Compré un billete de Ryanair con esta agencia, y a las 24 horas de partir recibí un correo en inglés de la compañía aérea diciendo que la agencia vendía iregularmente los billetes y que por tanto tenía que hacer una verificación propia con ellos para poder facturar. El proceso una app, pagando una tasa por su uso, que tras 2 horas de pelea no hubo manera de que verificara.
Así que no me quedó otro remedio más que hacer la facturación en el aeropuerto, lo cual me supuso un pago adicional de 30€. Además, por un comentario que me hicieron los empleados, intuyo que la app de verificación no funciona en realidad.
En la sección de ayuda de la agencia estaba previsto este asunto, y por supuesto le pasaban la culpa a Ryanair. Tanto monta, monta tanto, aunque en este caso estamos hablando de la agencia que vende billetes sin permiso y es la que cobra el dinerito, al margen de que a Ryanair ya la conocemos todos.
Si llego a leer este hilo antes, no compro el billete con ellos. Y desde luego, no lo volveré a hacer nunca más.