Quinta etapa de Nuestro viaje a cantabria.
Hoy el plan es subir a Picos de Europa desde fuente dé, y ver los pueblos que hay entre potes y fuente dé.
Nos levantamos sobre las ocho y media...
Como solamente vamos a pasar dos días en el apartamento no hemos comprado nada para desayunar en el súper.
Así que salimos hacia Potes buscando donde desayunar.
Son las nueve de la mañana y está prácticamente todo cerrado...
Terminamos desayunando en el bar de la estación de autobuses.
Para no tirar cohetes, unas tostadas un poco secas y un café con leche 4 euros cada uno.
Ya con algo en el estómago nos dirigimos hacia fuente dé.
Aparcamos en el aparcamiento que hay en la parte de abajo y vamos andando hasta las taquillas, son las nueve y cuarenta.
Entre semana abren a las 10 de la mañana, Pero ya hay gente en la cola.
A la diez en punto abre las taquillas y compramos las entradas ida y vuelta del teleférico.
Como anécdota... el teleférico cántabro es el más espectacular y el que mayor cota supera de todos los existentes en España.
El plan es pasear hasta el Hotel Áliva y volver a bajar en el teleférico.
Es nuestra primera vez que subimos por este medio. La verdad es que no se mueve nada.
El trayecto dura cuatro minutos y asciende un poco más de 700 metros.
Una vez arriba estaremos a una altitud de 1.847 metros.
Desde la arriba se ve muy pequeña la estación inferior, Los paisajes son de ensueño.
Todavía hay nieve en las cimas.
Empezamos a seguir el camino dirección hacia el chalet del Rey y el Hotel Áliva.
Desde la estación del teleférico ( El Cable) hasta el hotel hay unos cinco km aproximadamente.
Vamos siguiendo el camino en el que por dos veces nos cruzamos con pequeños rebaños de rebecos.
Es imponente ver las montañas, los valles. La panorámica es impresionante.
Picos de Europa enamora.
Pasamos una fuente que nos quedaba a la derecha (Fuente de Resalú) y sin dejar el camino pasamos por delante del chalet real, edificación construida en 1912.
Casa prefabricada traída de Inglaterra que se convirtió por unos días en alojamiento del rey de España, Alfonso XIII.
A pocos metros se encuentra el hotel que nos lo encontramos cerrado. ( Estamos fuera temporada)
Este hotel esta a 1823 metros de altura, inaugurado en 1930.
Paramos para almorzar lo que llevamos en la mochila. y después de quince minutos de descanso, decidimos bajar andando.
El camino total si bajas hasta fuente dé son de quince km.
Son las 11:30 y esperamos bajar en alrededor de tres horas...
Pasamos por varias fuentes, bajadas y alguna pequeña subida.
Hasta que llegamos como una puerta donde el camino se divide en dos.
A la izquierda te vas hasta el pueblo de Espinama, donde luego tienes que seguir por la carretera hasta el parking de Fuente Dé.
Por la derecha te vas al parking pero haciendo el trayecto entre frondosos robledales.
Los kilómetros son parecidos tanto por un lado como por otro.
Así como somos más de campo tiramos hacia el monte...
Aquí la cosa se pone más difícil camino estrecho, bajadas casi perpendiculares, subiditas también bastante empinadas...
Por suerte vamos casi todo el camino por la sombra.
Lo que sí que hay es mucho barro en varios trayectos del camino.
Llegamos al parking alrededor de las dos y media de la tarde.
con hambre y ganas de descansar después de tan larga bajada.
Nos subimos al coche, y vamos directos a por la comida.
llegamos a las 14.45 h al pueblo de Los Llanos, donde en la misma carretera hay un restaurante con el mismo nombre. ya habíamos leído reseñas sobre este y varios mas de la zona. como era tarde y no reservamos, probamos a ver en este si teníamos suerte.
Tras esperar 5 minutos nos prepararon una mesa, son un poco serios, pero todo tenia buena pinta...
como no íbamos aprobar el cocido lebaniego... y la estupenda carne de ternera estando en Cantabria?
el cocido de 10 y la carne (Solomillo a la plancha) tierno y sabroso.
bien llena la pancha y después de mi consabida tarta de queso (mi preferida) y un cafelito, pagamos y salimos a descansar media hora al coche...
Nos quedaba la tarde para visitar...
Ya descansados un poquito, nos fuimos hacia el pueblo de Mogrovejo, que está muy cerquita de los Llanos.
Pueblo más bonito de España y es un pueblo de película, tan de película, que se rodo Heidi aquí.
Aproximadamente hay unos 40 habitantes.
Allí encuentras casonas de arquitectura montañesa típicas del Valle de Liébana. La verdad que es muy pintoresco,
Recorrer sus calles entre casonas nos llevo unos 20 minutos.
Ademas como eran sobre las 5 de la tarde no había mucha gente por el pueblo.
Vista del pueblo desde la parte mas alta.
Terminada la visita, volvimos al coche y camino a hacia Potes nos encontramos en la misma carretera con el pueblo de
Camaleño, donde después de dar una vuelta por el interior del pueblo fuimos a la quesería Rio Deva.
Donde degustamos y compramos varios quesos.
Seguimos camino hasta Santo Toribio de Liébana, cogiendo el desvío de la derecha antes de llegar a Potes.
Es un monasterio franciscano que alberga el Lignum Crucis (Trozo de madera de la Cruz de Cristo) y obras del Beato de Liébana. El monasterio se fundó entre los siglos VI y VIII.
Un pequeño paseo hasta la ermita de San Miguel, desde donde se ven unas vistas magníficas del valle de Liébana y de Potes..
Con picos de Europa de fondo.
Terminamos dando un pequeño paseo por potes, teníamos unas compras pendientes y tomando una cervecita en una terraza pegada al río Deva.
Café Bierzo, Está muy bien para tomar algo y tiene unas vistas preciosas.
Después del refrigerio ya no fuimos hacia el apartamento parando antes en el super para comprar algo de cena.
Hasta aquí nuestra quinta etapa de nuestro viaje a Cantabria y bastante cansados.
Mañana desfiladero de nuevo y hacia la zona de Saja-Besaya.