12 Dias por Maldivas, Dubai y Abu Dabhi ✏️ Blogs de Maldivas

Ukulhas, la verdad es que guardamos un grato recuerdo de esa isla y de la gente que vive en ella.
Bueno nos levantamos y había un chico esperando para ponernos el desayuno en una mesita del patio, desayuno normal, bañador toalla y para la playa, pues teníamos unas ganas increíbles de ver ese mar azul.
La playa la teníamos cruzando el camino, justo detrás de la vegetación, nos habían preparado un par de hamacas con sombrilla, emocionados y prrreeecciooossssooo, un agua azul, una arena completamente blanca, la playa no era ancha, si larga, pero mirando no había nadie, solos, así que para el agua la cual tenía una temperatura ideal, nada de frio. Tomar nota llevar calzado para bañarse, pues esa arena tan blanca son corales molidos y al adentrarse había trozo de los mismos, por lo que era molesto para andar.
Ana, la profesional playera se pone a practicar tumbona y yo el culo inquieto, marcho a ver lo que hay por la playa dirección sur, al final llego a la punta de la isla y ahí si hay un banco de arena súper ganso y no te hacen falta calzado, todo arena súper blanca y agua azul cielo, turquesa, cristal….. una pasada, también había un par de hamacas con sombrilla, ponía el nombre de otro hotel, pero no había ni un alma. Estoy un rato y decido seguir un poco mas bordeando, al final creo que vi otro par de turistas en sus hamacas, pero nadie más.
Regreso y le comento a Ana el sitio, total que recogemos bártulos y nos fuimos para allá, estuvimos toda la mañana.
Por la tarde, decidimos dar toda la vuelta a la isla, era muy pequeña, vamos como casi todas, viendo conchas, el mar y parece que algún tiburoncillo…. Si, me iba a bañar en una especie de lago color turquesa, pero Ana vio un pececillo, total que por precaución nada.
Siguiendo rodeando, llegamos al puerto en cuyas calles estaba la gente local, nos llamo la atención la cantidad de niños, pillamos la salida del cole, vimos una tienda y compramos unos helados y galletas, nos sentamos en unos bancos muy curiosos que hay por allí, son unos cuadrados en hierro con una red, están muy bien, pues te pasa airecito por todos los lados y estas como tumbado….
Al final terminamos otra vez en el puntal, ya había algo más de gente, una pareja que les estaban preparando el sitio para una cena romántica en la playa, otra pareja local con los niños y un grupete de chavales, se nos acercó uno que conocimos en la lancha, estuvimos mucho rato charlando con el, resulta que el chico era compositor de rap y se movía por las islas dando conciertos. Nos invito a ver los tiburones por la noche, si parece que uno de los entretenimientos de los chavales es atraer a los tiburones en la laguna norte donde estuvimos antes (si era un tiburón lo que vimos, chiquitillo….), una persona fantástica.
Total que esperamos a la puesta de sol, muy bonita y ya anochecido marchamos al hotel, elegimos la cena en recepción y les dijimos a que hora íbamos a cenar (el sistema es así), total que asearse y a la hora estábamos en el restaurante, ya os comente nada de lujo, pero comida buena y el plato de fruta espectacular.
Después de cenar, pasemos por la calle principal, la iluminación es justita, pero no hay problema, en la isla se conocen todos y si no son hermanos, son primos o pariente muy cercanos.
En la plaza, bueno enfrente del puerto vemos que hay una proyección en un cuadrado de hierro, volvemos a ver al chico y nos comenta que como no tienen todos tele, pues ponen las noticias, curioso pero no tanto pues es como nuestro cine de verano.
Al final terminamos en la terraza de un café que vimos de nueva construcción, lo llevaba gente thai, el café bueno y lo que mejor vimos fueron los zumos, tenían muy buena pinta. Como nota en este establecimiento, fijaros en los precios, pues cuando fuimos a pagar en moneda local, resulta que la carta estaba en dólares…… vamos los cafés un poco caros, pero bueno…lo pasamos bien.
Terminamos nuestro café y a descansar al hotel.

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Ya estamos por el séptimo día, esto va rápido y no te enteras.
Hoy tocaba traslados, a las 7:00 de la mañana estábamos en el puerto esperando la lancha rapidez para ir a Malé.
La comunicación, prácticamente es radial, así que si quieres ir a una isla que este en otro Atolón, pues no te queda otra que pasar por Malé.
El día anterior nos pusimos en contacto con el Resort, para comentarle nuestro plan de viaje, pues ellos se encargan de contratar el servicio de traslado al Resort.
A las 08:20 +- estábamos en el aeropuerto (isla de Hulhumale), allí nos estaba esperando una persona, la cual nos monto en un micro autobús y nos traslado al aeropuerto de los hidroaviones, ¡¡sorpresa¡¡, pensábamos que iríamos en lancha, lo cual nos alegro, pues podríamos ver muy bien las islas pasando a poca altura, bien……
Esperamos y como a la hora estábamos montando en el hidroavión, los dos pilotos (uno mu grande….), un asistente y unos 8 turistas que cada uno iba a un resort diferente.
Remontamos vuelo, y la vista es espectacular, si podéis tomar un bicho de estos, aunque ya os comento que es bastante caro, a nosotros el traslado i/v del hotel nos salió barato, por persona 280 $ (había una oferta por ser septiembre), lo normal es que vaya alrededor de los 400 $ por persona, si es alguna isla de más de una hora de lancha. Echar cuentas 400x2 = 800, caro, caro, caro, … al menos para mí, sobre todo si cuentas que un barco de línea regular normal te vale 4 $ y la lancha rápida 60$, mire y remire para ver si me podía acercar a una isla habitada cercana y luego de alguna forma acercarme al resort, pero es coto cerrao, los resort y la compañías lo tienen todo muuu amarrao.

Ahora toca amerizar, bien, lo gracioso es que como hay arrecifes, nos dejo en una plataforma flotante en mita del mar, Ana to asusta, que ella no se bajaba ahí, je….al otro lado estaban los señores del Resort con una lancha esperando, pero no la vio.

Hacer el checking y nos llevaron a nuestro bungalo, to mu jaguayano y precioso.
En la siguiente etapa os cuento.

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Bueno, pues ya estamos en el famoso Resort.
El Rihiveli es un Resort de 3 estrellas no es de los super, super, pero lo elegí porque tenía un precio aceptable, el transfer no era desorbitante, estaba a una distancia respetable de Malé y sobre todo porque las imágenes aéreas mostraban unas islitas cerca, vamos que no era un islote y punto.

www.rihivelimaldives.com/

La isla:
La isla no es de las típicas redondas, tiene una especie de laguna y muy cerca otras dos islitas a las que puedes ir en kayak o nadando, pues haces pie perfectamente si te cansas.
Se entra desde un largo embarcadero, donde tienen fondeadas las lanchas, está llena de arboles y vegetación, con caminitos que van a los diferentes bungaló, bar, centro de buceo y restaurante…..no tiene nada más.

Los bungaló:
Los bungaló, están situados rodeando la isla con la puerta orientada al mar, el nuestro estaba apuntando a la laguna y entre la vegetación veíamos las islitas, estaba muy bien orientado. Dentro, pues se les veía un poquito viejos, no es que estuvieran mal, pero se notaba que tenían sus años.
La configuración, pues porche con terracita y hamacas, entrada a la habitación y detrás de la habitación se entraba al baño, todo orientado en plan Robinson, con techos cubiertos de palma, suelos de tabla y con un ventilador de techo, una hamaca sujeta a las palmeras (muy cómoda) y un par de tumbonas.

Cosas que eche de menos:
No hay aire acondicionado, nosotros no pasamos calor, pero por la noche tenias que dejar el ventilador, para que corriera aire.
¿Donde está el televisorrr?, no había, yo que soy un teleadipto.
No hay nevera, tienes un termo que te lo llenan de agua sin coste.

La comida:
Nosotros contratamos régimen de MP, así que teníamos desayuno y cena que era a partir de las 20:00 horas
Ja…, muy importante, algo que no leí en ningún sitio y es importante. Cada Resort tiene su propia hora, así que preguntarla nada más poner el pie. Nosotros no lo sabíamos y nos enteramos como día y medio después de que trabajaban con una hora menos que en Malé. Así que cuando llegábamos al desayuno o la cena siempre veía gente y eso que llegábamos en punto ¿???

El restaurante una preciosidad, encima de la laguna, todo al aire y con un hueco en medio donde veías esa agua cristalina, alrededor del restaurante por la noche se veían peces, inclusive tiburoncillos, bueno de metro veinte, que se acercaban y daban un paseo por la zona, chulísimo.
Tanto el desayuno como la cena, fenomenal, nos poníamos las botas, pues como no habíamos comido nada, bueno miento, antes de ir al resort había comprado en una tienda bastantes galletas variadas, pa matar la gusa. Nosotros podemos aguantar bien sin la comida, cuando salimos de viaje, pues es eso ya que todo cierra temprano y si quieres ver cosas, pues bocata y a seguir, en este caso no era exactamente lo mismo, pero el precio de una comida eran 40€ persona que por dos son 80€, ya os comente que esto no es barato.
En cuanto a esto de la comida, luego vimos la carta del bar, que te hacen hamburguesas y algo de comida rápida, vimos platos que por 12$ podían suplir a una comida perfectamente, pero eso no nos enteramos hasta pasado algún día.
Consejo, la comida es muy cara, una posible forma de abaratar la estancia en un Resort es contratarlo solo con el desayuno y pedir que te envíen la carta del bar, para que puedas decidir si te interesa, también se puede, una vez allí, ir a cenar o comer al restaurante, te lo cobran y punto, no varía el precio de contratarlo al principio o allí mismo.
Si os vais a saltar alguna comida, hacer como yo, llevar galletas, Ana me dijo que donde iba, pero al final cayeron todas…..

Las actividades:
Al llegar nos dieron un cuadro de actividades free.
Todos los días había dos horarios (mañana y tarde) para hacer snorkel , altamente recomendable, nos llevaban en el barco, nos dejaban las gafas, aletas y pa el agua, cuando terminabas te daban unos trocitos de coco que estaban buenísimos, es para quitar el sabor de la sal, yo al final vaciaba el cuenco, je…La vida que veías en los arrecifes, no la he visto en otro sitio, entre otras cosas buceo con botella y esa vida no la había visto en otros sitios, maravilloso, un montón de peces tropicales, con un colorido….. vamos encantaos, tanto Ana como yo.
Luego teníamos kayak y dependiendo de los días, hacían algo como vóley, limpieza de la costa,….pero no penséis que son actividades como un hotel de Benidorm, creo que la idea del Resort o al menos de este, es que vas a descansar y estar tranquilo, así que no hay mucho, vamos para mi nada.
Un día organizaron una cena de blanco, vamos vestidos de ibicencos, prepararon las mesas en la playa con velas, y todos teníamos que ir vestidos de blanco, mu chulo, fue una cena con el mismo tipo de buffet, pero a la luz de la luna y las velas crea un ambiente romanico, perdón romántico mu majo.
Como anécdota, una noche anunciaron a bombo y platillo gran bingo, ja… los cartones estaban más manoseados que las llaves de mi casa, creía que esos ya no existían, pues si existen aun, nos dieron dos cartones por persona y como éramos cuatro gatos, no había línea y tenias que juntar los dos para cantar bingo, el premio una jarra de caipiriña. Adivinar quién canto bingo, pos yo, lo gracioso es que como eso del ingles no soy rápido, es posible que algún numero lo marcara por error, al final no comprobaron nada y jarra pal cuerpo, estaba tan malo que bebí un poco y ahí quedo, supongo que era caipiriña al estilo Maldivas, yo soy más de pacharán.
Contrate una inmersión en el centro de buceo, sinceramente no merece la pena, salvo que vayas a ver algo fuera de lo normal, como tiburones, el famoso tiburón ballena (ese solo se localiza por una zona de Maldivas)….. en mi caso tuve suerte, pues conseguí ver y sacarme unas fotos con una tortuga, pero en líneas generales ves lo mismo que con el snorkel, eso sí más cerca. La inmersión era de lujo, un barco con tres buceadores, tres instructores y tres tripulantes del barco, vamos uno te ponía las aletas, otro el traje, otro las gafas y otro el jaquet, es una broma, pero lo cierto es que yo tenía un instructor para mí solo. El precio, pues en la tónica de Maldivas, 130€, el día antes me comentaron que 86€, pero o no me entere, pero luego te cargan el barco, el equipo, el coco que te comes….total que cuando fui a pagar, una pasta, menos mal que solo pille una.
Mi opinión es que si vas a bucear no vas a un Resort, contratas un viaje de buceo que haces la vida en el barco y estas buceando por la mañana, por la tarde, por la noche. Pero ese no era mi caso.

Bueno, pues leyendo, haciendo alguna pequeña excursión a las islitas, tomando fotos, un poco el sol y comiendo se pasaron las 4 noches. Ana encantada y maravillada, yo…….

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