgoneta al aeropuerto, gratis.
Teníamos pensado ir con la Istambulkart, pero entre que llovía, teníamos que recargar la tarjeta porque no nos llegaba, pues nos vino fenomenal.
Yo, particularmente recomiendo el hotel, está inmejorablemente situado, limpio, el personal es muy amable, yo tuve este problema, que al final me resolvieron.
Y otra vez para la Mezquita Azul, ventajas de tener el hotel a cinco minutos, llovía bastante, ¡con la suerte que habíamos tenido nosotros con el tiempo!. Y cuando accedemos al patio interior, vemos una cola, que rodea todo el patio y sale por la puerta de enfrente. Nos acercamos a la entrada sin ninguna esperanza de poder entrar.
Entonces, se nos acerca un turco y nos dice en castellano:
- Españoles, ¿queréis ver la mezquita, con guía y sin esperar cola?
Le explicamos, que ya la habíamos visto, que íbamos a verla por última vez, antes de marcharnos, que nuestro avión salía en cuatro horas.
Se nos quedó mirando, nos preguntó de dónde éramos y después de un instante, nos estaba metiendo en la Mezquita Azul. Increíble la gente que nos hemos encontrado.
Al entrar dentro, ya se notaba que olía a pies, y al entrar lo entiendes, la mezquita está literalmente hasta la bandera, grupos y más grupos con guías, grupos de los cruceros…uff, una agobio total y absoluto.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Preferimos irnos, quedarnos con el recuerdo del primer día que entramos en ella y con el detalle de buen rollo que tuvo con nosotros el turco que nos coló.
Y poco más, volvimos al hotel, nos invitaron a unos cafés turcos, muy buenos, y nos recogió la furgoneta. En el aeropuerto pasamos dos o tres controles, últimas compras en el duty free y para España, con enlace de una hora en Zurich.
Estambul nos ha gustado muchísimo, nos ha sorprendido, es una ciudad que tiene muchísimo por ver, lo que todo el mundo conoce y cuando simplemente te pierdes por sus calles, alejado del centro, nos atrevemos a decir que es la gente que más nos ha ayudado en una ciudad cuándo han visto que mirábamos un mapa, cuándo veían que éramos españoles… bajo nuestra experiencia, chapó para los turcos. Nos ha sorprendido la cantidad de gatos que hay en la ciudad y también nos ha sorprendido la cantidad de mujeres que van con velo, no sé por qué, esperábamos ver más normalidad en el vestuario. También nos ha sorprendido las llamadas a oración del Muecín, ese sonido paseando por los alrededores de la Mezquita Azul, cómo parece que se contestan de unas mezquitas a otras, ya lo conocíamos de Marruecos y Túnez, pero si tienes la suerte que coincide o haces coincidir la llamada con tu visita en el patio de la Mezquita Azul, en el café Konak, o en otros tantos sitios, seguro siempre lo asociareis a Estambul. También nos ha sorprendido que cuando pides la cuenta en un restaurante, hasta que no metes el dinero, los camareros se quedan allí, no se marchan.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Nos ha gustado mucho (y no necesariamente por este orden):
- Los cruceros por el Bósforo o cuando vayais en ferry, ¡Qué bonita es Estambul! ¡Y que vistas ofrecen,! no se puede perder.

- Fumar una narguile de manzana en cualquier café-restaurante
- Los tes de manzana
- La Mezquita Azul, Impresionante

- Santa Sofía, Impresionante.

- Cisterna Basílica o Yerabatan, muy diferente
- San Salvador Cora y sus mosaicos increíbles
- Las vistas desde el café Konak
- Mezquita Suleymaniye
- Mezquita nueva o Yeni Cami
- Las rosquillas de pan con sésamo
- Los pasteles de chocolate relleno de pistachos de la pastelería Sultanahmed Cigdem
- Gran Bazar y Bazar de las especias
- El atardecer desde Uskudar
- Perderte por las calles
[align=center]FIN