El Palacio de la Bolsa de Madrid ✏️ Diarios de Viajes de EspañaTodos conocemos este grandioso edificio que podemos admirar muy cerca del Museo del Prado y al lado mismo del Hotel Ritz. Sin embargo muy pocos pueden decir que hayan entrado en él aunque todos lo hemos visto por TV pues sirve de fondo para las...Diario: El Madrid olvidado⭐ Puntos: 4.9 (31 Votos) Etapas: 18 Localización: EspañaTodos conocemos este grandioso edificio que podemos admirar muy cerca del Museo del Prado y al lado mismo del Hotel Ritz. Sin embargo muy pocos pueden decir que hayan entrado en él aunque todos lo hemos visto por TV pues sirve de fondo para las noticias de la Bolsa. Pues este bello edificio del siglo XIX puede visitarse por el público en general mediante visitas guiadas de las que podemos obtener más información en este enlace. www.bolsamadrid.es/ ...isita.aspx Para realizar la visita hay que reservar previamente plaza y enviar un mail a la dirección de correo electrónico “electrónico:exposicion@grupobme.es” aportando el nombre, los apellidos, el número de DNI, la fecha de nacimiento y nuestro correo electrónico. También podemos reservar llamando a los teléfonos 9158910520 y 915891162, en horario de 9,30 a 13,30. La visita se realiza los jueves a las 12,00 horas y es gratuita. Un poco de historia Aunque esto de La Bolsa nos suene a algo propio de los tiempos actuales, en realidad las operaciones mercantiles han acompañado al hombre desde los inicios de su existencia habiendo pueblos en la antigüedad famosos por dedicarse al comercio como principal actividad, como los fenicios. Mucho más cercanos en el tiempo, ya en la Edad Media, encontramos en España edificios dedicados a actividades parecidas a las bursátiles, como son las Lonjas de Contratación en donde se comerciaba con seda, lana, grano, pescado y otros productos, como las existentes en Valencia, Zaragoza, Palma de Mallorca, etc. Foto. Lonja de la Seda. Valencia Sin embargo hay que esperar hasta el siglo XVII para que aparezca la que se considera la primera Bolsa y lo hace en Amsterdam en 1602, aunque hay quien dice que realmente la primera se creó en Amberes en 1460, todo depende de lo estrictos que sean con las condiciones para considerarlo “bolsa”. En España el primer intento formal de crear una Bolsa a imagen de las existentes en otros países se debe al tan denostado José Bonaparte en 1809. Pero no tuvo ningún éxito en su empresa, no se sabe si por el mero hecho de proponerlo un francés o porque realmente la sociedad no estaba preparada para ello. Hay que esperar hasta el 10 de septiembre de 1831 para la creación efectiva de la Bolsa de Madrid. ¿De dónde procede el curioso nombre de La Bolsa? Procede de la ciudad de Brujas. En este lugar habitaba una familia apellidada “Van Der Büerse”, (büerse es bolsa en holandés) dedicada a las operaciones mercantiles y que lucía en su escudo tres bolsos de los que usaban las señoras (faltriqueras por estas tierras nuestras). Como solían reunirse a las puertas del palacio y justo encima estaba el escudo con los tres bolsitos pues la gente dio en llamarlo La Bolsa y con el nombre se quedó. El Palacio de la Bolsa Durante muchos años las reuniones se efectuaron en diversos edificios, iglesias, conventos, palacios, edificios oficiales, en fin, donde podían. Esta situación no era la apropiada para una institución tan principal como era la Bolsa, así que en 1878 el Estado cede un solar en la plaza de la Lealtad y se financia el edificio mediante la emisión de obligaciones con un presupuesto inicial de 1 millón de las antiguas pesetas. Naturalmente, teniendo en cuenta el país que nos cobija y la clase de personas que intervinieron en ello (financieros, banqueros, potentados), la construcción se llevó a cabo bajo el lema “sin reparar en gastos” con lo que el presupuesto inicial se multiplicó por tres y cada vez había que emitir nuevas obligaciones para sufragar los nuevos gastos y nunca se podía hacer frente a esa nueva deuda (¿os suena? ). Al final el Estado se hizo cargo del pago de la deuda (parece que esto es tradición ) pero en esta ocasión actuó de forma inteligente y se incautó el edificio por lo que hoy este Palacio de la Bolsa forma parte del Patrimonio Nacional. Para llevar a cabo la construcción de este edificio neoclásico se procedió a convocar un concurso que fue ganado por el arquitecto D. Enrique María de Repullés y Vargas que aportó el lema “Sin paz no es posible el progreso” y que puede verse en los muros interiores del palacio. Este arquitecto era hijo de un agente de cambio y bolsa por lo que conocía sobradamente las necesidades de los cambistas para llevar a cabo su trabajo diario por lo que el edificio da soluciones eficaces a estas necesidades. Para llevar a cabo la decoración del palacio se contrató al escultor Francisco Molinelli y al pintor Luis Taverner, ambos artífices de las obras que adornan el edificio. La idea original era crear un “Templo de la Economía” y a tal efecto se proyectó un edificio con planta basilical y altos techos y se concibió para que la luz entrara a raudales y para ello se le dotó de un amplio lucernario que permitiera el paso de la luz en la mayor superficie posible. Esta gran superficie requería una enorme cantidad de vidrio lo que aumentaba grandemente el peso que debían soportar las guías por lo que se pensó en proporcionar al lucernario de una estructura de hierro a imagen de la Torre Eiffiel. Este lucernario aporta luz a lo que se denomina “el Parquet”, la zona principal del edificio, toda ella solada en madera (parquet) y en donde se efectuaban las operaciones de cambio y bolsa, con una zona central con asientos dispuestos en forma de “corro” idónea para llevar las operaciones. Así en esta zona se reunían, por ejemplo, para realizar las operaciones referentes a la contratación de la seda, pasados 15 minutos se tocaba la campana que hay en la columna justo detrás de este “corro” y se formaba un nuevo “corro” con los cambistas de grano (p.e). De ahí el nombre de “corrillos” que perdura hasta hoy. Esta zona central se encontraba rodeada de una verja. Alrededor de esta zona hay una amplia superficie abierta apropiada para acoger al resto de operadores y una especie de galería porticada que acogía pupitres y otro mobiliario auxiliar Y todo ello con una decoración exuberante, recargada, casi propia del barroco. Todo este espacio central que forma el Parquet es una planta diáfana de techos altísimos pues abarca las dos alturas del resto del edificio y también el espacio bajo cubierta, pues ya hemos dicho que no hay tal sino un lucernario. En vertical podemos hablar de tres pisos, el primero rodeado por una galería o pasillo corrido que rodea al parquet y delimitado por amplios arcos de medio punto separados por amplias columnas cuadradas adornadas con columnas apuntadas de fuste acanalado y capiteles adornados con caduceos, elemento decorativo que encontraremos en todas las habitaciones del palacio. Justo encima de esta primera galería abierta encontramos una segunda galería, esta vez acristalada, formada también por altos arcos de medio punto adornada con balaustrada de mármol rosa y columnas de fuste recto con capitel. Sobre estos capiteles volvemos a encontrar otro caduceo dorado y sobre él el escudo de uno de los países con los que se realizaban operaciones bursátiles, con hojas de roble y olivo. (roble por la solidez y olivo como ofrenda) Rematando este segundo piso encontramos una cenefa de adorno formada por una sucesión de caduceos tumbados. Justo encima de cada uno de los escudos de las naciones ya nombradas encontramos una faltriquera dorada en recuerdo de aquella que dio su nombre a la institución y encima del arco de medio punto se encuentra otro escudo. Y encima de todo ello la cubierta que sustenta el lucernario. Esta cubierta está formada por una sucesión de ventanas en forma de semicírculo con sus radios señalados, imitando un pequeño sol. Sobre cada uno de estos pequeños ventanales se encuentra un triángulo con el escudo de una provincia española y más arriba una pintura alegórica con una mujer que representa esa provincia rodeada de los objetos propios de su economía. Como curiosidad y teniendo en cuenta la época en que se levantó este Palacio podemos encontrar los escudos de Cuba y Filipinas pues todavía no había ocurrido el desastre del 98. Pero este Palacio alberga otras salas menos espectaculares pero también muy interesantes. Una vez que subimos la escalinata que da acceso al palacio nos encontramos en el Recibidor, pieza amplia y relativamente humilde que sirve como distribuidor hacia el parquet y los salones y salas de las plantas superiores. Subiendo las escaleras se accede al primer piso donde podemos admirar el Salón de los Pasos Perdidos. Este admirable salón era utilizado como una zona más personal y recogida y aquí se negociaban aquellos tratos que requerían cierta intimidad y una tranquila conversación. Era el lugar por el que pasear con calma y esperar a los otros para llevar a término las operaciones mercantiles, de ahí ese nombre de “pasos perdidos”. Nos encontramos ante un salón formado por arcadas de medio punto y, como siempre, con una magnífica decoración: suelos y zócalos de mármol, dorados, escayolas, cristales serigrafiados y otro lucernario. Voy a explicar aquí que es eso del “caduceo” del que anteriormente he hecho mención. El término “caduceo” es de origen griego y significa “vara de olivo adornada con guirnaldas”. Los romanos lo utilizaban este símbolo para representar a Mercurio, el mensajero de los dioses, dios, a su vez, de comerciantes y ladrones . Pero con alguna diferencia esencial: sustituyeron las ramas de olivo por dos serpientes enroscadas y terminado en dos alas, símbolo de Mercurio. Este símbolo ha sido utilizado profusamente en la decoración del palacio pues no hay que olvidad que Mercurio es el patrón del Comercio y este es el santuario dedicado a esta actividad. Si nos fijamos veremos que en algunos de estos caduceos se han sustituido las serpientes por dragones. Y también podemos dedicar una mirada tranquila a los ventanales y puertas que adornan esta sala pues son de una gran belleza y se conservan los originales. Al lado de este salón encontramos otro más modesto que lleva por nombre Salón de Fumar. Este salón se usaba como un lugar todavía más discreto que el anterior para llevar a término negociaciones que requerían mucha más intimidad. Además tenía otro uso particular, como su propio nombre indica. Dentro de los salones públicos y de relumbrón se encuentra el Salón de Cotizar Este salón se utilizaba para las grandes ocasiones, reuniones de los síndicos, votaciones, etc. Y también era el lugar en donde se reunían a diario los corredores para poner en común las cotizaciones alcanzadas y comprobar que no había discrepancias, en caso contrario tenían que llegar a un acuerdo en ese mismo tiempo y lugar. Volvemos a encontrar una sala con una decoración muy barroca: madera en suelos y zócalos, alfombras, papel pintado en color rojo, cenefas decorativas, frescos en el techo, muebles de madera noble, tapicerías de cuero, escribanías de plata, cuadros adornando las paredes, lámparas a juego, etc. Y uniendo estos salones una galería corrida terminada en arcos de medio punto acristalados que mira al parquet y que podemos admirar desde la planta baja. Esta galería se usa actualmente para exponer alguno de los tesoros que guarda la institución como son el libro mas antiguo que existe que trata sobre la Bolsa y máquinas antiguas que se usaban para poder llevar a cabo el trabajo que allí se realizaba. El Palacio de la Bolsa en la actualidad La aparición de la informática supuso el fin de las operaciones bursátiles tal y como se realizaban hasta ese momento. Se acabaron el papel, los pupitres, los gritos, los corrillos, las discrepancias, etc. Y con ellos se acabó el tiempo de este palacio, quedó totalmente obsoleto y hoy en día ya no se utiliza como punto de negociación. Las verdaderas operaciones de bolsa se realizan en un nuevo edificio situado en la Carretera de la Coruña y este palacio ha quedado relegado a las funciones de representación y propaganda. Apenas 80 personas trabajan en este palacio y todas ellas ejercen funciones de cara al exterior: publicidad, marketing, cursos, relaciones con la prensa y el público, etc. Índice del Diario: El Madrid olvidado
Total comentarios: 54 Visualizar todos los comentarios
📊 Estadísticas de Etapa ⭐ 5 (2 Votos)
Últimos comentarios al diario: El Madrid olvidado
Total comentarios: 54 Visualizar todos los comentarios
CREAR COMENTARIO EN LA ETAPA
Diarios relacionados De viaje por España
Pueblos, ciudades y naturaleza. En coche y rutas de senderismo. Destinos y recorridos clásicos y lugares no tan conocidos. Lo iré ampliando e incorporando...
⭐ Puntos 4.79 (99 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 314
Senderismo por España. Mis rutas favoritas: emblemáticas, paseos y caminatas
Recopilación de algunas de las rutas de...
⭐ Puntos 4.94 (16 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 220
Paseando por España-1991/2015-Parte-1
En este diario me voy a centrar más en todo lo relacionado con la naturaleza. rutas...
⭐ Puntos 5.00 (6 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 183
Comunidad de Madrid: pueblos, rutas y lugares, incluyendo senderismo
Recorrido por lugares bonitos de la Comunidad de Madrid...
⭐ Puntos 5.00 (5 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 156
Recorriendo Andalucía.
Recopilación de todas las etapas de Andalucía que estaban en mi diario De viaje por España junto con las nuevas que iré incluyendo, aunque el general...
⭐ Puntos 5.00 (6 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 155
Galería de Fotos
|