- Empezamos con la visita al lago Myvatn con su paisaje volcánico todavía activo, la carretera lo circunda y fuimos parando en varios de sus miradores y cráteres de volcán pequeños, en algunas zonas las mosquitas erán tan molestas que casi no podiamos ni abrir los ojos, son terriblemente pesadas.
Visitamos los pseudocráteres de Skutustadagigar, que son pequeños cráteres al lado del lago, llenos de césped, nos quedaron unas una fotos preciosas, dice al haber tantas mosquitas el lago está lleno de cisnes, patos y aves varias, pues son su alimento.
Después fuimos a Dimmuborgir, para hacer un paseo por el laberinto de formaciones de lava entre crestas de lava, con formas aterradoras y puentes creados por las erupciones, el recorrido se hace en una hora aproximadamente.
Cogimos otra vez el coche y fuimos a el volcán Hverfjall, dejamos el coche en el aparcamiento y luego hicimos una subida de más de 100 metros, cuando llegamos arriba vimos el cono del volcán completamente circular, con unas vistas fantásticas del lago y sus alrededores, con las siempre presentes columnas de vapor, se puede recorrer todo el diámetro que hace unos 1000 mts, cosa que nosotros no hicimos, solo recorrimos un trozo.
Bajamos del cono volcánico y con el coche nos dirigimos a Vogahraun, y después a Grjdtagjá la falla con su inmensa grieta, una vez allí , hay una entrada en la roca para bajar a sus entrañas, donde nos encontramos con unas piscinas de agua caliente naturales, aquí se supone es donde se unen las placas tectónicas de Europa y América.
Seguimos por las pistas de tierra dirección al volcan Krafla con su caldera volcánica de aproximadamente 10 km de diámetro con una larga zona de fisuras de 90 km, pasamos por la central geotermica de Kröflustód y llegamos a la zona volcánica de Leirhnjúkur donde vuelven haber, tierras de colores rojo, naranjas y amarillos con lagunas de color y barro burbujeante, nos daba la sensación de estar en otro planeta.
Continuamos la visita a la zona del volcán, después de dejar el coche en al aparcamiento iniciamos el paseo que discurre por encima de un manto de lava con grietas humeantes, que dan la sensación que van a erupcionar en cualquier momento, es una paseo tenso por encima de la lava y entre el vapor constante saliendo de su interior, es una de las zonas que más me impresiono, estar allí con la sensación de que la tierra todavía se está creando en esa zona, todo el entorno del volvan Krafla es una alucine la verdad, no me extraña que muchas productoras de cine elijan esta zona para sus películas.
Nos dirigimos en el coche hacia Egilsstadir, donde teníamos el siguiente Hotel, al llegar a la población, como teníamos tiempo nos dedicamos a hacer una pequeña visita del lugar, es como una urbanización con su correspondiente iglesia, cenamos, como en varias ocasiones durante el viaje en la gasolinera, que son supermercado, pizzería, hamburguesería , hay que ver lo que dan de si las gasolineras en Islandia, y a dormir.
Visitamos los pseudocráteres de Skutustadagigar, que son pequeños cráteres al lado del lago, llenos de césped, nos quedaron unas una fotos preciosas, dice al haber tantas mosquitas el lago está lleno de cisnes, patos y aves varias, pues son su alimento.
Después fuimos a Dimmuborgir, para hacer un paseo por el laberinto de formaciones de lava entre crestas de lava, con formas aterradoras y puentes creados por las erupciones, el recorrido se hace en una hora aproximadamente.
Cogimos otra vez el coche y fuimos a el volcán Hverfjall, dejamos el coche en el aparcamiento y luego hicimos una subida de más de 100 metros, cuando llegamos arriba vimos el cono del volcán completamente circular, con unas vistas fantásticas del lago y sus alrededores, con las siempre presentes columnas de vapor, se puede recorrer todo el diámetro que hace unos 1000 mts, cosa que nosotros no hicimos, solo recorrimos un trozo.
Bajamos del cono volcánico y con el coche nos dirigimos a Vogahraun, y después a Grjdtagjá la falla con su inmensa grieta, una vez allí , hay una entrada en la roca para bajar a sus entrañas, donde nos encontramos con unas piscinas de agua caliente naturales, aquí se supone es donde se unen las placas tectónicas de Europa y América.
Seguimos por las pistas de tierra dirección al volcan Krafla con su caldera volcánica de aproximadamente 10 km de diámetro con una larga zona de fisuras de 90 km, pasamos por la central geotermica de Kröflustód y llegamos a la zona volcánica de Leirhnjúkur donde vuelven haber, tierras de colores rojo, naranjas y amarillos con lagunas de color y barro burbujeante, nos daba la sensación de estar en otro planeta.
Continuamos la visita a la zona del volcán, después de dejar el coche en al aparcamiento iniciamos el paseo que discurre por encima de un manto de lava con grietas humeantes, que dan la sensación que van a erupcionar en cualquier momento, es una paseo tenso por encima de la lava y entre el vapor constante saliendo de su interior, es una de las zonas que más me impresiono, estar allí con la sensación de que la tierra todavía se está creando en esa zona, todo el entorno del volvan Krafla es una alucine la verdad, no me extraña que muchas productoras de cine elijan esta zona para sus películas.
Nos dirigimos en el coche hacia Egilsstadir, donde teníamos el siguiente Hotel, al llegar a la población, como teníamos tiempo nos dedicamos a hacer una pequeña visita del lugar, es como una urbanización con su correspondiente iglesia, cenamos, como en varias ocasiones durante el viaje en la gasolinera, que son supermercado, pizzería, hamburguesería , hay que ver lo que dan de si las gasolineras en Islandia, y a dormir.