Suena el despertador, las 6:30, dios mío parece que fue ayer que llegamos a Las Vegas, que rápido han pasado estos tres días! Pero toca movernos para explorar nuevos territorios. Hoy cambiamos el calor sofocante de LV por el calor infernal de una de las visitas que más ilusión nos hacia, el Death Valley National Park.
Nos arreglamos, desayunamos (2 tuna sandwich) y empacamos nuestras pertenencias, hay que ver lo que han engordado nuestras maletas después de tant outlet
Y esta vez decidimos no hacer el pardillo, L se queda con todas las maletas en la puerta y yo voy a buscar el coche al parking, 15 minutos más tarde lo aparco en la puerta, cargamos y a tirar millas!
De camino paramos en un Walmart para llenar la nevera de hielo y comprar más agua, nos esperan temperaturas muy extremas así que es muy importante que hoy tengamos agua fresca durante todo el día.
Tardamos un par de horas en llegar al parque, pasamos por la 160, la opción más rápida según nuestra querida Scarlet (nombre con el que bautizamos al GPS) y solo paramos a medio camino (en Pahrump) a llenar el deposito del coche de gasolina y el nuestro del café favorito del viajero, el autentico e inimitable café de gasolinera.
TIP: Es imprescindible entrar a los parques naturales con el deposito lleno ya que suele haber muy pocos puntos (o directamente ninguno) para repostar. Esta advertencia es aún más clave en este lugar ya que quedarte sin gasolina en DV puede equivaler directamente a morir y no es broma. Los 15 minutos al sol que puede tardar en llegar la ayuda son más que suficientes para sufrir graves consecuencias en tu salud, así que muchísimo cuidado.
También hay que tener en cuenta que a medida que os acerquéis al parque el precio de la gasolina va subiendo, así que es recomendable no esperar a la última gasolinera para rellenar ya que podéis pagar hasta 1.5$ de más por galón.
Entramos en el parque y debido al calor en este parque no hay las típicas casetas donde comprar las entradas, funcionan con el sistema del sobre. Nosotros al tener el anual pass lo pusimos en el salpicadero y "pa dentro".
Primera parada Dante's View un mirador impresionante desde donde puedes ver todo el parque, al entrar giras a la izquierda y haces un camino de unos 20 minutos que se acaba en el mirador, luego tienes que deshacerlo entero y continuar bajando para ver el parque.
Las vistas son impresionantes así que vale la pena "perder" este tiempo yendo y volviendo.
El mirador esta a mucha altura y queda justo sobre la zona de Badwater pero con 25ºC menos, el nombre del mirador hace referencia a la visión que debió tener Dante del infierno en la Divina comedia y no es para menos. Brutales las vistas. Ojo con las avispas porque hay auténticos enjambres revoloteando esa zona
Deshicimos nuestros pasos y llegamos hasta Furnace Creek, el único pueblo-asentamiento de la zona, realmente son cuatro casas y un resort, creo que también hay una gasolinera y algún restaurante. Lo pasamos de largo y giramos a la izquierda.
Se abría ante nosotros todo el valle de la muerte, una extensión gigantesca de roca marrón, el termómetro ya marca unos agradables 120ºF (49ºC) e incluso con el AC a tope se nota el calor y la sequedad del lugar.
Pasamos de largo de la Artist Palette, para verla a la vuelta y nos desviamos hacia el Devils Golf Course. El nombre tiene guasa ya que es un mar de cristales de sal afilados como cuchillas y se dice que es donde el diablo juega al golf
Un poco más tarde llegamos al punto probablemente más famoso del parque, Badwater Basin, el lugar más bajo y caluroso del hemisferio norte. Este océano de sal está a 85,5 m por debajo del nivel del mar, es una alfombra blanca que se pierde en el horizonte. Al inicio del mismo hay un agujero para que puedas ver que debajo de esta capa de sal (a unos 15 cm) hay agua y que si la tocas esta incluso fresca! Aunque teniendo en cuenta que estamos a 50ºC supongo que todo me parecería fresquito...
La seguridad del parque recomiendo no estar más de 15 minutos fuera del coche en este punto y llevar SIEMPRE una botella de agua por persona. Aún así la poca estima por la vida de la gente sigue sorprendiéndome, veíamos gente caminando a lo lejos, siguiendo la alfombra de sal hasta muy, muy lejos! Todo es sal y roca! No se realmente que esperan encontrar!
Al volver al coche nos dimos cuenta de que el annual pass situado en el salpicadero del coche estaba derritiéndose, literalmente, la tarjeta estaba blanda así que optamos por retirarla y ya la mostraríamos si nos la pedían.
Deshicimos otra vez el camino y esta vez nos desviamos por la ruta del Artist Palette es una carretera muy estrecha que transcurre entre rocas y montes con manchas de color provocadas por los metales existentes en la tierra, las vistas una vez más espectaculares!
Después de esto dimos el parque por visto, así que iniciamos la escalada para salir del valle y del propio parque. Tengo que decir que la salida se nos hizo bastante larga y pesada, es una subida continuada y larga donde a causa del calor el coche sufre mucho. Además hay carteles que te recomiendan que pares el AC para no sobre-calentar el coche. Fácil de decir pero tenemos que recordar que estamos como a 45ºC y que parar el AC implica marearse del calor. Así pues poco a poco y parando y encendiendo el AC conseguimos llegar a la salida del parque con bastante alivio. Foto reglamentaria en el cartel del parque nacional y marchamos dirección Bakersfield.
Sobre Death Valley, una de las visitas que más curiosidad nos generaba decir que muy bien, nos gusto mucho, es un lugar totalmente diferente a cualquiera que hayamos estado. Es toda una experiencia sentir ese calor y esa sequedad en tu cuerpo y nos parece que vale la pena. Lo peor sin duda la salida eterna en la que llegamos a preocuparnos seriamente por nuestro Dodge. Es bastante importante tener un coche con suficiente potencia y no recomendaría nunca hacer esta visita con un vehículo de alquiler de las dos clases más económicas.
Una vez fuera del parque encaramos un cambio de itinerario de última hora que nos vimos obligados a hacer, teóricamente esta noche teníamos reserva en Mammoth lakes para mañana visitar Yosemite a través del Tioga Pass pero las grandes nevadas de este invierno habían provocado que ha día de hoy, 23 de junio el paso continuara cerrado.
Así pues ante la imposibilidad de cruzar Yosemite nos veiamos obligados a rodear el parque por el sur, perdiendo un montón de tiempo, amén de una reserva. Después de hablarlo detenidamente decidimos hacer noche en alguna ciudad cerca de Sequoia Park, visitar el parque al día siguiente e ir a dormir a Yosemite, donde teníamos reserva, madrugar mucho al día siguiente e intentar ver algo del parque antes de ir a SF.
La carretera en esta zona se nos hizo muy pesada, no hay sitios donde parar, el paisaje es precioso pero muy parecido todo el rato. Bajamos por la 395 dirección sur y acortamos por la 178 dirección este, hasta llegar a Bakersfield donde decidimos pernoctar ya que estábamos hasta las narices de tanta carretera y 1 hora y media hasta la entrada a Sequoia se nos haría mucho menos pesada mañana por la mañana que ese mismo día.
Busqué hotel y reservé desde Booking, el hotel agraciado fue el Vagabund Inn, hotel bastante barato (50$), céntrico, con desayuno, parking y una puntuación bastante decente.
Llegamos menos de una hora después y todo perfecto, el hotel nos sirvió para pasar la noche, sin más, curiosa la bipolaridad que sufría, la habitación era nueva, muy limpia y agradable pero el resto de las instalaciones eran terribles. Sucias, calurosas y muy poco cuidadas. Fuimos a la piscina a refrescarnos después del tórrido día y vaya tela... nos bañamos porque después de viajar el año pasado a la India se nos han quitado muchas manías pero vamos, vaya ascazo.
Después de ducharnos e instalarnos salimos a dar una vuelta con el coche a ver si encontrábamos algún sitio interesante donde cenar. ¡Y que va! el pueblo es horrible, solitario y con muy mala pinta, optamos por comer en un fast food mexicano de la cadena Fresco Mexican Grill que había cerca del hotel y listo. Un burrito de 7$ para cada uno, ¡muy buenos! y a dormir.