Comer y beber en Munich: Cervecerías restaurantes - Alemania ✈️ Foro Alemania, Austria, Suiza ✈️ p20 ✈️

No vayais a este restaurante: HACKERHAUS en Sendlinger Straße.
Al pagar la cuenta con tarjeta, la camarera que fue muy antipatica durante toda la cena, nos exigió el pago de una propina de muy malas formas, alegando: "service is not included", hasta nos dijo el importe minimo que debiamos darle, 2 eur. Claro que mas tontos fuimos nosotros de seguirle el juego........
En definitiva, restaurante no recomendable por la actitud de, por lo menos, esta camarera. La comida tampoco es para tirar cohetes.

Después de haberme leído todo el hilo completo quería preguntaros.

He leído por ahí que la Weisswurst sólo la sirven hasta las 12 de la mañana. Recomendáis algún sitio para desayunar una Weisswurst con Pretzel y una cerveza?

Voy en junio a Munich, y si hace buen tiempo me encantaría tomarme un desayuno así en una terraza! (aunque no se como iré el resto del día si desayuno una cerveza de ese tamaño)

Hola,

¿Conocéis algún restaurante/cervecería/biergarten en la zona del museo BMW y el estadio Olímpico? Estará por allí una tarde y no he visto de momento ninguna recomendación.

Gracias!!

Aquí van mis recomendaciones sobre donde comer en Munich. Algunos de ellos son sitios ya comentados, pero no está mal en algunos casos volver a reincidir. Son algunas de las cerveceras que hemos visitado en nuestro reciente viaje, aunque no están, evidentemente, todas en las que hemos estado, si creo que las más reseñables para nosotros.

-Empecemos con la más típica y conocida, Hofbräuhaus, en Platzl 9, muy céntrica, como todas las que voy a comentar. Creo que fue el único sitio donde no nos ofrecieron carta en castellano. La comida estuvo bien, pero sin más, tampoco para echar cohetes (pedimos codillo y asado de cerdo). La cerveza buena. Aunque, a decir verdad, a este local se va más por su ambiente, su decoración y su historia más que por la comida.
Tuvimos la suerte de conseguir mesa en el salón abovedado, seguramente el más bonito de la cervecera (o al menos, el más conocido), el que está justo a la entrada. Di una vuelta por la planta baja del local (creo que el resto ese día estaba cerrado) y la verdad es que es enorme.
Tiene mesas corridas y te sientas con otra gente, como en muchas de las cerveceras. Hay un bullicio tremendo y a ello colabora la banda que de vez en cuando interpreta animosas piezas de música bávara. Brindis, gritos, canciones, más brindis…. Un continuo ir y venir de camareros con un ajetreo tremendo.
Aunque suene feo decirlo, es la típica turistada que hay que “cometer”. En los alrededores a la noche siempre hay mucho jaleo, grupos de gente que entra o sale de la cervecera y muchos de ellos gritando o cantando.

-Refiriéndonos al tema cervecero nos gustó mucho el entorno de la Catedral, ya que había por allí varios locales bastante próximos entre ellos y se generaba buen ambientillo por allí. Además, no había que caminar demasiado entre cerveza y cerveza (aunque la costumbre muniquesa es tomarse varias rondas en el mismo local).
Junto a la Catedral encontramos por ejemplo la Nürnberger Bratwurst Glöckl, especialista en salchichas a la brasa. Un local más pequeño que otros aquí citados, aunque aún así, tenía al menos un segundo comedor en el primer piso. Nosotros comimos en el de la planta baja, con un estilo diferente al resto de cerveceras, con madera muy oscura en las paredes (casi negra) y multitud de fotografias y objetos variados como decoración. Tenía como un ambiente más familiar, con las mesas muy juntas entre sí. Muy buenas cervezas y bastante sabrosas las diferentes especialidades de salchichas que probamos. Carta en castellano.

-También en el entorno de la Catedral estaba Augustiner Klostewirt. Con un comedor en la planta baja y otro en el sotano (este último, abovedado y más bonito). Este local tenía una peculiaridad que nos gustó. Practicamente ninguna cervecera tiene barra en la que beber, siempre hay que sentarse en alguna mesa y hay momentos, cuando todo el mundo está cenando, que nos daba la impresión de estar ocupando dos sitios para cenar con dos simples cervezas. Pues bien en la Augustiner Klostewirt disponen de una barra donde tomarte tranquilamente las birritas (parece una bobada pero para nosotros no lo fue). Aquí cenamos una noche, en el comedor del sotano, buen ambiente y la comida bien (sin más). Carta en castellano.

-Augustiner Grobgaststatten (en Neuhaser St), posiblemente la calle más concurrida y comercial de Munich. Otra cervecera histórica. En esta no llegamos a cenar, aunque si tomamos alguna que otra cerveza. Como casi todas las cerveceras, tiene dimensiones mastodónticas, varios salones enormes y buen ambiente en todos. Seguro que es una buena opción para cenar.

-Nos encantó la cervecera al aire libre (biergarten) del Viktualienmarkt (el mercado de alimentos del centro de Munich). La cervecera consta de un montón de mesas y bancos al aire libre un kiosko donde sirven a discreción cerveza Lowerbrau helles (la cerveza clara). El encargado de la caña está sirviendo cervezas continuamente, te pones en la cola y cuando te llega el turno coges y pagas las jarras que necesites. Si quieres algún otro tipo de cerveza (nosotros pedimos dunkel –oscura- y nos dieron Paulaner) te sirven en botella. Lo curioso de esta cervecera es que la gente se lleva a la mesa alimentos comprados en los puestos del Viktualienmarkt: fruta, encurtidos, embutidos, queso, pan, bocadillos de salchicha, pasteles y las cervezas o bebidas se compran en la cervecera…. Nos gustó mucho el ambientillo y el estilo del sitio.

-Weisses Bräuhaus, en la calle Tal, cerca de Marienplatz. Una de las más recomendables, sin duda. Un edificio de varios pisos alberga esta céntrica cervecera, aunque cuando fuimos sólo tenían abiertos los comedores de planta baja y primer piso. Carta en castellano donde destaca, sobre todo, la manera poética en que describe las diferentes cervezas que ofrece. Cenamos de maravilla (asado de cerdo de la paletilla al estilo muniqués y un asado a la cerveza schneider aventinus y de postre, un rollo de hojaldre relleno de manzana con salsa de vainilla). Sitio señorial y ambiente bastante tranquilo. Nos atendió una señora majísima que casi empezó riñéndonos (porque la llamamos con cierta insistencia para que nos atendiera) y que acabó siendo un encanto. Muy recomendable, puede que menos bulliciosa que otras pero para comer muy bien.

-Hanxbauer en Sparkassenstraße 6. Otro local muy recomendable. La especialidad del sitio son los codillos asados, aunque tienen una amplia y surtida carta. Los codillos se pueden ver desde fuera del local, a través de una ventana, dando vueltas en el asador (al estilo de los pollos) mientras se van haciendo.
En algún otro local pedimos también codillo e indudablemente no llegaban a la categoría de los de Hanxabauer, que estaban deliciosos. Algo más caros que en otros locales pero la diferencia se paga con gusto.
En la carta ofrecen medio codillo por 17,40 € pero también se puede pedir codillo entero (por ejemplo, para dos personas). Si pides codillo entero el camarero regresa con una bandeja donde están ya los codillos a puntito de caramelo para que elijas cual quieres. Cada codillo lleva clavada una banderita que indica el precio del mismo.
Es también un local menos jaranero y ruidoso que otros. Nos gustó tanto el codillo que cenamos dos veces aquí, aunque la 2ª experiencia no fue muy satisfactoria: había muchísima gente porque era viernes santo (fiesta en Munich) y además, nos tocó un camarero con bastantes malas pulgas (ya hablo de todo esto en mi diario). Aún así, imperdonable irse de Munich sin probar estos codillos.

Y estos son los que destaco para comer o cenar de entre todos los que visitamos, aunque no me gustaría acabar sin recomendaros una visitilla a la cervecera Rastkeller, en los bajos del Ayuntamiento, un sitio francamente bonito, aunque con un ambiente demasiado tranquilo para lo que esperas de una cervecera. En el patio interior del Ayuntamiento vimos varias mesas y sillas que pertenecen también a esta cervecera (un sitio chulo el citado patio para tomarse unas birras!)

Ya veo que de comer y beber has salido bien servido Moguto. Me alegro. Gracias por los aportes.

Para los que nos encanta comer y beber, la gastronomía resulta otro aliciente más en cada viaje, Ele .
Según el tipo de cocina de cada sitio y los gustos de cada viajero, se puede disfrutar más o menos… y yo confieso que, en este sentido, he disfrutado un montón por Baviera .

Lo mismo que yo. Recuerdo este viaje como uno de los mejores y mas divertidos que he hecho.

Yo debo reconocer que el tema gastronómico es lo primero que preparo de un viaje y reconozco que la gastronomía de calidad bávara más allá de los tópicos, se sorprendió muy gratamente.

Coincido, contigo Proser.
De hecho, iba tan dispuesto a disfrutar de la buena cocina bávara que me daba miedo encontrarme con el muro del idioma en las cartas de los restaurantes (de alemán practicamente cero y no domino el inglés a la perfección) y por ello, tal y como cuento en el diario que acabo de publicar sobre el viaje, me llevé traducidas al castellano desde casa las cartas de varias cerveceras muniquesas, para saber bien lo que pedía y no cortarme a la hora de hacerlo ….
Y luego resulta que practicamente en todas nos ofrecieron la carta en castellano

Pues en el tema idioma yo sí que he notado una enorme diferencia. En mi primer viaje a Alemania recuerdo que lo pasé fatal porque sí, inglés tanto mi marido como yo sin problemas (yo viví en Ingleterra y ambos por trabajo es el día a día), pero alemán sólo algún recuerdo que tenía mi marido y no era suficiente ni de lejos, al menos para mí; no ya para las cartas sino para todo: carteles, desvíos del metro, tiendas (no precisamente las turísticas),... Me mosqueé mucho porque sólo hablaba por los codos con los italianos de un restaurante que se hizo casi fijo para cenar. Como yo necesito hablar con la gente, leer lo que me rodea, saber qué pone en un periódico, enterarme de la tele,... Me puse a ello y ¡menuda gozada el resto de viajes!

Ahora sí que disfruto plenamente. En el tema de cartas de restaurantes se nota mogollón la diferencia, primero porque a bastantes de los que voy no ofrecen carta más que en alemán o inglés máximo, y segundo porque cuando hay carta en otros idiomas (no digamos ya en español) la información es normalmente pésima.

Te pongo un ejemplo de un restaurante en Berlín: tres personas piden carta en español y yo la local. Apenas les llamaba ningún plato y yo estaba babeando con casi todos. Motivo: su carta era muy escueta, sin explicaciones del plato y en cambio la mía era detallada a tope.
Además siempre pregunto y hablo con los camareros, pides las cosas a tu gusto, puedes comentar los vinos, etc.

Y se nota que en cualquier ámbito, en cuanto ellos te pueden hablar en su idioma son majísimos y enrollados. Pero eso pasa en cualquier país cuando no hay barrera idiomática, claro.

Antes rehuía el ir a países germanoparlantes y ahora me encanta.

Cierto es que algunas cartas se notaba a la legua que estaban traducidas a la brava, con el traductor de google y las denominaciones de algunos platos no eran congruentes o no tenían mucho sentido (cosas como “cerdo de la paletilla” en vez de al revés) pero desde luego, mejor que nada ya es.

En alguna otra observamos traducciones más decorosas y lo que hablas de que la carta en alemán de cierto local tenía explicaciones más profusas, me evoca la carta traducida al castellano de la Weisses Bräuhaus en la que el apartado dedicado a las cervezas era francamente detallista. Te daba la graduación de cada cerveza además de recomendar con qué tipo de platos maridarla y añadían una breve y poética descripción (a veces un poco horteras , pero bonitas, ¿por qué no? Y además te daban una idea del tipo de cerveza que podía ser. Mi mujer pidió una suave que en la carta venía descrita como “vivificante como un baile de viento en verano” , yo me pedí otra que aparecía como “profunda y muy fuerte. Para los grandes momentos junto a una chimenea” (me tomé 2) y apunté alguna otra descripción más como “un placer es nuestra cerveza ligera, refrescante y burbujeante cerveza de trigo, no sólo para días cálidos de verano”. Desde luego con algo tan detallista, es raro que uno se confunda al pedir (insisto en que también podían aparecer para qué tipo de plato era adecuada cada cerveza).

Y de verdad te digo que con nuestro inglés chapurreado y, sobre todo, las cartas traducidas mal que bien al castellano nos hemos arreglado de maravilla. Y claro, cuando más a gusto hemos estado ha sido cuando hemos topado con gente que hablaba el mismo idioma: un camarero chileno en Nuremberg (que me orientó sobre los vinos de Franconia) o un italiano parlanchín en una cervecera muniquesa. Pero en general y salvo una desonhorosa excepción, hemos encontrado camareros muy amables siempre dispuestos a intentarnos entender y hacerse entender (cosa que no pasa siempre…. Recuerdo Chequia ……) y en general y como tu dices, gente muy abierta y simpática .

¡Me ha encantado!! Genial la descripción, jajajajaja.

Hola una pregunta para Proser: ¿cómo has conseguido llegar a ese nivel con el alemán? porque para lo que describes creo que hace falta un nivelazo. Yo quiero viajar el junio y hace un mes me puse a repasar los libros que tenía guardados de hace 25 años que hice el primer curso de Alemán en la Escuela de Idiomas de mi ciudad. Luego he conseguido también el Método Assimil; pero de los 126 temas de que consta me he quedado en el 25 y me niego a seguir más (mi cabeza no da para más) y lo que aspiro simplemente es a saber decir hola, adiós, gracias, pedir la cuenta en un restaurante y me parece que poco más...
¿En definitiva que si tienes algún método secreto? Porque yo personalmente me veo que o me dedico en cuerpo y alma al estudio (a lo cual no puedo ni estoy dispuesto) o no sé si hay "pastilllas" de alemán aunque sea en la farmacia.....
Es que es muy difícil........

Vipach, no sé si nos estamos desviando del tema del hilo pero rápidamente te contesto que, aunque reconozco que tengo una cierta facilidad para aprender idiomas, mi "secreto" fue ir al Instituto Goethe, nada de Escuela Oficial de Idiomas o cursos similares que a mí no me gustan. Lo bueno son los cursos intensivos de inmersión en lenguaje y cultura y allí son expertos.
También es un hecho que cuantos más idiomas hablas más fácil es aprender otros. El próximo creo que será el holandés porque leído lo entiendo bastante pero me falta hablarlo para no tener que usar el francés en Flandes.

Gracias Proser por tu contestación.

Hola,

Me toca ir a Munich por trabajo una semana casi todos los años. Gracias a este hilo me he pasado por los sitios más recomendados, básicamente cervecerías. Ahí va mi aportación, con notas para hacer las valoraciones más amenas, todo muy personal claro!

Hofbrauhaus (HB) (Platzl 9)
Quizás el local más conocido. Buen ambiente (mucho turista, claro) y salones enormes, con música bávara en directo y show ‘pa guiris’ incluido. La cerveza está buena sin embargo en la comida suspenden: codillo seco, seco; platos de carne grasientos y mucha patata insípida de acompañamiento. Servicio rápido y eficiente aunque frío y distante. Se merece una vista para conocerlo pero si evitas comer, casi mejor.

Cerveza: 7
Comida: 3
Precio: 20-25€

Agustiner (Neuhauser Straße 27)
Tienen varios locales en Munich y este es el más concurrido. En el patio trasero tienen terraza, algo ruidosa pero apetecible si es verano. El salón interior es acogedor, grande pero sin llegar al enorme tamaño del HB. Carta tradicional de cervecería. Destaca el plato de salchichas, todas ellas muy ricas. El resto, platos de carne bien resueltos aunque con cierto toque industrial, lógico en estos restaurantes tan grandes con lleno asegurado. Mención especial para la cerveza, muy rica en todas sus variedades: muy buenas la helles (rubia, tipo lager) y la weissbier (de trigo) y sorprendente la dunkel (de trigo también pero negra). Este restaurante es una muy buena opción si están por el centro pero hay que llegar pronto si quieres terraza, se llena!

Cerveza: 8
Comida: 6
Precio: 20-25€

Löwenbräu-Keller (Nymphenburger Straße 2)
Algo más alejada del centro pero muy cerca de la parte norte de la estación central de trenes, la Löwenbräu merece el paseo, aunque solo sea para ver el león que preside la entrada a este pequeño palacete. Su jardín poblado de árboles y mesas de madera (biergarten), pegado a los salones del restaurante, es todo un lujo si el tiempo acompaña. La cerveza no decepciona (la weissbier se lleva la palma) y la comida, sin ser una maravilla, cumple con lo esperado. El típico escalope vienés (schnitzel) es muy rico. Codillo algo más flojo. Tienen una ensalada de salchichas con cebolla que es curiosa, interesante para compartir. El Apfelstrudel (pastel de manzana) es una buena opción de postre. No hay que perderse la fábrica donde se hace la cerveza. Se puede ver en la misma calle Nymphenburger, a escasos 300 metros siguiendo la calle desde el propio restaurante pero en la acera contraria.

Cerveza: 8
Comida: 6
Precio: 20-25€

Weisses Bräuhaus (Tal 7)
A dos pasos del Viktualienmarkt. Cervecería con un precio algo superior a lo habitual pero la diferencia se nota en la calidad de la comida. Es mi opción preferida en el centro de Múnich. La carta incluye opciones algo más elaboradas de los típicos platos de cerdo. Tienen muchas especialidades con carne de buey de Baviera muy interesante. Capítulo especial para la cerveza: impresionante, multitud de opciones y cervezas de temporada, con descripciones en la carta (en español) muy sugerentes.

Cerveza: 9
Comida: 7
Precio: 25-30€

Seehaus (Englischen Garten, Kleinhesselohe 3)
Si estás de paseo en el Englischen Garten, es una buena opción. Se trata de un clásico Biergarten pero mucho menos concurrido que el situado junto a la pagoda china (Chinesischer Turm), que suele estar hasta arriba en verano. Merece la pena bordear el lago para llegar a esta terraza, con preciosas vistas al estanque. Conviene llegar pronto a cenar si se quiere comer en las mesas más cercanas a la orilla (se llenan rápido). La comida es selfservice en el Biergarten (no así en el restaurante interior, más caro y refinado). Recuerdo haber cenado un codillo sabroso, con un chucrut muy jugoso. La cerveza es Paulaner. Todo muy bien de precio.

Cerveza: 8
Comida: 6
Precio: 20-25€

Gasthaus Jagdschlössl (Nymphenburger Straße 162)
Dejo para el final el restaurante que más me ha gustado de todos los que he visitado en Munich. Lo conocí gracias a una recomendación del autor del blog Muniqueando (visitarlo, es un blog bien escrito y actualizado constantemente muniqueando.com/) Está ubicado junto al metro Rotkreuzplatz, en un bonito barrio residencial que está a sólo a 3 paradas de metro de la estación central (es una buena opción si vuelves en metro de ver la zona del Estadio Olímpico y el Museo BMW). El Gasthaus Jagdschlössl destaca por su comida casera, con ese punto de comida ‘de verdad’ que cuesta encontrar en las grandes cervecerías del centro. Nada más entrar por la puerta de este acogedor restaurante, cuyas paredes están adornadas de ciervos y otros motivos relativos a la caza, sientes que estás en auténtico restaurante familiar muniqués. En las mesas, pocos turistas, la mayoría alemanes que parecen ser parroquianos habituales. ¿Y la comida? Uf, todo buenísimo: ensaladas, verduras, schnitzel con crema de champiñones, el ‘Festín de la granja’ con todo tipo de carnes… La cerveza, Agustiner, está muy bien servida. La cuenta está por encima de la media de las cervecerías pero la diferencia se paga con gusto. Un sitio para volver cada vez que visites Munich.

Cerveza: 8
Comida: 9
Precio: 30-35€

Espero ir descubriendo nuevos locales. Para próximas visitas tengo apuntados el Ratskeller München (en el ayuntamiento) y el Hanxbauer (codillos!).

Prost!

Hola, acabo de llegar de Munich y os dejo una recomendación, esta vez no se trata de una cerveceria,sino de un restaurante italiano con muy buena calidad-precio, se trata de "bella italia"

www.bella-italia-asamhof.de/

Está justo detrás de la preciosa iglesia Asamkirche, hay como una calle peatonal, con varios restaurantes, con unas terrazas totalmente apetecibles, la guía de cogimos en Munich, nos comentó que en esa zona se comía bien y barato ¡y que razón tenía!,el camarero italiano que te entiende y se hace entender y la comida muy buena, a veces se agradece descansar un poco de tanta salchicha...

3 pizzas, 2 cervezas de medio litro y tres refrescos grandes 37€

Brutal kilean,excepcional recorrido gastronomico por Munich,todo apuntado y copiado para mi proxima visita.Gracias¡¡¡¡¡

De nada! Seguiré ampliando las referencias!

Kilean, muy buen reportaje.