Bueno mi tercer día comenzó un poco más frío que al anterior, el tiempo fue bastante curioso, porque salía el sol, de repente caían cuatro gotas, volvía a salir el sol…. En fin y yo con ese abrigo de pelo a cuestas, jejejejej. Lo primero que hicimos fue irnos al Louvre ( directos en la linea 1) y pasamos rápido porque era bastante temprano, llegamos antes de las 10, y menos mal porque estuvimos como una hora y media y cuando salíamos había ya una cantidad de gente que incluso agobiaba, me pregunto como será los fines de semana, te tendrás que dar de empujones con la gente para ver las obras …
La verdad es que fuimos a lo clave, a ver la Gioconda ( digo ver por decir algo, porque entre la valla de tres metros que la protege y el cristal… ), a mi es que es un cuadro que no me impresiona demasiado, debe ser que la tenemos tan vista en los libros de historia… además cualquiera intentaba meterse entre los japoneses y sus cámaras, madre mía que locura!!!. También vimos la Venus de Milo y todo lo egipcio y lo romano que a mi me encanta. El Louvre por fuera es una maravilla. En fin unas cuantas vueltas y nos fuimos al Pompidue. (Ese día super cultural,jejejej)
En el Pompidue entramos muy rápido con la Musseun Pass y la verdad es que había bastante cola, aunque con esta tarjeta no nos dejaron entrar a las exposiciones temporales, solo a la permanente, y bueno ya sabéis, es arte moderno, peculiar en algún caso…..además no dejan hacer fotos dentro de la exposición, solo en lo que es la explanada de la entrada (me compré en la tienda un cuadernito muy mono de París para poner todos mis recortes cuando tenga tiempo…..). Ah y como no, caí en la tentación de un crepe de Nutella con plátano, me encantó aunque hay que ser goloso desde luego.
Tercera parada Le Marais y La Bastilla, ahí ya nos tiramos un montón de tiempo, nos pusimos a andar por todos los lados, estuvimos viendo tiendas como dice mi novio Vintage (le encantan esas cosas) y la verdad es que nos gustó mucho el barrio. Por cierto llegamos hasta la plaza des Vosges y a mi no me gustó, me esperaba algo más la verdad, me recordaron los soportales interiores a la plaza mayor de Madrid con sus restaurantes y tal, no está mal quiero decir pero como salía en mi guía y todo el mundo me había hablado de ella me la imaginé de otra manera, lo que si nos gustó fue el patio exterior del Museo Carnavalet aunque no entramos dentro (la entrada era gratuita) tenía un jardincillo super mono, lleno de flores, y muy verde mezclado con una especie de ambiente algo fantasmal…. No se como explicároslo, pero es bonito. A todo esto yo ese día estaba con un dolor de gemelos del día anterior que cada vez que bajaba las escaleras del metro o subía a algún sitio parecía chiquito de la calzada, un cuadro!!!!


Luego por allí en el barrio estuvimos tomando unas cervezas en un bar que la verdad era un poco cutrillo, y cuando fui al baño me encuentro con que es compartido para chicas y chicos (allí me encontré muchos así) y cuando entro veo que no tiene taza si no un hueco en el suelo con dos apoya pies, de esos de antaño, noooooo!!!!!!! Las chicas me entenderán , que horror, jajajajajajja. Y en fin, por allí es por donde yo debí de perder el dni aunque hasta que llegué al hotel no me di cuenta. Comimos unas baguettes y nos fuimos para el hotel porque ese día pensamos que era mejor ir a descansar un ratillo al hotel por la tarde y salir a ver la Torre Eiffel por la noche porque si nos pasábamos la tarde andando nos iba a ocurrir lo mismo del día anterior. Y eso es lo que hicimos……
Y aquí es donde llega mi odisea…. Llegada al hotel, me percato de que no tengo el Dni, momento pánico, bajo corriendo a recepción a intentar explicárselo al recepcionista que no hablaba ni papa de español (hicimos una mezcla inglés – francesa muy graciosa… bueno graciosa me parece ahora…..) y me indicó una comisaría. Cojo un taxi, me cobran más de 10 euros cuando la comisaría estaba casi al lado (el taxista nos miraba con una cara…) llegué a ir a dos comisarías porque está claro que en la primera no tenían intención de ayudarme



A todo esto perdimos como tres horas y ya os podéis imaginar que ni descansamos ni nada, pero era la última noche en París y aún con el disgusto no me podía ir sin ver la Torre Eiffel encendida. Aquí aprovecho para contaros que durante el viaje no había visto ni un Zara ni un Mango y de repente aparecimos en la Calle Rivoli? Creo que se llama que es una avenida bastante grande llena de tiendas de ropa, de comida y las calles transversales hay un montón de puestecillos de comida, cafeterías…. Está bien para darse un paseo y hacer compritas, bueno pues lo que os decía es que ya eran las 21.00 o por ahí y nos entró hambre y nos encontramos por casualidad en una callejuela (una paralela a la Calle Rivoli) un restaurante Italiano que ahora mismo no se como se llama (pero lo tengo apuntado en casa, ya os lo pondré), que estaba genial de precio, tomamos una ensalada de tomate y mozarella para compartir bastante grande y yo tomé unos tagliatelle carbonara que estaban super buenos y mi chico una pizza grande, con dos cervezas portuguesas (Sagress creo que se llaman) por 30€ los dos, lo mejorcito que encontramos allí, muy buena cena, ya os diré el sitio, era pequeñito pero la comida era buena.
Y nada para terminar el día nos fuimos paseando hasta la plaza de la Concordia y ya desde allí hicimos todas las fotos a la Torre Eiffel iluminada. Qué bonito, yo no se si por cansancio y el disfusto del dni, hasta me emocioné!!!! Es que soy una sentimental no lo puedo evitar, todas las luces de la plaza, la torre, el Sena….. Un paisaje de ensueño, me encantó. Y de ahí metro y al hotel rendida, que menudo día!!!!!!!!!!!