El día volvió a despertarse nublado, pero decidimos disfrutar de la playa igual asi que después de desayunar nos fuimos a Turqueta.
Hoy aunque era la misma hora el parking estaba libre, supongo que seria por las nubes. Una vez allí empezó a salir tímidamente el sol, pero nos vino bien el fresco para caminar los 10 minutillos que hay desde el parking a la playa.
Camino a Turqueta
Había poca gente asi que elegimos sitio y plantamos sombrilla. Cuando el sol empezó a salir vimos bien el color maravilloso del agua, ese turquesa que por mucho que lo vea siempre me sorprende y me hace sentir que estoy en el paraíso.
Había nubles y claros, asi que el sol salía y se volvía a esconder intermitentemente pero eso no nos impidió disfrutar del agua que estaba genial, buena temperatura y bien limpia, asi que nos quedamos en Turqueta toda la mañana y fue una delicia. A mediodía empezó a levantarse bastante viento y decidimos irnos a otra playa.
Turqueta
Al salir del desvío de Turqueta vimos que el parking de Son Saura estaba libre, asi que decidimos ir a echar un vistazo... y eso fue todo lo que hicimos, porque la playa tenia suciedad para llenar la costa de Menorca y alguna otra isla, literalmente montañas de palos de suciedad natural por toda la playa. Asi que le hicimos un par de fotos, ya que estábamos allí y nos fuimos.
Como el viento volvía a soplar bastante decidimos que ya estaba bien de playa por ese día.
Son Saura
Volvimos al hotel y después de un baño en la piscina ya nos duchamos para disfrutar la tarde. Este día decidimos ir a las canteras de S'Hostal, un sitio que descubrí un poco por casualidad antes de irme y que no quería perderme, y desde luego acertamos.
La canteras de S'Hostal están a 1km de Ciutadella y a la salida de la ciudad encontrareis el desvío muy fácilmente. Son unas canteras en desuso dividas en dos partes. Las canteras antiguas, usadas desde hace 200 años y donde la piedra se obtenía a mano y las nuevas donde las piedras se obtenían ya a través de maquinaria. La asociación Lithica las ha rehabilitado para la visita y en las canteras antiguas se puede ver un jardín medieval muy bonito entre las paredes de piedra, donde vuelve a crecer la vegetación después de muchos años que ya no se utilizan. En las canteras nuevas lo mas impresionante es descender hasta los huecos dejados por la obtención de la piedra y también las vistas de vértigo desde arriba. Es un paseo muy agradable e interesante que recomiendo a todos.
Canteras nuevas
Canteras antiguas
Jardín medieval
Entrada al jardín
Desde abajo en las canteras nuevas
Seguimos ruta porque hoy nos quedaba una ultima parada: la famosa Cova d'en Xoroi. Intentamos que coincidiera con la hora del atardecer para poder verlo desde este curioso sitios y tuvimos suerte. La Cova d'en Xoroi es un conjunto de cuevas en una acantilado que alguien tuvo la feliz idea de transformar en un bar-discoteca. Las vistas desde allí son espectaculares y las cuevas en si son algo muy curioso de ver.
Cova d'en Xoroi
En la Cova
Pudimos pasear un poco por ellas, tomarnos algo y a la hora que empezó a caer el sol me busque un buen sitio para plantarme con mi cámara de fotos. Y allí empecé a hacer fotos a lo loco del precioso atardecer que pudimos contemplar.
Cruzando el atardecer
Se pone el sol
Un lugar imprescindible, sin duda, la pega solo la tiene en el precio de la entrada: 12€ por persona con una consumición que ni siquiera incluía mojitos, para lo que tenias que pagar algo asi como 3€ mas (cosa que no hice porque vi como preparaban los mojitos con sprite de maquina, puaj!!!)
Después del atardecer nos dimos prisa en salir porque con la gente que había teníamos miedo de que se formara atasco para salir de la zona. Llegamos a Ciutadella bastante tarde asi que decidimos probar en una pizzería cercana al hotel que ponía carteles de pizza casera y conseguimos la ultima mesa que quedaba en la terraza. Un sitio normalito, pero con unas pizzas muy buenas y una buena atención. Dos pizzas y dos bebidas por 17€. No recuerdo bien el nombre pero era algo asi como "La oficina".
Ahora si, a dormir!