Alaelma
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Hola viajeros,
Les escribo para recomendarles a los chicos de Tabia, son excelentes personas y no son simplemente comerciantes como muchas otras agencias, sino que valoran el lado humano y al menos en mi experiencia han comprendido perfectamente que no puedo hacer el viaje por motivos personales (tengo un familiar directo muy enfermo) estando a 2 semanas del safari. Yo no habia alcanzado a hacer la transferencia pero de todas formas ellos se preocuparon y me dijeron en repetidas oportunidades que lo primero son los nuestros! Así que aunque no haya hecho aun un safari con ellos debe decir que solo con este gesto tan humano me dan plena confianza y animo a que viajeis con ellos!
Por mi parte estoy bastante triste por lo de mi familiar y porque no podré hacer este viaje soñado, que era le primer gran viaje en mi vida, y el que estuve preparando desde hace un año o un poco más, leyendo guias, el foro, etc. Hasta tengo las vacunas puestas!
Bueno los que podais hacerlo disfrutad por mi!!!!
Jambo!!
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Anitaanita
Super Expert
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Ya hemos vuelto de Kenia y Tanzania con Tabia, hemos hecho un recorrido de 6 días en cada país.
El viaje ha sido muy bonito y estamos muy contentos de haber elegido a Tabia.
En cuanto a los guías, en Kenia el nuestro fue Martin, un guía correcto, poco hablador, pero estuvimos contentos con él, nada que objetar.
Al llegar de madrugada a Nairobi, con Egyptair, nos habían perdido el equipaje a los cuatro amigos que íbamos.
En el aeropuerto, tras hacer el correspondiente parte de irregularidad de equipajes, Egyptair quedó en mandarnoslo a nuestro alojamiento, ( que en este caso era en Masai Mara ), pero no fue así, y estuvimos sin maletas 4 días hasta que Tabia las recuperó, y fueron ellos los encargados de transportarlas a Masai Mara.
Para conseguir las maletas, necesitaban nuestro pasaporte, y no había manera de hacer una fotocopia, ya que en el alojamiento carecían de fotocopiadora, internet, teléfono, etc. Gracias a que mi marido llevaba en un pen - drive los pasaportes escaneados, y se lo pudimos dejar al guía para que se lo pasara a un compañero que iba a ser el encargado de recoger las maletas en el aeropuerto. Así y después de cuatro días sin maletas, las pudimos recuperar.
Conocimos a Tina y Eugeni en su agencia en Arusha, cuando íbamos camino del lago Nakuru, la verdad es que la primera impresión fue buena.
Tras hablar con ellos, nos comentaron de la posibilidad de cambiar el campamento que habíamos elegido en el Serengeti, (teníamos el Ikoma de Pepe, y nos dijeron que el suyo estaba dentro del parque y que íbamos a estar mejor en cuanto a desplazamientos, etc). Cambiamos al Tabia mobile, y siendo sincera, al llegar allí me llevé un poco de " chasco ", ya que no me lo imaginaba así, sobre todo sin lavabo y grifo, pero tengo que decir que pasadas las 2 noches, el balance es positivo.
La cama era muy cómoda, la comida estaba bien, los empleados eran atentos y la tienda estaba siempre impecable, además hay que decir que realmente la situación era importante, y estábamos muy bien para todo.
Por todo esto, totalmente recomendable.
En Tanzania, nuestro guía fue Ray, un chico muy majo, y que nos contó muchas cosas del país y de los animales que íbamos viendo, muy hablador. Iba acompañado de Uruma, el conductor, un experto en encontrar animales, se puede decir que los olía, je, je. Iba buscando huellas, se preocupaba de encontrar los animales que más nos interesaban, en fin, genial con los dos, auténticos profesionales.
En cuanto a los dos países, a nosotros nos gustó más Tanzania, pero cuestión de gustos, y por supuesto un papel muy importante en esto, tiene la cantidad en este caso de animales que puedes tener la suerte de ver.
En nuestro caso, hemos visto mucho en Masai Mara, pero más en Serengeti.
En Masai Mara hemos visto leones copulando, persecución infructuosa de leona a gacela Thomson, leona comiendo ñu y león que viene rugiendo a echarla, guepardo tumbado a la sombra, etc, esto es lo más destacable.
En Serengeti, tras tener una avería en el coche, y llevarlo al garaje que hay en el parque, cuando ya dábamos por perdida la tarde, pues camino al campamento, tuvimos el premio de ver 10 cachorros de león con 3 leonas, jugando en una charca, fue francamente espectacular, e hizo que se nos olvidara la avería del coche.
Hay veces en las que un avistamiento de este tipo, te arregla el día.
También vimos una leona en un árbol, y cómo bajaba, un guepardo con 3 crías, un par de leopardos, leonas acechando para cazar una manada de búfalos, otras intentando cazar gacelas.
En Ngorongoro un guepardo mirando cómo cazar una manada de búfalos, pero siempre vigilado por unas cebras que se íban turnando haciendo guardia para tenerle controlado.
Todo esto como algo destacable, entre los animales considerados más difíciles.
También tengo que decir, como nos dijeron en un viaje a Sudáfrica, que la vida salvaje es imprevisible, y muchas veces frustrante, ya que también hemos pasado horas sin ver nada, y ya te duelen los ojos de querer ver y no ver.
Lo que también me gustaría comentar y que no había leído por ningún sitio, es la cantidad de polvo que hay en las carreteras, y sobre todo en las de los parques, la ropa y uno mismo, se pone hecho un asco. Los que vayais a ir, id preparados para cubriros con algo, dejando los ojos a la vista, eso sí.
Y algo para proteger vuestro equipo fotográfico.
Hasta dentro de las maletas había polvo, es increible.
Las carreteras en general están bastante mal.
En cuanto a las comidas, en general bien, evidentemente en algunos hoteles, como en el Nakuru Lodge y en el Sentrim en Amboseli, mucho mejor que en el resto, siendo un buffet muy amplio y bueno.
Cuando vas de picnic, todos los hoteles te ponen lo mismo: huevo cocido, pollo, zumo, agua, fruta, un dulce y dos rebanadas de pan de molde untadas con mantequilla.
Yo como soy un poco especial, me llevé mis sobres de embutido, y me solucionaban bastante.
La última noche en Arusha, nos cambiaron de hotel ya que el Outpost estaba lleno, y nos llevaron al Impala, un hotel muy bonito, cómodo y genial. Allí se acercaron mientras estábamos cenando, Tina, Eugeni y Naiman, su socio en Tanzania. Pese a estar a tope de trabajo, estuvimos hablando con ellos un buen rato, ya que era una maravilla oir sus historias y experiencias.
La verdad es que a la gente que le gusta viajar, como es nuestro caso, nos encanta compartir vivencias con otros viajeros, como en esta ocasión Tina y Eugeni.
Si alguien tiene alguna consulta que hacer, estaré encantada de ayudarle.
Y si alguien tiene dudas de viajar con ellos, comentar que no os lo penseis, sin duda alguna, si tardan en contestar los mails, insistid y sed pacientes, que como comentamos con ellos, es su punto débil y lo saben, pero tienen mucho trabajo. Yo miraba todos los días el correo esperando su respuesta, pero calma, que al final llega, y sin duda merece la pena por todo.
Y para finalizar, no sé si Tina y Eugeni leerán esto o no, pero desde aquí darles las gracias y desearles suerte, y quién sabe, algún día igual nos volvemos a encontrar o viajamos con ellos a algún otro sitio.
Saludos desde Bilbao
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