Unos días después de volver de mi viaje por Chile, paso a comentar con un poco más de detalle las excursiones que realicé.
Desde Coyhaique realicé las siguientes excursiones:
- Capillas de Mármol
- Ventisquero Queulat
- Seis lagunas
Estas excursiones las contraté con "Buen Viaje Tour Operador". Las dos primeras por anticipado, adelantando un 33% del precio total de las excursiones, cada una de las cuales costaba $55000 y que incluía el almuerzo y la recogida en el alojamiento. El resto se abonaba al comienzo de la excursión. La de Seis lagunas la reservé allí mismo.
1. Capillas de Mármol
Probablemente la excursión con la que más haya podido disfrutar durante todo el viaje por Chile, pese a realizar en un día cerca de 450 km en furgoneta y pegando botes por el ripio. El buen tiempo, soleado y sin hacer frío, ayudó por descontado.
Inicialmente había valorado desplazarme en autobús desde Coyhaique hasta Puerto Río Tranquilo y hacer desde allí el paseo en barca por el lago General Carrera (y aprovechar para glaciar San Rafael y quizás valle Exploradores). Sin embargo, hubiese sido un error, porque me habría perdido el gran número de miradores en los que paramos durante el viaje.
- Salto de agua del río Pollux
- Laguna Chiguay
- Mirador Cuesta del Diablo: La primera gran panorámica del día, con una vista del Cerro Castillo y del valle del río Ibáñez y sus numerosos meandros, que tras un recorrido de 88 km desemboca en el lago General Carrera. La carretera por la que se va bajando describe así mismo numerosas curvas.
- Villa Cerro Castillo: Es el pueblo más cercano a la reserva natural de Cerro Castillo, en la que se puede hacer una excursión a la cueva de las Manos. En el pueblo paramos a ver el monumento dedicado al gaucho y luego en la hostería Villarrica para tomar el desayuno. Compartí con otra persona de la excursión un sandwich típicamente chileno de churrasco con palta (aguacate)
que me costó $2400 (mi parte).
- Garganta del río Ibáñez
- Mirador Ibáñez 2: Otra impresionante panorámica con el río Ibáñez y Cerro Castillo.
- Laguna Verde: El desagüe de la laguna da lugar al río Manso, que es el más corto de Chile
- Mirador Confluencia: Denominado así por ser la confluencia de dos ríos, el Ibáñez y el Manso. El río Manso es el más corto de Chile. Por lo que más destaca visualmente este mirador es por el diferente color del agua de los ríos que se juntan, uno de color más lechoso y el otro más azul turquesa.
- Laguna Cofré
- Valle del río Murta
Empezamos a ver un montón de flores de unas plantas que se llaman lupinos, pero que en esta región de Chile se conocen con el nombre de "chochos". Pueden tener color amarillo, rojizo, violeta (el color en el que más las vi) o tirando hacia blanco. Antes de llegar al lago General Carrera hicimos la pausa para comer en una casa.
Hasta este punto había temido que a lo largo del viaje se fuese estropeando el tiempo y que al final la lluvia o el viento pudiesen estropear o impedir la navegación por el lago General Carrera. Sin embargo, el guía de la excursión confirmó tras informar a la "empresa" de barcas en Puerto Río Tranquilo de nuestra hora de llegada, que hacía buen tiempo y nada de viento.
Tras no pocas fotos del lago General Carrera durante el corto tramo de 25 km que nos separaba de Puerto Río Tranquilo, llegó el turno de hacer el paseo en barca para ver las formaciones de mármol en el lago General Carrera: las Cuevas de Mármol, la Capilla de Mármol y la Catedral de Mármol. El paseo fue todo un disfrute y el rato que estuvimos en estas formaciones geológicas un sin parar de hacer fotografías: la forma que han adquirido, el colorido, que resaltaba con el contraste del agua, las cavidades que hay en el interior de estas "grutas". Incluso las barcas entran en alguna de estas cavidades en la medida de lo posible.
La navegación dura sobre una hora y media.
El regreso a Coyhaique fue casi de una vez, aunque paramos en el mirador del bosque quemado, para ver los efectos de la erupción del volcán Hudson en 1991. Los árboles están calcinados y fragmentados.
2. Ventisquero Queulat
Salimos en dirección a Puerto Aysen parando en primer lugar en el mirador Luis Marchant. Desde allí se puede ver toda la ciudad de Coyhaique y el valle del río Simpson.
Luego continuamos por la Reserva Nacional Simpson hasta llegar a la cascada de la Virgen. Este es un punto de peregrinación, puesto que a pocos metros de la cascada hay una gruta establecida como santuario a la Inmaculada.
Antes de llegar a Puerto Aysen la ruta se desvía hacia Villa Mañihuales para enlazar con la ruta austral norte. A partir de aquí fuimos parando en los siguientes lugares:
- Puente Mañihuales
- Villa Mañihuales: Paramos en el café Lucymarc. Desayuno para tomar un chocolate caliente y una deliciosa porción de kuchen de arándanos y frambuesa ($3500).
- Lago Las Torres
- Puente Cisnes
Seguidamente comenzamos a atravesar el Parque Nacional Queulat. Como comenté en mensajes anteriores, la carretera, que es de ripio, no está actualmente en muy buen estado, creo que por algunas inundaciones de no hace muchos meses, así que está en obras. Hay unos cuantos cortes de tráfico y se puede hacer pesado, ya que paran la circulación en un sentido durante 20 minutos.
Con respecto al paisaje me dio la impresión de que el bosque estaba demasiado seco como para estar tan sólo a finales de primavera. Los colores parecían más bien los típicos de un bosque después del verano
- Fiordo Queulat
- Puyuhuapi: Parada para comer.
- Ventisquero Queulat: Temía que no llegásemos antes de las 17:00 (hora de cierre) a la entrada de CONAF, debido a los numerosos cortes de carretera, pero afortunadamente llegamos a las 16:30.
En el sector Ventisquero hay varios senderos que se pueden recorrer:
- Sendero accesible: Desde el aparcamiento se accede en pocos metros a un mirador desde el que se contempla el Ventisquero Queulat.
- Sendero panorámico: Son unos 3 km aproximadamente
- Sendero de la laguna de los Témpanos: Deben ser unos 600 m a través de un bosque hasta llegar a una laguna detrás de la cual se ve el Ventisquero Queulat, desde el que desciende una cascada. Esta lengua de glaciar está también en retroceso (antes se conocía como Ventisquero Colgante Queulat). Estuvimos un rato disfrutando del paisaje antes de iniciar el regreso.
- Mirador río Cisnes
- Nueva parada en el café LucyMarc para tomar esta vez una porción de kuchen de ciruelas
A partir de Villa Mañihuales hasta Coyhaique tomamos la carretera austral por Villa Ortega, que fue uno de los tramos que más me gustó, porque estaba repleto de lupinos con flores. Para verlas hay que aprovechar los meses de noviembre y diciembre, antes de que las temperaturas comiencen a ser demasiado altas.
La excursión tuvo el mismo recorrido en km que la del día anterior, pero se me hizo más pesada, quizás por el cansancio de tantos tramos de ripio.
3. Seis Lagunas
Excursión de medio día que valía $29000. Sin duda alguna la menos sorprendente de las 3 excursiones, no porque el paisaje fuese feo, sino porque me recordaba por completo con sus montañas con prados verdes y lagunas a un lugar del norte de España, por qué no Asturias o Cantabria.
Las primeras paradas son en la ciudad de Coyhaique:
- Monumento al mate: El mate no es una costumbre únicamente argentina, sino que es compartida por los gauchos de Argentina y Chile. Aprovechamos a hacer las fotos tontas tomando mate
- Piedra del Indio: Una roca sobre el río Simpson que parece (con un poco de imaginación) la cara de un indio.
- Mirador del río Simpson
Posteriormente nos adentramos por zonas más rurales hasta el pequeñísimo pueblo de Villa Lago Atravesado. Aquí tuvimos el momento "compras", cuando visitamos el taller de una artesana que trabajaba con la lana de ovejas y nos explicó de forma general el proceso que seguía desde que obtenía la lana hasta que la tejía. Luego pasamos a la casa, donde nos obsequió con el desayuno: té o café, pan con mantequilla y mermelada (ruibarbo, rosa mosqueta, etc...) y unos dulces. Esto dio paso a la "sobremesa" y a hablar de diferentes temas. Por lo menos estuvimos allí una hora y pico. Ya pensaba que nos quedábamos allí a comer
y sin ver las lagunas, pero por suerte conseguimos "arrancar" de nuevo.
Por último, entramos en el sector Seis Lagunas, conocido así porque hay 6 lagunas, que fuimos viendo desde la furgoneta y/o haciendo cortas paradas para hacer fotos. El último lugar en el que nos bajamos fue en el lago Elizalde.
De 4 horas que se suponía que duraba la excursión, terminaron siendo sobre 5 horas.