Nos dispusimos a disfrutar del último día. Teníamos tiempo hasta las 6,30-7 de la tarde que teníamos que ir al aeropuerto.
Hacía un calor espantoso, como 34º y andando de aquí para allá, resulto un día súper agobiante.
Fuimos primero a ver el enorme Parlamento, sólo por fuera,
*** Imagen borrada de Tinypic ***
de allí fuimos por un parque muy agradable, Cismigiu, entre sombras de los árboles se estaba bien.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Caminando, caminando, llegamos hasta la Plaza de la Revolución. Decepcionante lo descuidado que tienen el monumento.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Paramos a comer y ya nos adentramos en el casco histórico y vimos los restos de Curtea Veche, donde creo que vivió Vlad Tepes, hay una estatua suya, la iglesia, la calle Lipsani, la biserica Stavropoleos….. Todo bonito y bien cuidado, pero como os digo el calor era tremendo y a esas horas de la tarde, solo apetecía sentarse a la sombra.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Finalmente para ir al aeropuerto, con la experiencia del bus del día anterior, decidimos coger taxi. Un poco de aventura ya que no resulta tan fácil pararlos por la calle. Hay que llamar por tfno.. El sistema me parece bueno, además creo que te dicen el precio y te ahorras regateo y posibles abusos. El caso es que paramos a uno y nos pide 100 lei. Nos dio la risa y lo dejamos plantao, los dos siguientes me pedían la “comanda” como no teníamos pues nada. Por fín se paró uno que nos pidió 60, le dije que 50 y ok. Unos 11 € me pareció correcto, los atascos por lo menos a esas horas son tremendos, le costó casi una hora llegar al aeropuerto.
Y se acabó, vuelo con Ryanair y para casa.


