Foro de Alemania, Austria, Suiza: Viajes por Europa Central: Alemania, Austria, Suiza... Consejos e información sobre Viena, Munich, Berlin, Alpes, Tirol.
El del Jugfrau no me consta pero si el cremallera que lle a Gornergrat y Matterhorn.
Para mi es imperdible, también Gruyere, MOntreaux
La garganta del AAre
_________________ Soñando con nuevos destinos
Vero
76.992
Tomo nota muchas gracias estoy muy agradecido por tus sugerencias y consejos, estos 2 pueblos montreaux y la gruyere habia oido hablar de ellos, a ver si puedo hacer todo eso cogiendo como base o lucerna o interlaken
También me han hablado del glaciar express no sé qué tal será, en ese caso se deberia dormir en st moritz y tampoco sé si hay descuento con la swiss pass, con tanta información me estoy estresando sin haber empezado jaja
Yo el Glacier Express lo dejaría fuera. No te digo que no merezca la pena ni mucho menos pero si vas a estar pocos días, hay cosas muchísimo más interesantes.
Si haces el recorrido entero son 6 horas en un tren con vagones panorámicos modernísimos para la segunda clase, cosa que en un principio parece de lujo pero luego no puedes ni hacer una simple foto porque salen reflejos por todos los lados.
Que casualmente te pilla de camino entre dos puntos que quieres visitar... Pues puedes hacer el trayecto en el Glacier Express en vez de en un tren normal si quieres. Es gratis con el Swiss Pass pero la reserva es obligatoria (creo que 33 CHF en temporada alta y 15 en baja?
Es cierto que hay muchísima información porque pese a que Suiza es un país muy pequeño tiene muchísimo que ver. Yo empezaría por decidir si vas a hacer más cosas de montaña como teleféricos, subir a cumbres, hacer montañismo... O eres más de ciudades. A partir de ahí, escoger los destinos que más se ajusten a tus gustos.
Gracias noealonso pues en principio un mixto de las dos,ciudades y pueblos y algo de alpes, otra cosa es necesario cambiar a francos o admiten euros? veo que el avion sale mas economico si te deja en basilea, he visto una oferta por 118€ i/v y como las distancias no son largas
gracias noealonso pues en principio un mixto de las dos,ciudades y pueblos y algo de alpes, otra cosa es necesario cambiar a francos o admiten euros? veo que el avion sale mas economico si te deja en basilea, he visto una oferta por 118€ i/v y como las distancias no son largas
Unas cuantas preguntillas para ayudarte un poco:
- Cuántos días vas a estar?
- Te vas a mover en tren o coche?
- En cuanto a la montaña, harás senderismo o sólo subirás a las cumbres en teleférico?
Lo del aeropuerto de Basilea pues depende fechas, yo por ejemplo viajo Madrid-Ginebra son Iberia por 125 euros (varias veces en el último año). Es pillar vuelos pronto y tener un poquito de suerte.
7 u 8 días, queria moverme en tren, quiero pillar la swiss pass, mas bien queria usar telefericos, quiero moverme por zermatt por las cumbres, interlaken, conocer berna,zurich,lucerna y algun pueblo que me han puesto por ahí, tal vez entonces sea mejor entrar por ginebra no?
Pues lo de entrar por Ginebra depende de la ruta que vayas a hacer. Todos los destinos que me acabas de decir te pillan mejor entrando por Basilea (menos recorrido en tren si te alojas por la zona de Interlaken.
Yo te recomendaría alojarte por los alrededores de Interlaken si vas a hacer noche en la misma ciudad todos los días aunque sin duda alguna, si tienes la posibilidad, lo mejor sería ir haciendo noche en distintas ciudades. Ejemplo de distancias en tren:
-Interlaken-Berna: 50-55 minutos.
-Interlaken-Lucerna: 2 horas.
-Interlaken-Zermatt: 2 horas 15 minutos.
-Interlaken-Zurich: 2 horas.
En Agosto estuve 10 días viajando con el Swiss Pass y el Jungfrau Pass para la zona de Interlaken e iba y venía todos los días desde Neuchatel que pilla algo lejos así que me daba la paliza todos los días pero decirte, que si madrugas, te da tiempo a ir a venir en el día si estableces el campamento base en una sola ciudad.
Hasta que no tengas más o menos claro los sitios que vas a visitar, no puedes establecer correctamente la ciudad por la que es mejor entrar y en donde alojarte.
Bueno pues ya volvi de Suiza y como pille mucha información, pues aportare algo para los siguientes visitantes.
Yo vole a Turin para ir hacia Ginebra. Antes pase por Chamonix y allí hay para pasar dos o tres días sin aburrirse. El aigue du midi es impresionante, la mer de glace no la vi pero tiene buena pinta y luego estuve en fer a cheval que esta bastante bien aunque habia poca agua. También hay grutas para visitar y es una zona preciosa (Y barata comparada con Suiza)
Visite Ginebra, Montreux, Murten, Berna, Fribourgo, Vevey, Thun, Interlaken, Lucerna, Zurich y algun pueblecito más por Interlaken. Estan bien pero no es lo más impresionante de Suiza. De estos, destaco Lucerna, Murten, Thun y Berna.
De las excursiones campestres hicimos varias:
En Lauterbrunnen, a diferencia de otras rutas que vi por aquí, subimos a grimmenwald y de ahí hicimos una ruta hacia abajo, hasta la base del teleferico. Es una ruta preciosa con cascadas, rios, naturaleza, etc. Tarmamos unas 5h porque paramos mucho e ibamos muy tranquilos. La ruta de Murren a Gimmenwald me parece muy poca cosa y eso que nosotros tenemos forma fisica cero.
Exactamente este día fuimos a visitar trummelbachfalle, aparcamos ahí y fuimos andando al teleferico, subimos y bajamos haciendo la ruta, luego visitamos la stubachfalle. Hacerlo con bueno tiempo.
Otro día fuimos a hacer la ruta del Bachalpsee. Hicimos un poco de teatro diciendo que teniamos la swisspass y nos costo la mitad. La ruta es sencilla y tiene buenas vistas pero a nosotros pronto se nos levantaro niebla y nos estropeo las vistas. Lo mismo, subir con cielo azul, que no es facil.
Otro día fuimos a ver el glaciar Alesch. Aquí también dijimos que teniamos la swisspass y nos costo la mitad. Las vistas son muy buenas y con el superzoom de la camara de video se veia la plataforma de jungfrau donde sube el tren ( Yo no subi al jungfrau y no lo eche de menos)
Otro día hicimos la ruta de los tres puertos. Esta bien pero es muy cansada para conducir. Se pasa por el teleferico del puente de trift y por el glaciar steingletscher, que esta bastante bien. Esta cerca de un restaurante y tiene detrás una carretera de pago que te deja muy cerca ( Es de pago pero si no pagas, tampoco pasa nada) El resto de la ruta no esta mal pero tampoco fue de lo que mas nos gusto. Al glaciar del rodano no entramos porque 9 francos nos parecio caro y ya hemos estado en otras cuevas de hielo.
Este día vimos reichenbachfalle y la gruta de aareslucht ( tiene entrada conjunta por 13 francos) No esta mal pero he visto grutas mejores en Austria.
Otro día fuimos a Zermatt. Aquí nos hizo un tiempo explendido. Teniamos pensado subir a algun teleferico pero al final del pueblo, con buen tiempo se ve perfectamente y no es necesario subir para verlo.
También fuimos a Rosenluital que es un valle que tiene una carretera muy jodida para llegar. El valle esta bien y tiene una gruta a la que no entre. También vimos la Giessbachfalle que es una de las cascadas que mas nos gusto.
Algunos apuntes:
Se paga parking por todas partes.
No es dificil conseguir el descuento del swisspass, sobretodo en zonas menos turisticas, aunque no lo tengas.
Tened en cuenta que es muy complicado que haga 6 días seguidos de buen tiempo, así que sed realistas y prever planning alternativo.
Las distancias aunque parezcan pequeñas, se hacen eternas dado que las carreteras tienen muchisimas curvas. Los días no se aprovechan a tope porque de un sitio a otro se tarda bastante.
Si vais en coche, comprar todo lo que necesiteis de comida y demas fuera de Suiza porque es muy caro.
En algunas granjas cuando pasas tienen surtidores de leche biologica o incluso selfservice de quesos. Yo pare en uno que abrias una nevera, pillabas el queso que querias y le dejabas el dinero en un bote.La gente es muy honrada.
De chocolates nos hemos comprado un monton de caillier que usa leche condensada.
En fin, un pais muy bonito, muy caro, con tiempo muy cambiante y con unas carreteras insufribles.
Y lo de que los suizos son muy educados, yo me he deido topar con todos los imbeciles. Y lo de que respetan las normas de trafico, un mito. Yo los he visto saltandose limites de velocidad, semaforos en rojo, pitando a otros conductores, etc.
Espero haber ayudado a alguien
PD: Yo pegue la viñeta y la despegue sin problemas. Si alguien esta interesado, que me mande un mensaje.
PD: Yo pegue la viñeta y la despegue sin problemas. Si alguien esta interesado, que me mande un mensaje.
La viñeta te refieres a la pegatina que hay que poner en el coche al entrar en Suiza...la vendes?...cuánto cuesta normalmente?...yo a lo mejor estaría interesado pero me voy el siguiente sábado y soy de canarias...no sé si me llegaría a tiempo...
Buff, para el sabado siguiente y en canarias. Muy arriesgado que te llegue.
En la zona de interlaken, lo de decir que tienes el swiss pass, es mas complicado porque es mas turistica y en todos los sitios te pone que tienes que enseñarlo.
Nosotros le echamos bastante teatro y colo. En el Alescht no hubo problema, con decirlo, colo.
En Zermatt iba a hacerlo pero como se veia tan bien desde abajo, ni lo intentamos. Es que los telefericos suizos, valen un paston.
A mi el que mas me gusto fue el del aigue du midi, en el Mont Blanc.
En Zermatt, si tuviera que elegir entre el Matterhorn Glacier Paradise y el Gornegrat, me quedo con el Gornegrat porque se ve la cara bonita de la montaña, a parte que vas en tren todo el recorrido y en el otro son todo telecabinas.
Eso sí, también se ve la cara bonita desde el pueblo (aunque no las lenguas de los 3 glaciares) así que si queréis tener una vista distinta es mejor el Glacier Paradise.
Que suerte, a mi me hicieron enseñar siempre el Swiss Pass.
Recuerdo a quien le enterese que tengo la viñeta perfecta, ya que no llegamos a pegarla. 10 euros con envío incluido. Enviar un privado.
Hola a todos,
Con la viñeta que lleva el coche y te ponen en la frontera ya no se paga ningún peaje en el resto del país?....o existen determinadas carreteras que aún así hay que pagar?
Bueno, pues este finde he visitado Lausanne, Friburgo, Basilea y St. Ursanne. La gran decepción para mí ha sido Lausanne y la alegría Friburgo de la que no me esperaba mucho y me ha encantado.
El pueblecito de St. Usanne muy recomendable, en media hora se ve enterito y tiene una estética medieval muy chula, la pena es que cuando fuí el pueblo tenía una fiesta con la temática "Abba" y desentonaba un poco xDD
PARA LOS QUE ESTÉIS EL FINDE QUE VIENE EN SUIZA. Se celebra la "desalpe", o sea, cuando bajan las vacas (algunas veces ovejas y cabras) de los pastos la pueblo y adornar a los animales.
Algo muy típico y curioso de ver. Si lo ponéis en google images podréis ver fotos. Se celebra en muchos pueblos así que tenéis sitios de sobra para elegir: www.myswitzerland.com/ ...2=alpabzug
A comienzos de este año, un ranking de The Economist situó a Suiza como el destino ecológico número 1 del mundo. Una de las razones fue el Jura, en la frontera con Francia, una región que condensa gran parte de lo que es este moderno país europeo: verdes montañas, prístinos lagos, ordenadísimas ciudades históricas y, por cierto, pueblos completos dedicados a fabricar los relojes más famosos del mundo.
Texto y fotos: Sebastián Montalva Wainer, desde el Jura, Suiza.
Simplificando, la historia fue más o menos así. Los primeros relojes suizos comenzaron a fabricarse en Ginebra en el siglo 16. Y todo fue por culpa de Calvino: debido a la reforma protestante que él había impulsado, el uso de joyas quedó absolutamente prohibido para los fieles. Así es que los joyeros de entonces no tuvieron más que dedicarse a otra cosa. Y esa "otra cosa" fueron los relojes. Claro: para la época, un reloj no era considerado una joya sino más bien un objeto de esencial utilidad.
Entonces nació el primer gremio de relojeros suizos. Y, de pronto, hubo tanta competencia en Ginebra que varios tuvieron que partir por más oportunidades hacia el norte, hacia la región del Jura (léase "Yura"), justo en la frontera con Francia. Se quedaron en el Jura. Tuvieron hijos. Nietos. Bisnietos. Tataranietos. Y todavía siguen aquí, fabricando con sus manos, todos los días, los relojes más famosos del mundo.
"Cerca de aquí, en el pueblo de Les Breleux, le hacen los relojes a Rafael Nadal", dice Wisard Toinette, oriunda del cantón de Jura, uno de los 23 que conforman Suiza, mientras viajamos por el villorrio de Le Bémont, entre montañas y campos perfectamente trabajados (ésta es, también, zona de granjeros). En unos minutos más atravesaremos Le Locle y La Chaux-de-Fonds, dos ciudades que nacieron por y para la relojería, hoy patrimonios de la Unesco (en La Chaux-de-Fonds está el mayor museo del mundo dedicado a la relojería; www.mih.ch); y, después, Saignelégier, donde le hacen los relojes al otro gran tenista del mundo, esta vez de la casa: Roger Federer.
Pero sigo pensando en Calvino. Y en la historia del Jura, región que he estado recorriendo en los últimos dos días. También en Nadal. Así que, más tarde, busco mayor información: el reloj del tenista español, que es de marca Richard Mille, cuesta medio millón de dólares.
Los protestantes de antaño se espantarían.
La analogía relojera sirve, también, para describir a la región del Jura y Tres Lagos, como se conoce oficialmente a este destino suizo, por agrupar todo un circuito turístico alrededor de los lagos Neuchâtel, Biel y Murten: este lugar está como detenido en el tiempo. No porque se trate de un destino de ciudades antiguas -que las tiene-, ni porque en sus parajes aún se viva como antes -las granjas, que abundan en esta región donde se habla francés, son prueba de aquello-, sino porque, casi siempre, el Jura luce tan quieto que parece una fotografía.
Toda Suiza, en realidad, es así: como un dibujo. Este país es el mejor sinónimo de paisajes siempre verdes, limpios, silenciosos, ordenados. Los lagos del Jura, por ejemplo, son realmente transparentes, a tal punto que hasta las autoridades locales, con absoluta confianza, instan a los turistas a beber de sus aguas.
Uno duda, claro, porque es desconfiado.
Hace unos meses, el libro Pocket World in Figures de la revista The Economist puso a Suiza en el primer lugar de los destinos más ecológicos del mundo, destacando que cada año recibía más de 10 millones de turistas en busca, sobre todo, de trekkings en la naturaleza. Pues bien, la región del Jura es uno de esos sitios predilectos entre los viajeros activos y verdes. De hecho, bordeando el río Doubs -la frontera natural entre Suiza y Francia- está una de las "32 mejores caminatas" suizas, según una lista elaborada en el propio país: un escénico circuito de 15 kilómetros, de nivel fácil, que va desde los pueblos de Sobbey hasta St. Ursunne (más detalles, www.myswitzerland.com; desde iTunes se puede bajar la aplicación Swiss Hike para iPhone, que tiene el ranking completo).
Hoy probamos otra de las tantas rutas de la región, saliendo desde Neuchâtel, la principal ciudad del Jura -con sólo 31.500 habitantes-, que lleva el nombre del mayor lago del país, que tiene un lindo castillo medieval y una interesante vida universitaria. El sendero va desde el paso La Tourne hasta La Vue-des-Alps -dos ínfimos puntos en el mapa-, y conjuga muy bien los principales atractivos de este lugar: montañas absolutamente verdes, pequeños caseríos enclavados entre ellas, rebaños de vacas pastando por aquí, por allá, y praderas que más parecen campos de golf.
Nos dicen que la ruta toma dos horas y, tratándose de Suiza, no caben dudas. En precisos 120 minutos, por un sendero bien indicado con letreros y frecuentes flechas amarillas pintadas en las rocas, caminamos por las crestas del Jura, admiramos los tres lagos de la región e, incluso, tenemos suerte: el día despejado da para ver hasta los Alpes, que están al frente, incluido el Mont Blanc, en Francia-Italia, la mayor cumbre de Europa (4.810 m).
El paisaje llama a la reflexión. En medio de las montañas del Jura es difícil no ponerse a pensar en la historia de este pequeño país: en cómo se ha mantenido ajeno a los conflictos mundiales; o en cómo sus casi ocho millones de habitantes, pese a hablar idiomas diferentes -alemán, francés, italiano y romanche- parecen vivir en absoluta armonía. "Suiza es el único país donde esto funciona", comenta orgullosa Corine Estoppey, quien conduce unas educativas caminatas botánicas en el parque Chasseral (voyagenature.wordpress.com), la montaña más alta del cordón del Jura (1.607 m). "Y es sorprendente, siendo gente que viene de otros lugares y habla distintas lenguas. En Suiza nadie quiere ser independiente, porque sabemos que estar unidos nos beneficia".
Hago el ejercicio unas horas más tarde, comiendo una trucha a la mantequilla junto a varios suizos en el restaurante La Theusseret, frente al río Doubs. Les pregunto si saben cantar el himno de su país. Y resulta que no. No se saben la letra. Pero luego leo un dato oficial: un tercio de la población no se sabe el Swiss Psalm, el himno declarado oficial en 1981 (antes se entonaba una canción llamada When my fatherland calls, con la misma melodía de la británica God save the queen). Así que, de a poco, algunas cosas van quedando claras. El patrioterismo, al menos como uno lo conoce, no va con Suiza.
El Jura no es puro lago y montaña. En sus alrededores, pequeñas ciudades medievales y barrocas súper bien conservadas, son un atractivo adicional. Por ejemplo, allí está Murten, frente al lago homónimo, un pueblo de más de 800 años que aún conserva su centro amurallado, con varias callecitas adoquinadas y esquinas para perderse. O Solothurn, a orillas del río Aar, que -como aquí les gusta decir- es "la ciudad barroca más bella de Suiza".
Cierto o no, Solothurn tiene varias joyas arquitectónicas de los siglos 16 y 17 -el Castillo Waldegg, la Catedral de St. Ursen- y una curiosa historia ligada al número once, cuyo origen aún nadie ha podido explicar con certeza. Sépalo: Solothurn fue el onceavo cantón en integrar la Confederación Suiza, tiene 11 iglesias, 11 capillas, 11 fuentes, 11 torres, la Catedral tiene 11 altares y 11 campanas, y la escalera hasta su entrada está dividida en grupos de 11 peldaños. La cerveza local, por cierto, se llama Oufi, que quiere decir "once" en suizo-alemán.
Recorro Solothurn junto a una periodista polaca que no para de sacar fotos. A nosotros, sudamericanos, nos sorprenden ciudades como ésta, con castillos y palacios. Pero ¿los polacos no tienen algo parecido? "Tal vez en ciudades como Cracovia", dice ella, con la cámara en la mano. "Pero Polonia fue muy destruida por la guerra. Aquí, en cambio, no hubo bombardeos. Y, a diferencia de mi país, se nota que en Suiza tienen mucha plata para mantener toda esta arquitectura histórica".
Un par de horas después navegamos por el verde lago Biel, tomando un chocolate caliente -suizo, obvio- y mirando las casas construidas en las laderas de las montañas del Jura. Vamos hacia la isla de St. Pierre, famosa por haber sido refugio del escritor Jean Jacques Rousseau durante su exilio en Suiza, en 1765. Su pequeño cuarto, en una antigua abadía -hoy convertida en el hotel St. Petersinsel- es una de los hitos turísticos de la región.
La isla es, en sí, un buen recurso para describir a todos los rincones de la región del Jura: sitios verdes, silenciosos, con varios senderos para caminar o pedalear y que, a primera vista, parecen aislados, pero que en realidad tienen sorprendentes conexiones.
El transporte público en Suiza -trenes, buses, barcos- es capaz de llegar a los pueblitos más pequeños y alejados, aunque éstos parezcan de mínima importancia y uno creyera que no justifican estar dentro de un recorrido. Además, las distancias entre las ciudades suizas son, a veces, irrisorias: para llegar de Solothurn a Biel, por ejemplo, uno viaja en tren, pero el trayecto es casi como ir en metro desde Baquedano a Tobalaba. Claro que con un gran detalle: no hay atochamientos. Ni menos, retrasos.
Es fácil entender por qué: desde el siglo 16 aquí sólo usan relojes suizos.
Desde la cadena montañosa del Jura se puede ver Francia y los Alpes.
Así es la vista desde el sector de Chasserral, la mayor altura del Jura (1.607 m).
Datos prácticos
LLEGAR
Swiss (www.swiss.com) es la opción más directa para volar a Suiza. Sale desde Sao Paulo, pero el tramo desde Santiago se hace con Tam. Se puede llegar a Zurich y desde allí viajar en tren -lo más fácil- a Neuchâtel u otra ciudad del Jura. Solothurn, por ejemplo, está a 45 minutos de Zurich.
Si recorrerá el país por varios días, ideal es comprar el Swiss Pass, que permite usar todo el transporte público (trenes, buses, botes) y, al final, resulta mucho más económico (www.swisstravelsystem.ch/en).
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