Conocéis esta canción?[u][b]
Un, dos, tres, cuatro, somos cuatro,
cuatro tipos, locos los cuatro,
y a Bremen vamos con esta canción,
con esta canción.
Por el mundo llevamos, alegría y buen humor,
la vida es diversión, Es una canción.
Yo soy Coki el gallo, yo soy Lupo el perro,
Yo Burlón el gato, y yo Tonto el burro.
Y a todas partes vamos con este son, con esta canción,
locos por la música, locos por la música.
Un, dos, tres, cuatro, somos cuatro,
cuatro tipos, locos los cuatro,
y a Bremen vamos con esta canción,
con esta canción.
Un, dos, tres, cuatro, somos cuatro,
cuatro tipos, locos los cuatro,
y a Bremen vamos con esta canción,
y a Bremen vamos con esta canción
[i]cuatro tipos, locos los cuatro,
y a Bremen vamos con esta canción,
con esta canción.
Por el mundo llevamos, alegría y buen humor,
la vida es diversión, Es una canción.
Yo soy Coki el gallo, yo soy Lupo el perro,
Yo Burlón el gato, y yo Tonto el burro.
Y a todas partes vamos con este son, con esta canción,
locos por la música, locos por la música.
Un, dos, tres, cuatro, somos cuatro,
cuatro tipos, locos los cuatro,
y a Bremen vamos con esta canción,
con esta canción.
Un, dos, tres, cuatro, somos cuatro,
cuatro tipos, locos los cuatro,
y a Bremen vamos con esta canción,
y a Bremen vamos con esta canción
Los dibujos de los trotamúsicos que se inspiraron en el cuento de los hermanos Grimm forma parte de mi niñez así que conocer Bremen era como transportarme a la infancia de nuevo lo cual me hacía mucha ilusión.
Con nuestros billetes impresos fuimos al anden a esperar el tren con destino a Bremen. lo tomamos a las 8:30 y en poco más de una hora nos plantamos allí.
Poco después de salir de la estación de tren nos encontramos con el único molino que sigue en pie de los 8 que había en Bremen.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Seguimos dirección al centro encontrándonos ahora con la calle de los cerdos, que como su nombre indica tiene una estatua con cerditos muy graciosa...
No andamos ni 5 minutos y ya nos damos de lleno con su Marktplatz, y wowwww la verdad es que no sabes dónde mirar porque dónde sea que lo hagas es espectacular..
Distintas perspectivas de la plaza
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
La fachada del ayuntamiento llena de detalles es toda una obra de arte, la estatua de Roland de Bremen (símbolo de la libertad) que preside la plaza preciosa, la catedral, sus casas puntiagudas,la estatua de los músicos de Bremen,,… el conjunto es tan hermoso, tan armónico que no te cansas de mirar…
Fachada del Ayuntamiento totalmente labrada
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Estatua de Rolando presidiendo la plaza
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En frente del ayuntamiento nos encontramos con la calle Boettcherstrasse.
Su curiosa entrada.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Esta vieja callejuela llena de artesanos está llena de museos, talleres, y un negocio que vende chocolates que quita el sentido...( si pasáis por allí acordaros de mi y comprad)
El lugar es muy pintoresco la verdad.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
carrillón de campanas de porcelana que tocan a determinadas horas.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Volvimos de nuevo a la plaza a ver si teníamos suerte y encontrábamos la escultura de los músicos de Bremen descongestionada para hacer una foto sujetando las patas delanteras para pedir un deseo. Los músicos de Bremen (veis las patas del burro lo desgastadas que están?)
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Una vez hecha la turistada nos encaminamos, dejando la visita de la catedral para más tarde al lugar que más ganas tenía de visitar el Barrio de Schnoor.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Y es que si os gusta la fotografía como a mi, éste sin duda es vuestro lugar, es un barrio perfectamente conservado, de estrechas calles peatonales de adoquines entrelazadas entre sí, con casas de colores vivos, que rezuma vida; Repleto de cafeterías, de restaurantes, tiendas de souvenirs..
En el deleite del lugar estábamos cuando comenzó a llover como si no hubiera mañana teniéndonos que refugiarnos en una cafetería dónde nos comimos un pastel de chocolate para llorar de bueno.
Lo que no sabíamos es que la lluvia nos permitiría poco después recorrer las calles prácticamente vacías para nuestro disfrute personal.
Probablemente el lugar más fotogénico de Schoor
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Cuando nos dimos por satisfechos y tras comprar unos imanes para la colección volvimos a la Marktplatz para ver la catedral y visitar el ayuntamiento por dentro.
Compramos las entradas para visitar el ayuntamiento en la oficina de turismo que hay en la misma plaza para las 4 de la tarde. La visita guiada (5.5 euros en inglés) fue muy especial ya que ese día había una cena benéfica con gente de renombre y recorrimos las estancias y el salón en el que se iba a cenar escuchando de fondo los ensayos de los músicos y viendo con curiosidad como decoraban las mesas con esmero.
Atención las grandes maquetas de barcos que cuelgan del techo.
Salimos de allí de nuevo acompañados de una molesta lluvia que nos hizo desistir de pasear más.
Nos metimos en la bodega que hay en un lateral del ayuntamiento a tomar una cervecita y a merendar y cuando escampó un poco nos fuimos camino ligero a la estación de Bremen a coger el tren para volver a Hamburgo.
Conclusiones: Bremen es de cuento nunca mejor dicho. Es una ciudad muy coqueta que se ve perfectamente en un día. Me hubiera encantado dormir allí para ver todo vacio al amanecer o por la noche pero aunque os alojéis en Hamburgo no dejéis de visitarla.