Día 3 (Lunes 24 de Julio)
Nos levantamos a las 8.15h y acabamos de preparar la maleta. Al poco nos vamos a desayunar de nuevo a la Pasticceria Rizzardini, espectacular como siempre. El café está buenísimo, y las pastas también. Volvemos al apartamento y recogemos todo. Dejamos la basura en la calle al lado de la entrada principal (hay que dejarla temprano) y cuando bajamos con la maletas justo la vienen a recoger. Hemos estado muy bien en este apartamento, muy recomendable.
Vamos al vaporetto en la parada de San Silvestro y cogemos el número 1 dirección Piazzale Roma. Llegamos a las 10.45h y compramos algo de comida para el camino. A las 11h cogemos el Goopti y a las 14.30h estamos en Ljubljana. El día está feo y está chispeando. Para cuando hemos llegado al apartamento ya llueve más. Nos alojamos en el City Centre Apartment Streliška, apartamento bastante bonito y amplio. Por el precio está bastante bien. Sitio funcional en el centro que te permite ir a todas partes en poco tiempo. Hacemos el checkin y nos explican un poco de todo.
Salimos a la calle al cabo de un ratito y la primera impresión de la ciudad es de muy ámplia y limpia. Me resulta agradable y bastante bonita. Nos pasamos por el restaurante Hisa Pod Gradom (que tenemos justo delante del edificio de apartamentos donde nos alojamos) para reservar para más tarde sobre las 20h para cenar. Como está lloviendo bastante decidimos coger el funicular que tenemos al lado, detrás del teatro de las marionetas (que nos quedamos pendientes de poder ver porque no hay obras los días que estamos; lo apuntamos para la próxima). Con ese transporte nos vamos a ver el Castillo. Desde afuera se ve muy bonito, pero por dentro lo encuentro muy normalillo pero con bastantes exposiciones. Las que más nos gustan son el museo de marionetas y el museo de Eslovenia (donde explican la historia del país). El resto más o menos, aparte de que como llueve bastante no podemos apreciar mucho los exteriores.
Vistas de esta bonita ciudad desde nuestro apartamento
Ascensor de subida al castillo de Ljubljana
Teatro de marionetas del castillo de Ljubljana
Como aún es pronto nos paramos en el Daktari Klub a tomar algo. Lourdes y yo nos pedimos unas copas de vino (un Pinela y una Malvazija Reja) y mi cuñada una birra (aquí todas son de medio litro, mucho mejor y más económicas que en Barcelona en comparación), en particular la Mahr’s Bräu Kellerbier, muy buena. El sitio está tranquilo a esta hora y pasamos un buen rato.
Alrededor de las 20h vamos ya al restaurante. Espectacular. Pedimos foie con trufa, sopa del día, un plato especial con un poco de todo y ternera, todo brutal. De beber dos botellas de Pinela Colja, y de postre un pastel de queso. Nos pasamos un montón (como nos pasará la mayoría de las veces del viaje, aquí las raciones suelen ser bastante abundantes). Nos sale todo por unos 109€. Muy bien.
Cuando salimos de allí ya nos vamos a nuestro apartamento a hacer la digestión y a dormir.
Día 4 (Martes 25 de Julio)
Nos levantamos con la supercalma, sobre las 9.30h, contemplando que en la calle hace muy buen tiempo. Aún así no hace mucho calor, unos 20º o así, divino. Salimos a desayunar a una panadería al lado que es de todo menos guiri, con varios abuelos por allí, y pedimos unos bocatas, unos “caffe latte” y croissants. Todo muy bueno y baratísimo (tres cafés, dos bocatas y dos croissants por 8€, tres veces menos de lo que pagábamos en Venecia dos días antes).
Muy cerca de nuestra casa tenemos una oficina de turismo de Ljubljana, así que nos acercamos para coger mapas y que nos expliquen un poco lo que se puede hacer.
Escultura de letras al lado de la puerta de la oficina de turismo de Ljubljana
Primero de todo vamos a un mercado muy grande que hay delante de donde hemos desayunado y compramos fruta. Seguimos la ruta pasando por el Dragon Bridge y nos dirigimos al puente triple paseando al lado del río.
Detalle de un dragón de un puente de Ljubljana
Luego nos dirigimos al teatro Opera (que vemos por fuera) y de allí al parque Tivoli, que es impresionante. Más que un parque es un bosque. Te podrías pasar un día entero y no recorrerías ni la mitad. Así que como hace bastante buen día nos pasamos un ratazo por allí subiendo un rato y “perdiéndonos” por sus senderos. Candela se lo pasa genial cogiendo moras, fresas, viendo ardillas y persiguiendo pájaros. La verdad es que no hay mucha gente, estamos casi todo el rato solos y la tranquilidad y la paz que emana el lugar es genial.
Cuando se va acercando la hora de comer salimos por otra punta del parque y bajamos hacia el famoso Hot Horse, donde nos comemos unas hamburguesas buenísimas y enormes. Espectacular. Muy recomendable.
Mientras tomamos unos cafés allí mismo vemos que vienen unos nubarrones super oscuros, y mirando en la app del móvil Rain Alarm parece que se acercan tormentas bastante potentes, así que nos vamos rápido hacia casa, que estamos bastante lejos.
El cielo tenía una pinta chunguísima
Al final no es para tanto pero durante un rato llueve bastante, con lo que nos quedamos en casa descansando. Sobre las 19.30h ha dejado casi de llover y nos vamos a dar una vuelta, y a las 21h vamos a cenar al restaurante Luda que de los sitios más guays que habíamos visto mientras preparábamos las vacaciones. Y la verdad es que muy bien. Aunque un poco de descontrol con el tema de los platos, la comida es excelente. Hacen unos menús de 5 platos con maridaje que tienes que elegir de entre varios platos. Salimos los 3 por 177€ (Candela come un poco de lo nuestro). Aparte le pedimos a la camarera que nos dejen ver los vinos y nos apuntamos uno de ellos para ver si podemos visitar la bodega Borja en Vipava cuando pasemos por allí.
Detalle de los platos que nos pedimos en el restaurante Luda
Detalle de los vinos que tomamos en el restaurante Luda
Cuando acabamos de cenar nos vamos a dar una vuelta, y aunque está todo bastante cerrado conseguimos entrar en un bar llamado Pritlicje, de los pocos sitios abiertos a las 23.30h (locurón, tardísimo, jaja). La decoración del lugar es muy curiosa y me gusta bastante, y la selección musical también está bastante bien, así que ya nos sentamos animados. La carta de bebidas es bastante extensa, y me encuentro con la gratísima sorpresa de que un gintonic de Monkey’s cuesta 8,20€, baratísimo (esa ginebra es de las más caras en Barcelona, te puede salir un gintonic de Monkey’s por unos 15€ - 20€ normalmente). Y no es garrafón, sino que el combinado está bueno.
Nos quedamos un rato con nuestras bebidas, pero como Candela está empezando a dormirse nos vamos al apartamento sobre las 0.30h.