BRUJAS, LA CAPITAL DE FLANDES ✏️ Blogs de Belgica

La luz que traspasaba la ventana nos despertó, era temprano y teníamos que apresurar, había que aprovechar el tiempo ya que este iba a ser nuestro último día en Brujas.
Nos arreglamos, hicimos las maletas y bajamos a llenar nuestros estómagos con un último y rico desayuno. La verdad que nos daba mucha pena que estos 3 días hubieran pasado tan rápidamente, Brujas es una ciudad idílica y era muy triste despedirnos de ella.
Antes de dejar el Hotel nos dispusimos hacer una última cosa que nos habían recomendado, ver esta ciudad des de sus canales así que fuimos hacia la única parada abierta que había para coger un barquito y hacer un tour por las aguas de Brujas.


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Como veis en la fotografía, el barquito estaba llenísimo, pero aun así mereció la pena hacer este pequeño crucero, ya que te ofrece la posibilidad de ver rinconcitos que a pie no se perciben, a parte ver Brujas des de esta perspectiva es muy muy bonito. A nosotros nos encantó este viaje de 30 minutos por sus canales.
Después de esta agradable experiencia nos fuimos caminando hacia la zona norte de la ciudad. Buscando información para preparar la ruta de esta escapada había visto un sitio que me llamaba mucho la atención: Kruisvest Windmills

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La zona de los molinos de Brujas, y a mí que me gustan poco los molinos, jajajaja, pues allí que nos fuimos.
Aquí se puede llegar perfectamente andando, nosotros tardamos unos 20-25 minutos en un paseo muy agradable por las calles de Brujas.
Los molinos de Brujas están situados sobre unos prados verdes junto a la puerta de Kruispoort. Este recorrido donde se encuentran 4 molinos de viento en excelente conservación se puede hacer caminando o había mucha gente que iba en bicicleta.
Entre estos 4 molinos esta el más importante de todos que es: Saint Janshuis y data del s.XVIII. Esta situado en su lugar original y se puede visitar por 2€/persona. Nosotros lo encontramos cerrado, la verdad que fue una pena.
Después de hacer el recorrido y ver los 4 molinos y sus enormes aspas, buscamos una cafetería para hacer un descanso y calentarnos un poquito los cuerpos.
Entramos en la cafetería De Windmolen, ¡ME ENCANTO! Todavía la recuerdo a la perfección, era una cafetería pequeñita, con ramos secos que caían del techo, ollas, maquinas de coser antiguas, muñequitos de tela, plantas …vamos..muy original, muy vintage y muy única.

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Finalmente había llegado el momento de la despedida, así que nos dirigimos al Hotel y recogimos nuestras maletas. Hicimos una última parada en la Grote Mark, para memorizarla en nuestras mentes. Allí aprovechamos para comprarnos unas albóndigas y un estofado con patatas fritas, para comer, en una de sus paradas.

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Nos fuimos al mediodia ya que queriamos hacer parada en Bruselas para conocer su Grand Place, así que nos pusimos en marcha.
Paramos en la estación de Bruselas Midi y allí mismo dejamos las maletas en las taquillas de la estación.
Dando un paseo, en nada llegamos a la calle que da acceso a la plaza y de repente nuestros ojos se quedaron abiertos como platos…. ¡Que preciosidad! Mira que había oido hablar de esta plaza pero no me la imaginaba así.
De repente me sentí minuscula, ahí…rodeada de auténticas maravillas arquitectónicas, mirando de lado a lado, todo me parecia tan bonito que no sabia a donde enfocar mi mirada. Primero vi el Hotel Ville (El Ayuntamiento), despúes me llamó mucho la atención el dorado de sus casas Gremiales y ¡como no! El imponente Maison du Roi, este esdificio neogótico, con su fachada llena de arcos, su extremo detalle acompañado de sus estatuas, todo ello lo hace espectacular
Ya os digo, alli en medio me sentia minuscula. Nos quedamos minutos observandola y recorriendola para verla con más detalle.
Yo no me queria ir , no me extraña que fuera declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y que sea considerada una de las plazas más bellas. Es sin duda el corazón de Bruselas.

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Aquí las casas gremiales

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La Maison du Roi

Uno de los edificios que más nos impresionó fue la Maison du Roi (La casa del Rei)
Fue construido en 1536 y reformado en 1873. Se sitúa en frente del Ayuntamiento y hoy es el Musée de la Ville (El Museo Nacional), dentro se pueden ver pinturas, tapices y la exposición de los trajes de la pequeña escultura del Manneken Pis.
Este también se le ha conocido como Broodhuis (casa del pan) ya que en el s. XIII albergaba un mercado cubierto para los panaderos.

Después de pasar un buen rato admirando esta increíble plaza fuimos a dar un paseo por las calles de alrededor en busca de uno de los iconos más visitados de Bruselas, el Manneken Pis.
Rodeado de una masa de gente con cámara de fotos en mano, tuvimos que abriros paso para verlo. Sabía que era pequeño, pero aun así me sorprendió su tamaño. Allí estaba, una pequeña escultura de un niño de bronce de 65.5 centímetros. Si os soy sincera, no me gustó mucho, pero aun así, no puede irse uno de Bruselas sin ver lo.
La estatua, que actualmente podemos ver, de este niño pequeño orinando es una reproducción de la original ya que esta fue robada en el año 1960
La estatua original data de 1619 y fue creada por el escultor Jérôme Duquesnoy el Viejo. Esta fue protegida por los ciudadanos durante el asedio y bombardeo por los Franceses en el año 1695.
Por lo que nos dijeron y hemos leído, su simbología se refiere al espíritu independiente de sus habitantes.

Ya el tiempo apremiaba e íbamos a contrarreloj, pero no podíamos irnos de Bruselas sin visitar las Galerías Reales Saint Hubert, así que de camino hacia la estación hicimos un parada para ver las.

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Nos sorprendió mucho por su color rosáceo y la cantidad de luz natural que entraba des de su grande cúpula acristalada.
Estas constan de tres zonas: Galería de la Reina, la Galería del Rey y la Galería de los príncipes.
En ellas puedes encontrar des de joyerías, chocolaterías, cafeterías hasta un teatro y un cine.
Son una de las tres galerías cubiertas que puedes encontrar de entre las siete que se construyeron entre 1820 y 1880.

Y hasta aquí fue nuestra visita a Bruselas, corta pero intensa. Nos quedaron pendientes muchas cosas, pero teníamos el tiempo justo para llegar al aeropuerto así que nos dirigimos hacia la estación Bruselas Midi y nos fuimos directos para embarcar he irnos volando de vuelta a casa.

Espero que os haiga gustado este diario de viaje y la información os sirva para vuestras próximas escapadas a Brujas.

¡Muchas gracias por leernos!

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