Hoy amanecia mi ultimo dia en tierras escocesas. Tras desayunar y reponer fuerzas en el hostal tocaba aprovechar el dia al máximo en la capital escocesa.
Como era muy pronto y todavía no había ningún monumento abierto me decidi a pasear por la Royal Mile y admirar sus preciosos edificios. Primeramente ascendi por la preciosa Cockburn Street (que tiene un aire muy Harry Potter). Me acerque a St. Giles para fotografiarme con el corazón de Midlothian y cumplir la tradición de escupir en el para atraer la buena suerte.



La catedral de St. Giles aun no estaba abierta, asi que decidi postergar la visita a la catedral y como había anunciado agua al mediodía y aun no llovia a esas horas decidi ir al cementerio de Greyfriars. Como la noche anterior ya había estado allí con el tour de City of the Dead, me vino bien para ubicarme. Cerca del lugar tambiens e encuentra la estatua de David Hume.





Antes de llegar a Greyfriars hay varias paradas imprescindibles. Por un lado tenemos el pub The Elephant House donde se dice que J. K. Rowling escribió parte de los libros de Harry Potter, esta muy cerca del cementerio y dicen que la escritora se paseaba por el se inspiro en los nombres de algunas tumbas para sus personajes. Muy cerquita también esta el pub Frankenstein, con una gigantesca maqueta del celebre mosntruo creado por Mary Shelley (que miedo…jajaja)





Y finalmente justo enfrente del cementerio nos encontramos con la famosa estatua del perrito Boby, un pequeño terrier que se dice que estuvo 14 años velando la tumba de su fallecido dueño (una historia parecida a la de Hachiko en Japon). Independientemente de si la historia esta “adornada” o no, ver la famosa estatua del perrito es obligatorio. El ayuntamiento de Edimburgo recomienda que no se le intente tocar el hocico porque la gente con la tonteria esta desgastando la estatua. Incluso la guía la noche anterior nos lo dijo. La verdad es que no se como la gente lo hace, especialmente los niños porque la estatua esta en altura. Yo me porte bien y no llegue a tocarle el hocico, solo acerque la mano pero sin tocar. Detrás de la estatua esta el pub con el mismo nombre que tiene una fachada exterior bastante bonita.








Seguidamente esta el cementerio de Greyfriars, ya lo había visita la noche anterior pero para todo fan de Harry Potter había algunas zonas que no visitamos y que son imprescindibles. Aparte de la tumba del supuesto dueño del perrito Bobby, por allí se puede encontrar nada mas y nada menos que la tumba de Voldemort!!! o lo que es lo mismo la tumba de un señor llamado Tom Riddle (el mismo nombre que J. K Rowling puso a su siniestro personaje).











La noche anterior ya le pregunte a la guía donde estaba la tumba asi que tenia mas o menos idea de su localización, esta al fondo del cementerio y en la parte baja en una esquina, aunque resulta difícil verla. A esas horas no había prácticamente nadie salvo una pareja también fans de las películas y libros a los que les pregunte por la famosa tumba y me ayudaron a localizarla. Por allí también se pasaron 2 chicas que me sacaron algunas fotos en tan terrorífico lugar…jejeje. En el cementerio también se encuentra la tumba de un poeta apellidado McGonagall (como la profesora de Hogwarts) y desde allí también se puede ver un colegio privado que recuerda mucho a la famosa escuela de magia.





Tras la visita al cementerio y sus alrededores, volvi sobre mis pasos y ascendi hasta llegar al castillo de Edimburgo situado en la colina de Castle Hill, admirando los edificios y algun que otro close asi como el impresionante The Hub.









Tenia ya la entrada reservada por internet para las 10 horas y con la guía adjunta adquirida también. Tener la entrada reservada permite ahorrarse la cola de las taquillas, aunque nadie se libra de la cola del control de seguridad. Tras entrar me dispuse a pasar la mañana en el impresionante lugar. Minimo os llevara 3 horas asi que tened en cuenta esto a la hora de planificar la visita. Es mejor en mi opinión que vayáis desde que abren a primera hora que hay menos gente que lo pospongais a la tarde donde siempre hay mas barullo. Otro consejo: si vais a primera hora, id primero a la zona de las joyas de la corona porque si lo dejais luego hay mucha gente y colas, yo no lo hice y luego tuve que aguantar la cola y el barullo de gente que había.

Según entre y como no llovia me decidi a ver los diferentes miradores del castillo y sus vistas sobre la ciudad.








Despues fui avanzando por las diferentes zonas donde se recrean las celdas de los presos en las Prisions War, los cañones entre ellos Mons Meg, el museo de la Memoria Nacional de la Guerra de Escocia, el Gran Salon y como he dicho las joyas de la corona. Para entrar a ver estas ultimas hay que hacer cola en el Royal Palace (salvo que se vaya a primera hora) y ascender por una torre, el problema es que el espacio es pequeño y la gente va muuuuuy lenta ascendiendo y avanzando por la exposición hasta llegar a la zona donde esta expuesta la corona y la espada y la famosa Piedra del Destino también llamada Piedra Scone que al fin y al cabo es solo un bloque de arenisca. Esta prohibido hacer fotos en esa parte, aunque siempre hay alguien que hace algún robado rápido.























Tras toda esta visita que me llevo cerca de 3 horas solo quedaba por visitar la capilla de Santa Margarita y el One Clock Gun (cañon a la 1). La capilla estaba cerrada porque había una boda, pero tuve suerte y sobre las 12:30 horas la boda acabo, pude ver como salían los novios e invitados (que tuvieron que estar encogidos porque la capilla es minúscula) y la abrieron nuevamente al publico. Es muy chiquitina pero muy mona. Finalmente baje a la zona donde todos los días hacen la exhibición de cañon (salvo los domingos, de ahí que postergara la visita al castillo para este dia que era sábado porque la semana anterior no hubiera podido ver el espectáculo). Me coloque enfrente del cañon y pude ver muy bien el espectáculo, el encargado de hacerlo explica previamente la historia de esta tradición, desfila y finalmente a las 13 horas prende la mecha y dispara el cañon. Vaya ruido!!






Despues el buen hombre se hace fotos con todo el mundo. Yo tuve suerte y fui de las primeras (luego incluso repeti foto porque hice de fotografa de una pareja española y otra inglesa y se ofrecieron a sacarme mas fotos). Lo malo fue que un hombre se puso a hablar con el encargado de este espectáculo y no le dejaba en paz, asi que observe que algunas personas tenían su foto con el soldado pero el señor como estaba atendiendo también al visitante que no dejaba de acosarle a preguntas pues no siempre miraba en algunas fotos de frente como en las mias. Me parecio un poco mal que ese seño no dejara al soldado en paz y mas viendo que el había tenido su foto de frente y a posteriori interceptara las fotos de otras personas.


Acabada la visita que entre una cosa y otra duro 3 horas y media, baje por la cuesta del castillo y como eran ya cerca de las 14 horas me dispuse a comer. Finalmente me decidi y fui a comer a The Deacon Brodie’s Tavern. Tuve suerte y no espere mucha cola porque el restaurante estaba a tope. Me pedi unos aperitivos de haggis y una veggie bruger (muy rico todo).


Eran ya cerca de las 15 horas. Como estaba muy cerquita me decidi a hacer una visita express al The Writer’s Museum, un museo muy pequeño situado en la preciosa mansión de 1622 llamada Lady’s Stair y ya por fuera la fachada es preciosa. El museo es gratis, aunque se puede dejar una donacion, y esta dedicado a los escritores: Sir Walter Scott, Robert Burns y Robert Louis Stevenson. Lo visite rápidamente y no me detuve mucho pero es interesante y se ve rápido.






Tras esto segui mi camino por la Royal Mile para visitar la impresionante catedral de St. Giles con su capilla de El Cardo. La catedral es inmensa y muy bonita pero la zona mas espectacular es la de la famosa capilla de la orden de El Cardo. Impresionante.!














Eran las 15:30 horas y la única visita que faltaba en mi agenda por cumplimentar era la del Museo Nacional de Escocia. Como no tenia mucho tiempo decidi visitarlo pero solo deteniéndome en obras concretas que ya llevaba seleccionadas con anterioridad. El museo es inmenso y muy muy interesante, sobre todo si se va con niños, prácticamente para verlo en condiciones hace falta un dia entero.
Tiene muchas salas dedicadas a diferentes temáticas y culturas: Asia, Africa, Europa y muchas obras curiosas. Lo mas destacado es que allí esta disecada la autentica oveja Dolly, la que clonaron. Lo curioso es que no esta en la zona de animales donde uno espera encontrarla sino en el lado contrario. Yo le tuve que preguntar a un guardia, que me explico que a toda la gente le pasa lo mismo.


Aparte de visitar a la oveja mas famosa del mundo las obras destacadas que vi fueron estas entre otras: los ataúdes en miniatura encontrados en Arthur’s Seat, una guillotina real llamada The Maiden, el juego de ajedrez de Lewis y el Millenium Clock entre otros. El museo también cuenta con una terraza a la que no llegue a subir porque ya no tenia tiempo. Lo malo de Edimburgo es que todas las atracciones cierra sobre las 17 horas con lo que el dia se me quedo algo justo. Aun asi vi bastante bien el museo y las obras que buscaba.




























Tras toda esta maratón de visitas, eran solo las 17 horas, el museo cierra puntual aunque no tienen prisa por echarte, fui al baño y sali tranquilamente. Los guardas son educados y solo te recuerdan que tienes que salir y van cerrando las salas.
Como la tarde estaba tranquila y no llovia decidi seguir con las visitas y acercarme a Grass Market y Victoria Street aunque ya era algo tarde para ver el ambiente. En Grass Market montan un mercadillo, incluso hay un puesto de unos españoles que venden paella, tabien hay diversos locales con fachadas muy curiosas y divertidas. Cuando yo fui ya estaban recogiendo pero la zona es muy animada y bonita. Luego esta la preciosa calle de Victoria Street, inspiración del Diagon Alley en Harry Potter. Es una calle preciosa con sus casitas de colores.
Tambien me acerque al pub Sandy’s Bell, un autentico pub irlandés cuyos dueños son los hermanos The Corrs. Segui mi periplo y fui a City Chambers a ver las manos de J. K Rowling. City Chambers es un edificio gubernamental situado en plena Royal Mile, al lado de The Real Mary King Close que tiene un pequeño “paseo de la fama” donde algunos escoceses ilustres han estampado sus manos en el patio del mismo.












Finalmente admire algunos closes, entre ellos el de Warriston Close, cerca de mi albergue, donde se filmaron algunas escenas de la serie de tv inglesa: Norte y Sur, protagonizada por Richard Armitage (Thorin en las películas de El Hobbit y a quien tuve la suerte de conocer en 2014 cuando visite Londres).




Como no quería que se me hiciera muy tarde callejee y mire algunas tiendas para comprar los últimos recuerdos de Escocia, fundamentalmente bufandas o gorros con el típico estampado escoces.
Aquí voy a hacer un inciso, y es que no os podeis imaginar la cantidad de variedades de estampado escoces que hay. Si os gusta este tipo de ropa, estais en el paraíso porque hay de todos los modelos y colores. A lo largo de la Royal Mile otra cosa no, pero tiendas de ropa escocesa hay para dar y tomar. Los precios son similares asi que no os comáis la cabeza. Salvo alguna cosa fuera de lo normal como la falda que me compre en el lago Ness o uan bufanda de mohair que compre en Trossachs muy rebajada, los precios son similares en todos lados. Como me encantan las boinas y las bufandas con estampado escoces acabe con una buena colección de ellas…jajaja…








Y finalmente me dispuse a cenar. Intente ir a The World’s End pero no hubo manera, por mucho que lo intente durante toda mi estancia en Edimburgo, también es scierto que siempre coincidió fin de semana, no hubo manera de conseguir cenar allí, todos los días a tope para las 18-19 horas y sin posibilidad de encontrar mesa. Acabe cenando otra vez en The Royal Mile Tavern, también tuve que esperar un rato pero al menos me dejaron cenar. Pedi una cerveza Tennents y un haggis que casi no me pude acabar.


Finalmente y con pena camine por ultima vez por la Royal Mile, volvi al hostal prepare la maleta y me dispuse a dormir unas pocas horas ya que tenia que levantarme sobre las 3 y media de la madrugada para coger el bus del aeropuerto. Lo bueno como ya he dicho es que tenia el hostal a 200 metros de la parada. De todos modos Edimburgo me parecio una ciudad muy segura, y además ese dia era sábado noche por lo que había mucha gente en la calle (no veais que colas tenia el Mc Donalds a las 4 de la mañana…jajaja). Cogi el vuelo sin problemas y regrese al hogar tras haber disfrutado de esta fantástica experiencia de 8 dias.