Aquí empiezo la crónica de nuestro viaje en el Splendour por el Mediterráneo oriental, nuestro crucero salió de Venecia el 7 de noviembre, hicimos escala en Dubrovnik el 8, Navegación el 9, Rodas el 10, Kusadasi el 11, Navegación el 12, Split el 13 y regreso a Venecia el 14.
Salimos el 6 de noviembre en tren, dormimos en el Hotel Tryp Alameda Aeropuerto para coger el avión al dia siguiente por la mañana.
Un mes antes del viaje veo en Iberia que me han cambiado de asientos, paso de la fila 8 a la 24






Como ya está emitida la tarjeta de embarque debemos dirigirnos al personal de Iberia cuando lleguemos al aeropuerto, dicho y hecho, vamos a sacar las etiquetas de la maleta y nos dirigimos al personal que siempre hay por allí ayudando, le explicamos la movida y nos lleva hasta una terminal de ordenador, después de un rato tecleando tenemos las nuevas tarjetas de embarque impresas con los nuevos asientos



7-11-2015 Viaje y embarque
Llegamos al aeropuerto 2 h antes del vuelo y después de toda la historia que os comento en el previo, dejamos las maletas facturadas y nos dirigimos a pasar el control policial, rápido y sin problema.
Son casi las 7 y amanece en Barajas

A las 8:20 empieza el embarque

Una vez dentro del avión vemos que nos ha tocado la fila de asientos en la salida de emergencia, asientos de pago, ahora entendemos porqué estaban libres



Como no podía ser todo perfecto, cuando salimos a la pista nos quedamos parados mucho rato y nos informa el comandante de que hay una avería y debemos volver a la terminal. Ufff ahí la adrenalina se nos disparó


Un rato después nos informa que la avería no se puede solucionar y cambiaremos de avión, pero que no nos preocupemos que ya hay uno preparado y en una hora volveremos a embarcar

Pasados 40 min en la sala de embarque se nos informa que saldremos por la puerta de embarque hacia los buses que nos llevarán al nuevo avión.

Como tiene la misma configuración, seguimos en nuestros amplios asientos


Despues de un buen rato esperando a movernos nos dicen que faltan 7 pasajeros



Con 2 h de retraso por fin volamos


Tuvimos un vuelo muy bueno


A las 12:30 divisamos Venecia envuelta en bruma


Y nuestro barquito esperando


Había reservado billete i/v para el aerobus que nos llevará a Piazzale Roma, según se sale de la terminal está la parada del bus y una máquina para recoger los billetes reservados por internet o cogerlos allí, la única ventaja de llevarlos ya comprados es que no tienes que andar con la cartera para pagar, ojos que no ven.....

Al llegar a Piazzale Roma nos dirigimos a coger el people mover que nos llevará a la entrada de la Terminal de Cruceros, aquí sí sacamos los billetes en la máquina al afecto, muy sencillo, después ascensor y al trenecito elevado automático y sin conductor

Cuando salimos del People Mover había una azafata de Royal que nos indicaba la terminal, 110, de todas formas había carteles indicando la dirección


Ya eran las 2 de la tarde cuando llegamos a la terminal, había un puesto a la entrada para la gente que no llevaba etiquetas, nosotros ya íbamos con todo preparado y pasamos a la zona del checkin, todo muy rápido ya que habia muy poca gente. Cubrir el papel de no estar enfermo, el "billete del crucero", pasaportes, tarjeta de crédito y en 5 min ya tenemos nuestras tarjetas "SeaPass" para acceder al barco. No nos hacemos la foto de bienvenida y salimos para acceder a la pasarela de embarque



Ya son las 14:15, tenemos el camarote preparado y dejamos la maleta de mano en él, es una mini suite muy espaciosa en la cubierta 8





Media hora después ya estamos comiendo en el buffet, la verdad es que las comidas muy bien y la limonada riquísima




Cuando bajamos al camarote ya estaban las maletas, así que nos dedicamos a colocar todo en su sitio, había mucho sitio donde guardar ropa, muchas perchas y la asistente de camarote aún nos ofrecía más


El barco tenía previsto salir a las 17:00 h, pero salió una hora más tarde.
Pudimos ver una puesta de sol preciosa antes de zarpar

La salida de Venecia suele ser muy lenta, pero esta vez fuimos bastante rápido, supongo que por el retraso en salir, así que las fotos no pueden ser buenas, poca luz y movimiento = fotos poco nítidas o movidas


Dejamos atrás el Viking Star

La Punta de la Dogana y la Basílica de Santa Maria della Salute

La Plaza de S. Marcos y la Riva degli Schiavoni

El Puente de los Suspiros

Después de una ducha reparadora, nos vestimos y vamos a la primera sesión del teatro, donde conocemos a Simona, nuestra Directora de Crucero, una persona muy agradable, italiana, la verdad es que es una gran profesional. Siempre repetía lo que decía en inglés, al menos lo más importante, en español. La verdad es que la mayoría de los del equipo de animación solían hacer repeticiones en español




Esa noche tuvimos la actuación del Dúo Bolshakov, fue una actuación muy buena


Los espectáculos fueron siempre muy cortos, una media hora.
Teníamos la hora de cenar a las 21:00 h, aunque tenemos el My Time Dinning, en la web de Royal (mis cruceros) había reservado mesa para dos y a las 21:00 h. todas las noches.
Teníamos media hora y fuimos a dar una vuelta por el barco. Entramos en el Salón Top Hat, muy bonito. En él había actuaciones musicales, baile y todo tipo de juegos cada día

Con una espectacular escultura en cristal

Ya llegó la hora de la cena y fuimos al restaurante en la planta 5, la reservada al My Time Dining

La persona de recepción, una mujer brasileña encantadora, habla perfectamente castellano así que no hay problema, pero los camareros era otra historia, alguno sabía algo de español y otros sólo las palabras más básicas, así que no pudimos tener ninguna buena charla con ellos



Otra diferencia con respecto a los otros 3 cruceros con Royal es que no nos pusieron en la misma mesa o zona todas las noches, cada noche era una zona distinta, incluso una vez cenamos en la cubierta 4


Después de cenar había actuación en el Centrum, era un lugar donde siempre había música, orquesta, espectáculos, juegos, etc., aunque era un lugar muy pequeño y se veía desbordado en los días en que había espectáculo, sobre todo los aéreos, teniendo en cuenta que éramos 1809 pasajeros.
Ese día actuaban dos de los cantantes del Splendour

Había sido un día agotador y ya era hora de acostarse. Teníamos hervidor de agua y cafetera en el camarote, así que aprovechamos cada noche para terminar el día con un Rooibos



Mañana llegamos a Dubrovnik, pero no hay que madrugar ya que tenemos previsto atracar a las 10:30.