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Esta jornada fue yo creo la más tranquila de todo el viaje.
Antes de abandonar Skye paramos en el Castillo de Armadale (“B”) (tampoco incluído en la Pass), sede del clan Donald. Del castillo queda muy poco, lo mas bonito son los jardines y el museo donde te cuentan la historia del clan y de la isla de Skye. A mí me gustó, pero si se va en plan económico, también es prescindible.
Después de cruzar de nuevo el puente para salir de Skye, visitamos el castillo Eilean Donan (“C”), uno de los más famosos y bonitos de toda Escocia. Ya sabrás que fue el escenario de la peli de Los Inmortales. A pesar de estar reconstruído en el S.XIX es una pasada. Dentro tienen una reconstrucción con maniquíes y objetos de las cocinas del castillo; está super bien hecho, yo creo que es comida de verdad “embalsamada o algo así” porque está todo muy conseguido.
Seguimos con más carretera, más valles y más lochs y llegamos al viaducto de Glenfinnan (“D”), por el que pasa el Howart’s Express en las pelis de Harry Potter. Según la guía, se llega desde la estación, donde estaban en obras para construir un museo, creo. Pues bien, lo único que conseguimos fue mojarnos los pies caminando por senderos chopados rodeados de hierba alta hasta las rodillas sin ver nada (aprovechamos para comer algo en plan merienda-cena ahí en mitad de la hierba). Volvimos al aparcamiento del monumento de Glenfinnan (con una estatua de un highlander, pero como había que pagar, no nos acercamos a verla); y justo detrás de nosotros vemos, a lo lejos, el famoso viaducto. Sale un caminito cortito a la izquierda del centro de visitantes del monumento, y llegas a un pequeño promontorio donde se ve a lo lejos el viaducto y puedes hacer bien las fotos. ¡Casi nos lo perdemos!
Volvimos sobre nuestros pasos hasta Fort William (“E”), donde dimos un paseíto por el pueblo (tiene una calle peatonal con tiendecitas, muy chula) y nos tomamos unas cervezas en un Pub.
Nuestro destino final era el B&B Ben Nevis View en Corpach (“F”), al ladito de Fort William (hab. Doble con baño privado pero en el pasillo y desayuno incluído: 54libras). Y de verdad que el nombre le hace justicia, porque desde nuestra habitación había una maravillosa vista del Ben Nevis. Los dueños, un matrimonio mayor, encantadores es poco…