El día nos amanece nublado, cosa que agradezco, el calor de ayer era excesivo. Nos vamos a las catacumbas de San Sebastián. Vamos en metro hasta Circo Massimo y a unos 50 mts tiene la parada el autobús nro.118 que nos deja a la puerta de la catacumba.
Nos toca esperar una media hora para iniciar la visita guiada, no hay otra forma, pero después de bajar entiendo que no la haya. La visita es rápida y no podemos parar a ver nada, sólo en tres o cuatro puntos donde la guía nos cuenta un poco de lo que allí sucedió. Me hubiera gustado pasar mas tiempo allí abajo contemplando las entrañas de la tierra dónde una serie de personas se reunían y enterraban a sus muertos. Debían tener mucha fé para acudir a lugares tan lóbregos. Tres niveles hay excavados con ramificaciones de estrechos túneles en todas direcciones. Supongo que los mineros sentirán la misma angustia que debió sentir aquella gente.
Desde las catacumbas andando nos acercamos a la tumba de Cecilia Metela, que no tenia previsto visitar y así sucede, que aunque nos acercamos está cerrada hoy lunes. Volvemos hacia el autobús y nos vamos hacia Trevi que aún no la hemos visto durante el día. A ella llegamos y si por la noche es bonita, creo que durante el día la salida del tenue sol la hace mas bonita.
Nos sentamos de nuevo en el "murete" que la rodea y permanecemos un buen rato sentados allí, “la fontana” lo tiene todo y añado el romanticismo, aunque soy carroza, comtemplandola me hace sentir algo especial. No queda mas remedio que seguir, pero si volviera mil veces a Roma, otras tantas me acercaría a verla. Nos vamos a tomar un “cafelito” a piazza San Eustaquio, junto al Panteón, al café del mismo nombre, alguien la recomendaba en el foro y lo he marcado entre las visitas. No soy muy cafetero, pero a juzgar por las fotos que allí tienen debe ser muy antiguo y he leido en varios sitios que presume de servir el mejor café del mundo, nos tomamos unos expresos y capuchino. Seguimos nuestro peregrinaje y llegamos a piazza Navona la que fuera circo de Domiciano.
La fuente central está tapada y solo se puede ver a través de unos plásticos transparentes que la rodean, debe ser preciosa, la plaza en sí ya lo es. Nos ponemos a buscar una lámina que nos han encargado entre los muchos vendedores que allí hay pero no la encontramos. Retomamos el itinerario y nos acercamos a El Gesú otra iglesia romana con impresionante fresco en el techo, por resaltar algo ya que toda ella está llena de pinturas y esculturas. Ahora toca Santa Maria Della Vittoria, otra iglesia en esta ocasión con importante escultura de Bernini, El éxtasis de Santa Teresa.
Para terminar el día nos acercamos a via Cavour a Gallomatto un restaurante muy acogedor pero……durante la cena aparece un personaje hablando mas alto de lo normal de forma muy autoritaria, debe ser el dueño y tiene pinta rara, al traer la “minuta” nos traen (observo que a todo el mundo le llevan un papel similar) en un papel “guarrindongo” donde no figura ni nombre de restaurante ni nada que haga referencia, solo los platos elegidos y la suma total sobrepasa en 10€ lo que realmente es (¿error?), llamo al camarero y después de platicar un rato en castellano e italiano dice que ok , pagamos lo que corresponde y nos vamos pero lo que parecía ser una cena agradable, no lo fue tanto.
Nos vamos al hotel que los kilómetros y horas se van acumulando y mi maltrecha rodilla va quejandose ya.