Isla Negra es una estupenda excursión de un día para hacer desde Santiago, tal y como indica siempreNverano.
Para llegar en transporte público desde la capital se compra un billete con la compañía Pullman en la estación de la Alameda. Tarda aproximadamente una hora y media en llegar a esta localidad y hay una única parada. Para ir a la casa de Pablo Neruda hay que continuar calle abajo unos 400 ó 500 metros sin cambiar de acera y girar a la derecha, a la altura de unos puestos de artesanía (si siguen estando), por una calle de tierra cuesta abajo.
La casa de Pablo Neruda en Isla Negra tiene un límite de aforo y no existe la opción de adquirir por Internet la entrada. Mejor llegar temprano por si acaso. La entrada cuesta actualmente $7200 e incluye una audioguía. Una vez adquirida la entrada hay que hacer cola, puesto que el acceso al recorrido por la casa se hace en grupos pequeños a intervalos regulares, para que no se agrupe demasiada gente en las mismas habitaciones. Únicamente está permitido hacer fotos en los espacios exteriores.
La decoración de la casa es original. Hay una sala que está decorada con mascarones de proa y maquetas de barcos veleros, el pasillo de las caracolas marinas y los barcos dentro de botellas, la sala del caballo, la habitación de la Covacha, a la que puso de tejado de zinc para escuchar el sonido de la lluvia cuando se sentaba a escribir. En el exterior hay elementos interesantes, como la locomotora, la barca que adquirió pero en la que nunca navegó (una vez en el exterior de la casa invitaba a ella a sus amigos para celebrar veladas) o la tumba de Pablo Neruda y su mujer Matilde Urrutia.
Fue en esta casa donde Pablo Neruda escribió una parte importante de su obra literaria. Residió en ella hasta 1973, desde donde tras el golpe de estado militar y ya gravemente enfermo, fue trasladado en ambulancia a Santiago y allí moriría. Sus restos mortales fueron movidos a la casa de Isla Negra en 1992, junto a los de su esposa.
Aparte de la casa, cuya originalidad es una maravilla, el estar frente al océano Pacífico le proporciona un encanto adicional.
Algunas fotos:
La casa museo cuenta con un restaurante que se llama El Rincón del Poeta. La comida es muy buena y el entorno incomparable, con el mar enfrente. Es conveniente reservar.
En la tienda de souvenirs se pueden adquirir multitud de recuerdos como libros o posters con poemas de Pablo Neruda.
Saludos.