Para nuestro primer día nos decidimos por unos 350km aprox., teniendo en cuenta que el primer día no es el que sales más pronto, y menos si sales sin la presión de llegar a la hora de coger vuelo o tren, así que no nos quisimos pasar.
Nos fijamos como destino la población costera de Sète, en territorio francés.
La primera parada fue la Abadía de Frontfroide, ya en Francia. Una abadía rodeada de viñedos, en un entorno muy agradable y tranquilo.
Llegamos allí sobre las 14h, y la entrada no era gratuita, así que vimos lo que pudimos (jardines y alrededores) y seguimos dirección Narbona para comer, donde habría más oferta.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Llegamos a Narbona hacia las 15h. Conseguimos aparcar el coche cerquita del centro de la ciudad, y al ser domingo, la zona azul no era pagando.
Nos acercamos andando a la zona céntrica, y buscamos algo para comer y para ir al baño. Encontramos una bocadilleria (de cadena) y nos comimos unos bocatas, bebidas y una galleta (todo 7 euros) en la terraza al sol, hacia una día espléndido.
Comentar que las dependientas no fueron nada agradables, no se hacían entender todo y ver que nosotros el francés pues como que muy justito... Tras un rato de romperme los cascos, conseguí pedir un sandwich de queso (rogando que no llevará jamón, ya que soy vegetariana ;)).
Después de comer, nos dirijimos a la catedral de St Just, ubicada en la plaza Hotel de Ville. Nos dejó impresionados. Una catedral gótica muy grande y espectacular en una ciudad tan pequeñita. A medida que te vas acercando a ella no te esperas lo que te vas a encontrar.
Llena de gárgolas, sombras y luces, espectacular por fuera y por dentro. Muy recomendable.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Después de un buen rato allí, (repito que nos gustó mucho

*** Imagen borrada de Tinypic ***
Siguiente parada Béziers, a unos 35km, ciudad famosa por las 9 esclusas en el Canal du Midi, que conecta con el Mediterráneo a la altura de Sète. Para aquellos aficionados a las obras de ingeniería y arquitectura se podrán quedar ahí largo rato, pero para el resto de mortales no deja de ser una esclusa

*** Imagen borrada de Tinypic ***
Continuamos con la visita de la ciudad, visitando su catedral (St Nazaire), en lo alto de una colina. También muy grande, por dentro muy bonita, pero la catedral de Narbona nos había robado el corazón...
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Otro paseo por la ciudad, la típica foto desde el puente viejo (Pont Vieux) de la ciudad, con su catedral presidiéndola.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Nos despedimos de Béziers ya con destino a Sète. Llegamos a la ciudad destino a las 18h aprox., cogiendo alguna retención a la entrada de la ciudad por la nacional. Tuvimos la suerte que se encontraban en fiestas locales (Fiestas de St Louis), y pudimos ver nada más llegar la famosa batalla de barcos en la que gana el equipo que consigue tirar a todos sus oponentes al agua.
La verdad que estuvimos un rato mirándolos y era divertido.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Tras el check in en el hotel (un Ibis Budget muy muy sencillito...), y dejar el coche en el parking del mismo, salimos de nuevo a la calle para buscar lugar donde cenar.
Encontramos una pizzeria donde pudimos comernos una pizza 4 quesos y una ensalada (costó encontrar algo dónde hubiera algún plato sin carne ni pescado muuucho rato).
Tras la cena, un paseíto por el centro de la ciudad (muy enfocada al turismo) y para el hotel a descansar, que mañana más. A las 23h estábamos ya más que recogiditos.