SENDERO AL CASTILLO DE CHIREL DESDE EL EMBARCADERO
El Castillo de Chirel pertenece a Cortes de Pallás, pero existe un sendero que conduce a él desde el embarcadero de Cofrentes junto a la antigua presa del Embalse de Embarcaderos. Por ello, es una actividad que se complementa bien con el crucero fluvial que sale del mismo punto. Nosotros elegimos sendero por la mañana, cuando el aire está más fresco, y paseo en barco por la tarde, después del esfuerzo.
Para los menos andarines, el vehículo puede acercarse por carretera hasta un punto que Google identifica actualmente como "Acceso al Castillo de Chirel". Allí hay un anchurón para aparcar. En fin de semana, no pasará desapercibido.
Nosotros seguimos la senda que sale del mismo aparcamiento del embarcadero. La dificultad es media pues salva 550 m de desnivel en 12 Km. Las panorámicas desde el Castillo, compensan. Hay que explorar también un poco alrededor, con las debidas precauciones.
Vimos indicios de obras en el castillo y me alegro pues había leído comentarios sobre su abandono. Vimos también a gente haciendo el canelo subiendo a la torre no consolidada y pegando saltos por ahí arriba. Un disparate por su seguridad y un desprecio a un patrimonio frágil.
PASEO FLUVIAL POR EL JÚCAR. FIORDOS A LA MEDITERRÁNEA
Terminado el sendero, nos sentamos en las mesas de madera que hay a orillas del embalse para almorzar en un entorno privilegiado. Llevábamos provisiones, pues no sabíamos qué íbamos a encontrar, pero existe una pequeña cantina donde compramos bebida fresca y café envasado tipo Frappé.
La empresa que organiza los recorridos en barco es suaventura.com/ A día de hoy, no vi ninguna otra y esta es la enlazada por la página municipal de turismo. En temporada media no funcionaban todas las salidas; yo elegí las 16 h para encajar bien con el almuerzo y que quedara tarde para una visita a Cortes de Pallás.
El recorrido recuerda a los fiordos en el sentido de las altas laderas y los recodos en los que no sabes por dónde va a seguir el barco. El paisaje es muy chulo, a la mediterránea. En la foto se puede distinguir el castillo, diminuto, a la izquierda ¡Menudo emplazamiento!
Las explicaciones estuvieron bien. Destaco a la capitana que aprendió el nombre de los niños, interaccionó mucho con ellos y hasta les dejó guiar un ratito, con la reglamentaria gorra puesta. Más contentos...
La cosa duró hora y media y nos dejó unas horas de luz para conocer Cortes de Pallás. Algo larga y tortuosa la carretera, pero al menos ya vuelve a haberla, tras una temporada en que estuvo cortada.
Cortes es muy coqueto, acunado en su ladera. En este tiempo había vistosas macetas de flores. Nos atrajo la Senda Cavanilles o de la Cortada (SLV-13) de la que hicimos un tramo pero no quedó tiempo para completarlo. Picamos cosas ricas de la tierra en la terraza del Bar Emiliano y regreso a Cofrentes. _________________ Todos somos ignorantes, solo que de distintas cosas. Albert Einstein.
Mi alojamiento en Cofrentes fue el Hotel Torralba.
Puntos fuertes para mí:
-Precio
-situación a las afueras de Cofrentes pero a distancia caminable al centro. Muy conveniente para entrar, salir y aparcar. El hotel tiene un espacio cubierto para esto último.
-Vistas. La foto está tomada desde mi habitación.
-El desayuno se sirve temprano; me gusta para aprovechar las horas de luz.
-Tranquilidad.
La reserva es a la antigua, por teléfono. Ya no estoy tan acostumbrada a esto y me gusta tener algo por escrito. No obstante, ningún problema.
Nunca vimos a nadie en recepción. Las llaves se recogían mediante código. Hubo contacto ágil mediante whatsapp y una petición que surgió fue atendida en seguida. Las personas que nos atendieron en el desayuno fueron también muy amables.
También consideré el Balneario de Hervideros pero a) queda retirado de Cofrentes, muy para hacer la vida allí. B) cuando quiera que mirara, incluso meses antes, siempre daba sin disponibilidad en su web _________________ Todos somos ignorantes, solo que de distintas cosas. Albert Einstein.
En las cosas del comer fue donde encontré yo más deficiencias en Cofrentes.
Almorzamos en el Mirador del Cabriel, un establecimiento básico, no obstante su situación y unos ventanales espectaculares, que hace las veces de cantina del contiguo centro social. Nos sirvieron un menú sencillo que hizo el apaño. No dan cenas, así que por la noche tocó explorar los dos bares de la plaza. Uno cierra pronto, así que la cosa quedó reducida al Bar de la Liber, un poco lúgubre.
Tampoco me dejó la mejor de las impresiones la tienda de comestibles donde preguntamos por unas piezas de fruta. La sensación fue de precios para visitantes.
Comparando con otros pueblos de la comarca, tengo la impresión de que Cofrentes vive en parte al amparo de la central nuclear y falta algo de iniciativa para atraer visitantes, no obstante su posición estratégica y sus valores.
La primera vista de la central es chocante para el que llega de fuera. Una presencia rotunda en el paisaje con sus chimeneas expeliendo vapor día y noche. Según nos comentaron, ellos ya se han acostumbrado. _________________ Todos somos ignorantes, solo que de distintas cosas. Albert Einstein.
Desde Cofrentes se tarda unos 15 minutos en llegar al inicio, por carretera estrecha pero asfaltada. Hay aparcamiento para una decena de coches. En domingo, conviene llegar pronto. En nuestro caso, a las 8:30 ya estaba concurrido.
El sendero consiste en la antigua carretera que sirvió de apoyo a la construcción de un canal que conduce las aguas del Júcar por el interior de la montaña. Tiene pues su rollo ingeniero, además de lo espectacular del paisaje.
La carretera más todos los materiales caídos sobre ella. Como he dicho antes, no lo haría con niños ni padeciendo vértigo importante. Mi sentido del vértigo es corriente y ningún problema. Se pone más aventurero tras el trecho inicial, más conservado. Son 5 + 5 Km ida y vuelta por el mismo camino, así que es cuestión de empezar y dar la vuelta si uno lo considera. No obstante, no hablamos de una actividad temeraria sino de un sendero catalogado: PR V 219.
Track por un buen conocedor: es.wikiloc.com/ ...e-11559831 _________________ Todos somos ignorantes, solo que de distintas cosas. Albert Einstein.
Terminamos la visita a la comarca en Ayora, a donde fuimos para comer y dar un paseo tras recorrer los Cañones del Júcar. Aparcamos fácilmente en la Glorieta. El restaurante elegido fue El Abu, que me dio buen pálpito al tratarse de un local nuevo, haciéndose su sitio en una población con buena oferta. Fue un acierto por ambiente, trato, elaboración de los platos, calidad-precio...ojalá consideraran abrir sucursal en Cofrentes, huérfana de cosas así ahora mismo.
Turismo de Ayora también se lo trabaja. Tiene una iniciativa simpática que consiste en seguir un trazo rojo sobre el suelo que conduce por los rincones más emblemáticos, bonitos o curiosos. Lo suyo es dirigirse al Convento de los Franciscanos (hoy Casa de Cultura) para leer el cuento en que se apoya la iniciativa, recoger un lazo rojo que te vincula a la población y echar a andar. Entretenido para niños y práctico para todos. Hay incluso track: es.wikiloc.com/ ...a-15518290