Irlanda en 11 días ✏️ Blogs de Reino Unido e Irlanda

Recorrimos toda la isla de Irlanda en agosto de 2021, empezando por Dublín hacia el norte en sentido contrario a las agujas del reloj, acabando de nuevo en Dublín.

- Cómo llegar: volamos con Iberia Express Madrid-Dublín, el vuelo resultó bastante económico (120€ por persona ida y vuelta).

- Alquiler de coche: los precios de alquiler en Irlanda son elevados en comparación con otros destinos. Nosotros alquilamos un Hyundai pequeño por 500€ con seguro a todo riesgo durante 10 días con la empresa Europcar.

- Conducir en Irlanda: en toda Irlanda (Norte y República de Irlanda) se conduce por la izquierda. La verdad es que te acostumbras pronto y no tuvimos ningún problema. Entre las grandes ciudades hay carreteras decentes, pero cuando te metes en la Irlanda profunda suelen ser carreteras estrechas (aunque bien cuidadas en general). La gente conduce bastante bien y es educada, no oí un claxon en los 10 días que condujimos por allí.

- Enchufes: el enchufe de Irlanda es tipo G (tres clavijas), por lo que si viajas desde España necesitas adaptador. Nosotros compramos 2 adaptadores por menos 7€ en Amazon.

- Dinero: en Irlanda del Norte la moneda es la libra, mientras que en la República de Irlanda utilizan el euro. Si viajas a Irlanda del Norte se puede cambiar dinero con facilidad en ciudades como Belfast, pero en sitios más pequeños es prácticamente imposible. Así que toca cambiar dinero en Belfast o sacar libras de un cajero (aunque suele haber comisión de los bancos españoles por sacar en moneda extranjera). En la República de Irlanda se puede pagar con tarjeta en muchos sitios, pero no en todos, así que es recomendable llevar siempre efectivo.

- Precios: en general, Irlanda es un poco más cara que España. Las entradas a muchas de las actividades (ruinas, castillos, etc.) suelen ser de pago, y en algunos casos como el castillo de Blarney (imprescindible) o el Rock of Cashel, los precios pueden ser ridículamente altos. En 2021 tuvimos la suerte de que muchos sitios turísticos eran gratis ese año con motivo de la reapertura tras el COVID.

- Comida: la comida en toda Irlanda es bastante parecida, y no destaca precisamente por su calidad. Mucho fish & chips, mucha hamburguesa...los irlandeses suelen comer en los pubs y aunque algunos sirven platos buenos, no es una cocina muy elaborada. El plato típico es el guiso irlandés (irish stew) pero no vimos que lo sirvieran en muchos sitios. Es una cocina muy del estilo británica, rica en cerdo, mantequilla y grasa vegetal. Para mi gusto, de lo peor del país.

- COVID-19 y restricciones: esto es algo muy cambiante y hay que consultarlo en cada momento de forma actualizada. En agosto 2021, para viajar a la República de Irlanda te piden el pasaporte COVID y rellenar un formulario de localización del pasajero, disponible aquí. Cruzamos a Irlanda del Norte en carretera sin ningún tipo de restricciones ni pasos fronterizos ni nada. En Irlanda del Norte son más laxos con las restricciones COVID, nadie lleva mascarilla en la calle y en interiores es muy frecuente ver incluso a trabajadores de hoteles/restaurantes que no la llevan. En la república de Irlanda te piden el pasaporte COVID para comer en cualquier restaurante/pub, en la calle tampoco lleva casi nadie la mascarilla.

- Situación política y seguridad: Irlanda es muy seguro y no tuvimos ningún problema de ningún tipo. La gente es bastante amable en general. En la ciudad de Derry (Irlanda del Norte) hay muchos signos de que la tensión entre católicos y protestantes sigue muy presente. Pero incluso así, pudimos pasear por el barrio Bogside (el del Bloody Sunday) sin ninguna sensación de inseguridad en ningún momento.

- Alojamiento: Nosotros optamos por alojarnos casi siempre en Bed & Breakfast, aunque algunos días tiramos de hotel. Los precios me parecieron bastante elevados en general, sobre todo teniendo en cuenta que no había demasiado turismo. Los B&B en los que estuvimos eran geniales, mejores en general que los hoteles.

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Empezamos nuestro viaje saliendo desde la Terminal 4S de Madrid con destino Dublín con Iberia Express. Tras comprobar en Madrid nuestro pasaporte COVID y nuestro formulario del pasajero de Irlanda, embarcamos y llegamos a Dublín en algo más de 2 horas. Una vez allí, no nos pidieron nada en relación con la COVID.

Recogimos nuestro coche de alquiler con Europcar y condujimos hasta Belfast. En aproximadamente 1h45 llegamos a nuestro hotel (Hotel Ivanhoe) a las afueras de Dublín. Comimos en un restaurante indio que nos recomendaron en el hotel (Panjab indian), y nos fuimos a dormir para coger fuerzas para la primera etapa del viaje.

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Uno de los días más completos (y estresantes) del viaje.

Empezamos el día aparcando en el centro de Belfast (era domingo y los parking tienen tarifa plana, 4,5 libras).

Fuimos al ayuntamiento donde hicimos un free tour de Belfast que contratamos con civitatis. Durante 2 horas el guía nos llevó por los lugares más importantes y nos contó historias sobre la guerra de independencia, el IRA, etc. El centro de Belfast se puede ver en relativamente poco tiempo. Tras almorzar por el centro cogimos de nuevo el coche y fuimos al Titanic Museum, que merece la pena aunque sea por verlo por fuera (como hicimos nosotros).


De ahí cogimos el coche y fuimos a los acantilados de Cavehill, a escasos 15 minutos en coche. Para llegar aparcamos en Cave Hill Carpark (aparece así en Google) y desde ahí hay una caminata de 30-40 minutos hasta los acantilados y al McArt's Fort, desde donde hay unas vistas espectaculares de todo Belfast.


Cogimos el coche y condujimos 1 hora hasta The Dark Hedges, que es un camino de carretera rodeado de hayas a ambos lados, muy famoso porque se han rodado varias películas y series en este lugar, entre ellos fue el Camino del Rey en Juego de Tronos. Breve parada de 30 minutos para hacer unas fotos y pasearlo, merece mucho la pena.


De aquí condujimos 15 minutos a nuestro B&B (Glenhaven, en Ballycastle) para hacer el check-in. Hicimos el check-in rápido y de ahí fuimos a La calzada del gigante, que fue para mí uno de los lugares más espectaculares de todo el viaje, sino el más espectacular. Merece la pena ir a ver la puesta de Sol a este lugar, es una auténtica maravilla.

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