Tras desayunar, marchamos a visitar el puente de Avignon, que ayer nos quedó pendiente. Lo mejor, si no se quiere pagar por pisarlo, es ir a la Ile Barthalase (Chemin des Berges) , donde hay una buena panorámica de la ciudad y de lo que queda del puente.
Dejamos el coche un poco alejado y nos acercamos paseando, a orillas del rio, hasta llegar a ver el puente, hasta se ve el Palais des Papes!
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Tras unas fotos y un paseíto, ponemos rumbo a Carpentras, un pueblito que al ser viernes mañana, montan un mercadillo en la Rue Inguimbert, y como soy fan...pues para allá que vamos. El mercado es sobretodo de alimentos, echamos una ojeada, compramos lavanda para plantar en casa (que por cierto, no ha habido suerte...

*** Imagen borrada de Tinypic ***
Llegamos a la ciudad a eso de las 13h, y como siempre, muchisima gente y mucha dificultad para aparcar. Lo intentamos, no encontramos garajes, no encontramos sitio ni en lugares prohibidos, nos metimos en calles en contra dirección por la desesperación y todo... al final decidimos marcharnos ya que estaba imposible y estabamos perdiendo mucho tiempo. Tener en cuenta esto, en temporada de verano está todo imposible, así que o os moveis en transporte público o si quereis verlo todo tranquilos, programar los días con pocas visitas, ya que si no os pasará como nos pasó a nosotros en más de un sitio, que no pudimos ni parar porque no había dónde dejar el coche....
En fin, tras la mini decepción, seguimos hacia Aigues-Mortes, pasando por la Camarga. Esperamos más de ella la verdad... paisaje muy similar al que podemos encontrar en el Delta del Ebro, por ejemplo, muy monótono, aguas bajas, arena blanca y poca cosa más...
*** Imagen borrada de Tinypic ***
No vimos ni rastro de caballos salvajes, como anuncian a diestro y siniestro... Paramos en un par de restaurantes de carretera y no hubo forma humana de que nos dieran de comer, todas las cocinas cerradas, y no eran ni las 14h!!


Cuando llegamos a Aigues-Mortes teníamos que parar sí o sí, sin haber comido y con la vejiga ya pegando gritos...
Aparcamos en un parking fuera del casco antiguo y fuimos andando hasta allí. Pequeñito, paseamos por el paseo central que va a dar a la plaza central y comimos allí en una terraza con bastante dificultad ya que nos dicen que la cocina está cerrada por la hora (14:15h!!!). Ojo con eso en Francia, comen muy pronto y como te duermas...no comes...
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Tras comernos un bocadillo de rapidillo, nos apetece tomarnos un helado. Entro en una heladería y veo que hay 4 tamaños (infantil, pequeño, mediano y grande), pero cuando veo los conos veo que son gigantes y que el infantil es como el pequeño que podemos encontrar aquí, así que le pido a la chica un infantil. Me dice que no es posible porque no soy un niño. Le digo (a mi manera) que qué mas da!, si le voy a hacer la compra que le importa a ella que tamaño me como! La chica que no, bastante borde, con lo que al final por mis narices no le compro el helado. Hay que ver eh...


En fin, tras el cabreo nos dirigimos a la Playa Espiguette, cerca de Aigues-Mortes, recomendada por ser algo “salvaje”.
Llegamos y ¡sorpresa! ¡Cuesta entrar el coche 6 euros! Así que decidimos no entrar, el día no estaba yendo demasiado bien y después de lo de Arles, casi quedarnos sin comer, el helado, y la Camarga que nos estaba pareciendo flojita, decidimos tirar hacia Montpellier, a ver si se animaba un poco la cosa...


Llegamos allí a eso de las 18h, mucho atasco para entrar a la ciudad, con lo que también nos retrasó bastante. Pudimos acomodarnos en el hotel a las 19h más o menos, y salimos disparados a visitar la ciudad, que ya casi se hacía de noche...
Y bueno, decir que lo mejor del día. Montpellier es una ciudad animada, alegre, llena de garitos, restaurantes y mucha gente joven. Dimos un paseo por la zona del centro, la Pl. Cómedie, el Arc Triomphe, iluminado por la noche, muy chulo, el Aqueduc St Clement, también luminado por un azul eléctrico bastante curioso.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Cenamos bien (pero caro) en una terraza (en Francia eso de comer dentro no se estila aunque se esté a 40º o lloviendo...). Al lado de nuestra terraza había un restaurante donde solo servían mejillones de todas las maneras, acompañados de patatas fritas, y la gente mojaba las patatas con el caldillo de los mejillones!!!!



nos metíamos en la cama en nuestra última noche del viaje a eso de la 1h...
Día un poco flojo para mi gusto, quizás el cansancio ya hacía de las suyas y la sensación de volver a casa y tener que ir a trabajar a los pocos días influía...