Día 5 (Lunes 1 de Septiembre)
Nos levantamos con el día un poco mejor, desayunamos muy bien (Scottish, como no), y nos vamos a comprar comida a un super (de la cadena Cooperative, una de las típicas del país). Pagamos también aquí con tarjeta. Vamos haciendo fotos de camino por este precioso pueblo.
Puente de piedra que tenemos al lado del B&B
El río que pasa por el pueblo
Volvemos al B&B, pagamos todo lo que debemos, y nos ponemos en marcha.
Salimos de los bosques de los Trossachs (precioso), y nos metemos en las Highlands. Impresionante.
Nos paramos cada dos por tres a hacer fotos. Está nubladillo, pero no llueve. Eso sí, hace un viento bastante fresquete.
Montaña de las Highlands
Otra montaña típica de esta zona
Más vistas preciosas
Se me acaban las palabras ante tanta belleza
No me canso de ver estas fotos
Otra foto de las Highlands
La última que pongo
Una de los paisajes más bonitos es el que vemos en Glencoe, es increíble.
Zona de Glencoe
Otra foto de esta montaña
Después de las mil paradas para fotos, estamos un par de horas dando una vuelta por Fort William. Un pueblo bastante turístico pero bonito. Vemos mucha gente mochilera descansando allí, puesto que es el pueblo donde acaba la West Highland Way (un trekking de varios días que va de Glasgow a Fort William).
Fachada de una iglesia de Fort William
Desde allí, seguimos la carretera hasta Glenfinnan, para visitar el lago y la estatua de la llegada de los Jacobitas delante del Loch Shiel, y ver también el puente por donde pasa el Jacobite Steam Train (y que es lugar de escenas de varias pelis de Harry Potter). El tren se puede coger por la mañana en Fort William, y dicen que es de los mejores viajes que hay por el Reino Unido. Aunque nosotros pasamos por allí a última hora y ya no hay tren ni nada. Pero de todas formas es muy bonito. Eso sí, nos empiezan a atacar miríadas de mosquitos y tenemos que huir de allí a toda prisa, una vez hechas las fotos de rigor.
Panorámica de Glenfinnan que hice subiéndome a un monte que había enfrente
El lago de más cerca
Puente del Jacobite Stream Train
La última parada del día es también nuestro destino, Mallaig, y el Ashdale Bed and Breakfast. Es precioso, y la dueña bastante maja también. La única pega es que la semana anterior se les ha roto la cuna que tienen, y la niña duerme de nuevo en un colchón en el suelo, con lo que no dormimos mucho esa noche.
La url del sitio: www.mallaigbedandbreakfast.co.uk/ o www.road-to-the-isles.org.uk/ ...s.php?id=8 . Nos ha salido por £70 cada habitación, y nos regalan unas botellitas de whisky (que nos bebemos esa misma noche; son unos chupitos, pero es un detalle muy guay).
Le preguntamos a la dueña algún sitio para cenar y nos recomienda un par. Vamos al primero de ellos, llamado “The Cabin”, y tenemos una suerte increíble. Es muy pequeño y sólo queda una mesa. El restaurante es muy bonito, una sala con paredes de madera y moqueta, y 7 u 8 mesas máximo. Al lado hay una pareja de turistas que mueven la mesa muy amablemente para que todos quepamos mejor. Detrás tenemos una mesa de una familia al completo (padre, madre, dos niños y dos niñas), y la niña más pequeña, de 4 o 5 años, se pasa un buen rato jugando con Candela. La cena es deliciosa, pescadito y un par de botellas de un vino blanco chileno bastante decente. Además, es el cumpleaños de uno de los niños y todos cantamos el “happy birthday” cuando le traen un pastelito, para vergüenza máxima del chaval. Como justo ese día también es nuestro aniversario de boda (7 años ya), también nosotros tenemos postre con velitas jaja.
Pastelito de celebración de nuestro aniversario de boda
Nos vamos al B&B encantados con la cena y la gente del lugar, y como remate de la noche hacemos una partidita de uno brindando con el whisky que nos habían dejado. Así que se nos hace la 1h de la noche cuando apagamos las luces.
Botellita de whisky que nos regalaron en el B&B de Mallaig