Después cargar pilas con el desayuno en el hotel, nos vamos al Museo del Bargello. Se ubica en un palacio de dos plantas y está dedicado a la escultura. Me gustó mucho, sobre todo las salas con obras de Miguel Ángel y Donatello.


Pasadas las 11h entramos en el Museo de San Marcos. Muy recomendable. Alrededor del claustro hay unas salas pintadas con bonitos frescos. Lo que más me impresionó fueron las celdas (todas ellas decoradas con frescos en las paredes de Fray Angélico). En una de esas celdas vivió Savonarola y allí se muestran algunas de sus reliquias.

Después de San Marcos nos vamos al Museo Arqueológico. De allí lo que más me gusta es la parte dedicada a Egipto, con sus sarcófagos y alguna que otra momia.
Casi una hora después entramos en el Opificio de la Piedra Dura. Aquí se muestra el trabajo artesanal realizado con piedras de diferentes colores. Realmente muy bonito. En el piso de arriba muestra cómo se realizaba esta técnica y los instrumentos utilizados para tal fin.


Una vez visitado este museo, nos encaminamos al Museo Galilei, ya que el día anterior llegamos cuando ya habían cerrado. Es la una y media y nos encontramos con un pequeño problemilla, los martes cierran a la una.
Pues que se la va a hacer!!.., nos vamos a comer. Esta vez entramos en un chino cerca del duomo. El menú de tres platos sale por 9 euros. El restaurante estaba lleno, todo de turistas orientales.
Son casi las cuatro, y nuestra Firenze Card se desactiva a las 16:06 por lo que acabamos de amortizarla yendo al Museo Alinari de la Fotografía. Si te gusta la fotografía, este es un bonito museo, donde se muestra la historia de la fotografía, con fotografías muy antiguas, así como una gran colección de cámaras de todos los tiempos. A mí personalmente me encantó.
Ya que estamos en la Plaza de Santa Maria Novella, nos acercamos a la Oficina Profumo Farmacéutica de Santa María Novella. Por dentro es bastante grande. Lleva varios siglos trabajando, y ahí te puedes encontrar desde jabones, productos cosméticos, licores, té, chocolate,.. Todo a la venta de una forma muy organizada. Compré una caja de té. En la sala de los tés y chocolates le dices lo que quieres y te da una tarjeta blanca magnética. Para pagar tienes que ir a otra sala, donde entregas la tarjeta, te traen lo que has comprado y pagas.
Una vez que salimos de allí, aprovechamos la entrada que nos dieron para hoy de la exposición de Francis Bacon y para allí que vamos.
Después nos vamos al mercadillo de San Lorenzo a comprar algunos regalos. Allí compramos cuatro pashminas y unos guantes de cuero.

A la hora de la cena no tenemos mucha hambre, nos apetece un bocadillo, por lo que después de callejear un poco nos vamos hacia el Antico Vinaio, a por otro de esos bocadillos tan buenos. Está cerrado. Seguimos callejeando y al pasar por delante de una iglesia, escuchamos la música de un órgano. Nos acercamos y leemos que cada día, a las 21:15h hacen un concierto de órgano gratuito, con música de Bach, Heandel, Vivaldi, etc. Nos sentamos un rato en sus bancos escuchando el concierto. Suena fantástico. Dentro leemos que estos conciertos los hacen para recaudar dinero para arreglar la fachada de la iglesia. Después de una media hora escuchando el concierto, nos vamos, no si antes dejar un donativo en la urna.
A todo esto, aunque el día amaneció lloviendo y con mucho frío, al final el día ha aguantado. Sí, podríamos haber ido a Siena sin ningún problema. Pero bueno, no nos quejamos del día que hemos tenido hoy y todo lo que hemos visto.