A la 1 y cuarto, hora local de Dubai, aterrizamos. Es de noche y no se ve un pimiento. Ni la Palm Island ni el Hotel este con forma de vela de 7 estrellas. Yo no vi ni un solo coco ni ninguna estrella, a ver si a la vuelta se ve algo mas.
Desembarcamos y ... a buscar la puerta de embarque del proximo vuelo. Salimos y lo que nos queda por delante es pasillo, pasillo y mas pasillo. Ya nadie habla español y hasta casi es dificil encontrar algun occidental. Mucho indio, mucho chino-tailandes-... asiaticos en general. Creo que nunca sabré distinguirlos bien. Encontramos la pantalla indicadora, ayudamos a una chica a encontrar su vuelo y ... a buscar.
Hacemos una parada tecnica y continuamos. La encontramos a la primera sin pararnos en las tiendas y no es porque no quisiera! Fui buena.
Pasamos al embarque y nos dejan en una salita de espera a que el avion este preparado. Aprobechamos para conectarnos de estrangis a internet y mandar algun mensajito al facebook.
Volvemos a embarcar a las 3 y cuarto hora de Dubai, en el A380 de Emirates (por lo visto el avion mas grande, y lo es), dos pisos de avion en el que caben una porrada de gente. Los asientos mas amplios, la ventanilla mas grande, ... despegamos, y en el vuelo no hay niños. Me veo una peli, intento quedarme dormida pero na! No hay forma. Luis cabecea, ronca un poco, vuelve a cabecear. Algo yo creo que ha dormido.
Me hago unos crucigramas y ... casi llegando miro por la ventanilla y se empiezan a ver inundaciones. Algunas zonas estan realmente mal, pero bastante lejos de Bangkok.

A medida que nos acercamos la cosa va a mejor, aunque la gente que se supone que tiene terrenos de cultivo, ahora tienen laguitos!

La imagen de Bangkok desde el aire impresiona un poco. Un rio totalmente marron, edificios altos al lado de chavolas, las inundaciones de la zona del otro lado del rio, y la desembocadura del Rio Chao Phraya es alucinante.
En fin, aterrizamos. Nos vamos a la aduana (una chica supermaja que ni nos ha mirado a la cara ni nos ha dicho na). Cogemos las maletas y cambiamos nuestros primeros 50 euros.
Salimos y nos decidimos por coger el Airport Link (que es como el metro). Enlazamos con el Sky Train y acabamos en Surasak, una calle abajo de nuestro hotel, el Novotel Bangkok Silom.

Por cierto, que calor, muchisima humedad y naaaaadaaaaaa de agua!
Nos alojan en la planta 17 de 19 que tiene el hotel. Una duchita y ... carretera y manta y ... a la calle! Y yo sin pegar ojo.
Salimos y cogemos un tuk-tuk hasta el Wat Saket y el Monte Dorado. Nos cobra 200 THB y pensamos que es mucho pero bueno ... estamos empezando. La carrera nos sale por otra sudada y una tragadera de humos pero la verdad hay que probarlo, esta divertido. Para el motor en cada semaforo y se da la vuelta intentando venderte excursiones, o llevarte a alguna tienda donde tiene comision.
Llegamos y estamos un poco desubicados. Todavia no sabiamos a que ibamos a Tailandia. Vemos un templo, otro enfrente, una campana dorada (que suponemos es el Monte Dorado). Hay mucho movimiento budista y militares por todas partes.



Seguimos la calle y nos topamos con el Wat Ratchanadda. Lo vimos por fuera porque ya era tarde. No es muy conocido pero es precioso.


Continuamos hasta el Monumento a la Democracia que viene siendo una rotonda grande con 4 pilares.

Nos desviamos hasta Khao San Road. Parece un poco pronto porque no hay mucha gente, pero es un mercadillo con tiendas de cambio de moneda, agencias de viajes, tenderetes de comida, ... de todo un poco. Damos una vuelta y ... pique! Un vestido pal bolso. Barato, barato!

Damos una vuelta y entramos a preguntar por las excursiones a Erawan y nos dicen que no se puede por las inundaciones. Va a ser que nos quedamos sin la primera de nuestras excursiones previstas. En ningun sitio conseguimos que nos lleven. Desistimos.
Tenemos un poco de hambre asique paramos en un sitio enorme que se llama Sawasdee Terraza. Nos pedimos nuestras primeras Shingas y nuestros primeros Pad Thai. Todo bueniiiiiisimo! No se si sera el hambre o que pero nos ha gustado mucho.

Nos damos otra vuelta por Khao San y cogemos otro tuk tuk hasta el mercadillo de Patpong. Caminamos y vemos Ping Pong Show por todos lados, muchos locales donde se ven las chicas desde la entrada, en bikini, y el mercadillo nada del otro mundo. Nuestro cuerpo nos iba diciendo basta, asique otro paseito hasta el hotel, como 20 minutillos, otra duchita y ya son las 9. Pero claro, yo no he dormido desde ayer y estoy rendida .
.