Amsterdam y alrededores ✏️ Blogs de Holanda

Este día decidimos dedicarlo a los pueblos del Waterland.
Nos dirigimos a la estación de autobuses (a la derecha de la Estación Central, la izquierda si sales de ella) y cogimos la línea 110 de la empresa ARRIVA, en el autobús compramos el Waterland Ticket que cuesta 7€ y te permite ir a cuatro pueblos de la zona (Voledam, Marken, Edam y Monnickendam). Nos bajamos en Voledam en la parada Voledam Zeestrat que es la de la más cercana a la parte turística y nos dirigimos caminando hacia el puerto. Dimos una vuelta rápida y decidimos comprar los tickets del barco hacia Marken (Marken Express, 7€ ida y vuelta) y volver después para terminar de verlo todo bien y comer en Voledam. Mientras esperábamos que saliera el barco fuimos caminando hacia donde está la estatua de la Virgen del Carmen (con sus famosos pinchos para las palomas) disfrutando de las vistas del puerto. Cogimos el barco, merece la pena llegar en barco a Marken, es un pueblo muy bonito, en primer lugar visitamos una casa típica de Marken con el mobiliario original y en la que no cobran entrada, al salir puedes dejar una propina, nosotros dejamos 2€, a continuación vimos el pueblo, entramos en la iglesia donde también se puede hacer una donación y volvimos a Voledam en el barco. Terminamos de ver el pueblo y en unos de los numerosos lugares que venden pescado compramos dos tarrinas para llevar con distintos pescados rebozados (23€ las dos) y nos lo comimos sentados en un banco cerca de la iglesia.
Cuando terminamos, aprovechamos para entrar en las diferentes tiendas, compramos algunos regalos y un par de sudaderas (de Holanda) para nosotros que estaban mucho más baratas que en Amsterdam. Volvimos a la parada de bus (para salir del pueblo hay que coger el autobús en la parada de enfrente) y cogimos el 118 hasta Edam.
Allí nos bajamos en la última parada y dimos una vuelta por el pueblo, nos hicimos fotos, vimos la iglesia y compramos quesos Edam (clásico, de pesto y de finas hierbas). Es un pueblo muy bonito y merece la pena ir.
Cogimos de nuevo el autobús 118 en la misma parada y de vuelta a Amsterdam.
Llegamos a la parada de autobuses y nos fuimos caminando hacia el hotel.
Descansamos una hora y salimos a cenar, esta noche en otro de los restaurantes de Rembrantplein, Le Monde, donde tomamos unos sanwiches.
Después una copa en el Café Monico.

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Este día decidimos continuar conociendo Amsterdam y después de desayunar en T´Centrum un sándwich y un pannenkoeken de chocolate, nos dirigimos caminando hasta Museumplein, decidimos entrar en el Rijksmuseum, para ver los cuadros de Rembrandt, los dos queríamos ver La Ronda de Noche, después de unos veinte minutos de cola pudimos entrar (11€ la entrada). Además de los cuadros de Rembrant vimos otros de Veremmeer, Hals, Steen, Saenrendam y Van Ruisdael, además de cerámica de Delf y casas de muñecas. Por cierto, están restaurando el museo, solo el Ala Philips está abierta al público por lo que la visita es bastante rápida. Cuando salimos nos dirigimos hacia el famoso cartel de I amsterdam donde nos hicimos fotos. Finalmente no entramos en el Museo Van Gogh y continuamos hasta la fabrica de la Heineken, abre a las 11 y la entrada cuesta 15€, está en las instalaciones de la antigua fábrica que ahora han convertido en una especie de parque temático. Durante la visita puedes hacer todas las fotos que quieras. Te explican los orígenes de la cerveza Heineken, los ingredientes utilizados, pudimos ver el antiguo lugar donde se elaboraba la cerveza, estuvimos viendo un video en 4D en el que supuestamente eres una botella de Heineken, haciendo una cata de la cerveza, nos hicimos videos y fotos de recuerdo que después pudimos enviar por mail y por ultimo tomar gratuitamente dos Heineken más cada uno en The Word Bar. Estuvimos casi dos horas y desde allí nos fuimos a buscar un sitio para comer.
Fuimos de nuevo a Rembrantplein, habíamos visto un Wok to Walk cerca del hotel y queríamos al menos comer un día, eliges un básico (4,90€), los ingredientes favoritos (entre 1 y 2€) y por último la salsa (gratis) y en un par de minutos te preparan el wok, listo para llevar, nos costo 13€ los dos. Nos lo comimos en un banco disfrutando de los canales.
Aprovechando que estábamos cerca del hotel, descansamos un poco y en una hora estábamos de vuelta en la calle, fuimos a la Plaza Dam, hicimos algunas compras en la zona de tiendas (las tiendas en Ámsterdam cierran a las seis, excepto los jueves que extienden el horario hasta las nueve) entramos en el Magna Plaza y aprovechamos para merendar poffertjes (postre típico holandés) con azúcar glas en Pannekoekkelder.
Esa noche cenamos de nuevo en una de las terrazas de Remblantplein, en este caso en un italiano, La Mandolina, pedimos tallarines y pizza.

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Este día decidimos dedicarlo a Delf y La Haya.
Fuimos caminando a la Estación Central, compramos los billetes en taquilla (39,50€ los dos viajando en primera clase ya que había un tipo de ticket especial que te permitía viajar durante nueve horas a cualquier sitio al que pudieras llegar) y a las 9.11 cogimos un tren hacia Delf , nuestra intención era bajar primero en La Haya (en Den Haag Central) ver el Parlamento y después continuar hasta Delf pero el tren que cogimos era directo (Sneiltren), por lo que no paró en esa parada, así que nos bajamos directamente en Delf. Una vez en la estación seguimos las indicaciones hacia el centro y nos quedamos maravillados con lo bonita que es la ciudad. En primer lugar nos dirigimos hacia la oficina de turismo donde nos dieron un folleto en español con información y un plano. Como era jueves en la plaza principal había un mercadillo donde vendían ropa, comida, dulces…Vimos el Ayuntamiento Mark, la Iglesia Antigua, caminamos por las calles, estuvimos en uno de los jardines interiores de las casas…. Y por último, decidimos subir a la Torre de la Iglesia Nueva pero no entramos a la Iglesia, (3,5€ ver la iglesia, 3€ subir a la torre) es totalmente recomendable, la Torre es muy alta y las escaleras muy estrechas, de caracol, hay ratos que es un poco agobiante pero merece totalmente la pena. Las vistas desde los distintos miradores son preciosas y subimos incluso por encima del reloj. Cuando bajamos de la Torre, nos sentamos a tomar algo en una de las terrazas de la plaza y después de descansar, fuimos a ver una de las Fabricas de Cerámica, hay tres y entramos en una en la que la entrada era gratuita, De Candelaer.
Comimos unos bocadillos de arenque y salmón que compramos en unos de los puestos del mercado (arenque 2€, salmón 1,5€).
Después de comer, fuimos a la estación para coger el tren que nos llevara, esta vez si, a La Haya.
Cogimos el tren, un Intercity y nos bajamos en Den Haag Central, seguimos las indicaciones hacia el Parlamento (De Binnenhof), vimos el lago, el patio interior (en una de las puertas que hay en el patio interior había un cartel el que indicaba los horarios y precios de las visitas guiadas, pero estaban llenas para ese día, además de que cuando nosotros llegamos ya había empezado la última visita). A continuación, nos dirigimos hacia el centro para disfrutar un poco de la ciudad antes de irnos.
Volvimos caminando hasta la estación de trenes (decidimos no ir a Maudoran, a ninguno de los dos nos atraía demasiado) así que cogimos el tren de vuelta a Amsterdam, llegamos a la Estación Central y nos fuimos caminando, como siempre, hacia el hotel. Durante toda la semana tuvimos muchísima suerte con el tiempo, hizo unos días buenísimos, y este fue el único momento en el que llovió, apenas unas cuantas gotas por lo que no necesitamos ni paraguas. Esta noche volvimos a cenar en Three Sister, esta vez ensalada de salmón y solomillo.

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