DÍA 13, KOH PHANGAN-CHIANG MAI ✏️ Diarios de Viajes de Tailandia

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DÍA 13: DOMINGO 9/JULIO KOH PHANGAN – CHIANG MAI

El día de hoy es realmente un día perdido ya que nos pasamos todo el día en traslados.
Los traslados de taxi, ferry y bus hasta el aeropuerto lo cogimos en el hotel y realmente estoy convencida de que nos engañaron un poco, aparte de cobrarnos más que en la agencia de Haad Rin nos enviaron en un bus que madre mía, mientras que a la ida habíamos ido en un bus decente a la vuelta era un bus tercermundista.
El vuelo salía a las 15:30 y en teoría deberíamos coger el ferry de las 9:00, después de la mala experiencia para llegar al aeropuerto de Bangkok, decidimos coger el ferry de las 7:00 de la mañana e ir más tranquilos, no era necesario pero bueno, más tranquilos si que fuimos.
El taxi puntual a las 6:00 de la mañana para llevarnos al puerto de Thonsala, a las 7 cogimos el ferry hasta Donsak y en el puerto de Donsak nos mandan en ese bus tercermundista, además estoy convencida del timo del hotel, porque a la ida el bus nos llevó directamente del aeropuerto al puerto, sin embargo, a la vuelta cuando llegamos a la ciudad de Surat Thani y quedábamos 4 personas en el bus el conductor, nos dice “ al aeropuerto” y le decimos “si” pues fuera y allí en la calle nos hacen esperar a otro bus que nos lleva hasta el aeropuerto.
Al final llegamos sobrados de tiempo al aeropuerto y nos tocó esperar un buen rato allí, el vuelo con Air Asia puntual y sin incidencias.
Llegamos a Chiang Mai puntuales, cuando cogimos la maleta que habíamos facturado ya vemos el mostrador para coger un taxi a la ciudad, 150 B por el trayecto, nos dan un ticket para entregar en la puerta, cogemos el taxi y rápidamente llegamos a Chiang Mai, el aeropuerto es pequeño y está cerca de la ciudad.
El hotel elegido para estas tres noches en Chiang Mai es el Wangburapa, habitación doble con cama extra y desayuno, situado dentro de las murallas, fácil de localizar, bastante cerca del mercando nocturno y del Sunday market, con piscina, el personal super amable y el desayuno regular, la única pega, los colchones eran igualito que si durmieras en el suelo, duros como piedras.
Llegamos al hotel, dejamos las cosas y nos fuimos para el Sunday market. El Sunday market muy muy grande y a reventar de gente, apenas podías andar y los puestos había algunos que ni veías de toda la gente que había, además nos llovió, dimos un paseo pero realmente estábamos muy cansados del madrugón y con toda la gente que había nos recogimos temprano que al día siguiente tocaba madrugar.

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