INTENSA RUTA POR LA COSTA OESTE USA 2015 ✏️ Blogs de USAUn viaje de contrastes, del rojo del atardecer al amarillo del amanecer, de la grandiosidad de los parques nacionales al bullicio de las ciudades, del rojo de Utah al gris y verde de Yosemite, del intenso calor en Death Valley, al frío de San Francisco.Autor: Oblomgo Fecha creación: ⭐ Puntos: 4.8 (58 Votos) Índice del Diario: INTENSA RUTA POR LA COSTA OESTE USA 2015
01: PREPARATIVOS
02: VUELO A LOS ÁNGELES, SANTA MÓNICA.
03: LOS ANGELES-OATMAN-KINGMAN, RUTA 66
04: MÁS RUTA 66, KINGMAN-GRAN CAÑÓN
05: AMANECER GRAN CAÑÓN-PAGE
06: PAGE-ANTELOPE CANYON-MONUMENT VALLEY
07: MONUMENT VALLEY-ARCHES
08: CANYONLANDS-POTASH ROAD-ARCHES
09: ARCHES-CAPITOL REEF-BRYCE CANYON
10: BRYCE-ZION EXPRESS-LAS VEGAS
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Etapas 13 a 15, total 19
ITINERARIO DEL DIA. A las siete y media estamos desayunando en el hotel, recogemos el equipaje, rellenamos la nevera con hielo, repostamos gasolina y a las ocho y veinte abandonamos Mammoth Lakes, nos ha gustado lo poco que hemos visto. Este día nos levantamos un poco espesos, ya que antes de abandonar Mammoth Lakes, teníamos intención de visitar Minarete Vista, mirador desde el cual se pueden ver montañas de Sierra Nevada con forma de dientes de sierra. No hubo manera de encontrarlo, así que desistimos. Pasamos el desvío que marca la Tioga Road y seguimos un poco más adelante, vamos buscando el South Tufa, llegamos al centro de visitantes y aparcamos. Cuando vimos que de frente se veían en la orilla del lago, las curiosas formaciones que se levantan, pensamos, más bien pensé yo, en ir directamente campo a través para ganar tiempo. Lo que parecía que estaba cerca no lo estaba tanto y los arbustos arañando las piernas, así que al cabo de un buen rato y viendo lo que todavía nos quedaba nos dimos la media vuelta y sin perder más tiempo hacia la Tioga Road. SOUTH TUFA Atravesamos sin ninguna duda el tramo más espectacular de carretera desde que iniciamos el road trip. Ese puerto de montaña, situado entre los 2.500 y los 3.000 metros, ofrece increíbles vistas. No hay mejor forma de entrar al parque nacional de Yosemite. Te encuentras el primer lago, Ellery Lake, bucólicas vistas. Un poco más adelante está el Tioga Lake, y es que es una carretera que cada pocos metros invita a pararte. Poco después alcanzamos la Tioga Pass Entrance, hay bastantes coches haciendo cola, pero vemos que un Ranger se va acercando a cada vehículo, los que tenemos el pasar anual de parques, entramos por otro carril diferente. Son las diez menos cuarto de la mañana cuando entramos en Yosemite. Y Yosemite nos recibe con su verde primaveral, con sus bloques de granito, con sus bosques de pinos que se pierden en el horizonte, con el agua fluyendo e inundando las praderas de Tuolumme Meadows. Aquí dejamos el coche y disfrutamos de las vistas. No pudimos atravesar las praderas hasta el río, estaban inundadas. Seguíamos bastante espesos y nos saltamos/olvidamos el Potholo Dome, púlpito de granito desde el que se ven muy buenas panorámicas. Este es el Lambert Dome. Entre las praderas de Tuolumme y el valle de Yosemite, se encuentra el Tenaya Lake, idílico y relajante lugar, con su playa de arena, sus mesas de pic-nic. Un estupendo lugar para parar, contemplar las vistas, picar algo. Seguimos dirección al valle, llegamos a Olmsted Point, subimos a la plataforma de granito, desde la cual se pueden contemplar vistas del lago Tenaya y también nuestra primera visión del Half Dome. Es una subida que apenas te lleva 10-15 minutos. Merece la pena. Volvemos al jeep y encaramos ahora la parte final que nos llevará al valle de Yosemite, aquí se empieza a notar tráfico. De hecho en algún momento cortan el tráfico por obras en la carretera. Una vez que estamos en el Valle, la primera de muchas paradas es Bridalveil Falls, la primera cascada que vemos en Yosemite. Esperamos cinco minutos en el parking hasta que queda un sitio libre y nos acercamos a verla. Es un paseo de 15-20 minutos. Puedes llegar hasta una especie de mirador que es dónde llega casi todo el mundo o seguir un poco más atravesando grandes bloques de piedras, muy pulidas de tanto pasar la gente y que tienen mucho peligro, cualquier resbalón, torcedura puede provocarte una avería gorda y arruinarte el viaje. Yo continué un poco más y veías gente que venía de vuelta con cara de no estar pasándolo bien. Así que mucho cuidado en esta zona, recomendable llevar botas. Siguiente parada, Swinging Bridge. Atravesamos el puente, la gente está en el río intentando refrescarse del calor. Desde aquí tenemos muy buenas vistas del El Capitán. Un sitio bonito También se aprecian las Yosemite Falls. La Upper, quinta cascada más alta del mundo. Continuamos por la carretera, que ya se ha convertido en carretera de doble y único sentido, nos detenemos en la Chapel. La ubicación es envidiable Hasta que al fin llegamos al Yosemite Village, allí hay tiendas, restaurantes, baños. Vamos a hacer el check-in. No tuvimos que esperar mucho, nos dieron un plano de dónde se encontraba nuestra tienda, los baños y las duchas, nos explicaron los horarios de las tiendas y restaurantes, que es lo que teníamos que meter en la caja antiosos y vamos a conocer nuestra tienda para las próximas dos noches. Nos sorprendió positivamente que disponía de un enchufe en el que recargar los aparatos electrónicos. El Curry Village, otro de los sitios que hay que reservar con mucha antelación. La verdad es que es caro, pero el sitio lo merece. Estás en el corazón del parque y puedes aprovechar mucho más el tiempo. Para nosotros recomendable. Una vez que hemos descargado el equipaje, cogemos el coche de nuevo y nos vamos al Centro de Visitantes, parada 5 del autobús. Esto es un error, el coche lo mejor es dejarlo en el parking y no menearlo, a no ser que vayas a Tunnel View o Glacier Point, lo mejor es desplazarse en autobús por dentro del parque. En este parque hay mucha gente y a veces se hace difícil aparcar. Queríamos hacer el Cook´s Meadow loop, un paseo de 1,6 kilómetros en el que vas teniendo envidiables vistas del Half Dome, Glacier Point, etc…además puedes enlazarla cuando llegas a la parada 6 del autobús con la ruta que lleva a a Lower Yosemite Falls. Lo que no contábamos es que nos durara todavía la “empanada” y no consiguiéramos localizar el principio del sendero, así que nos tuvimos que conformar con hacer el sendero que lleva a la Lower Yosemite Falls. Volvemos al parking y nos dirigimos a Tunnel View, queríamos ver el atardecer desde allí, del que dicen que es uno de los mejores del mundo. Lo que es innegable es que a estas horas del día, seguimos espesos, ya que en vez de coger la Glacier Point Road, seguimos todo recto hasta llegar a la salida del parque. Cuando nos dimos cuenta de nuestro error (nos habíamos dejado los planos y mapas en la tienda) ya fue imposible dar la vuelta hasta llegar a las garitas de salida/entrada al parque. Llegamos a Tunnel View y la luz ya no era la mejor, lo cual no impidió sentarnos a disfrutar de como las sombras iban comiéndole el terreno al sol. El capitán, 900 metros de granito, dónde hace varios meses se liberó en libre la vía de escalada más difícil del mundo. Aquí nos dimos cuenta que no habíamos descargado la nevera del coche, esta vez el “empanamiento” nos benefició y al menos disfrutamos convenientemente hidratados de la puesta de sol en Tunnel View. Y llegamos al Curry Village, antes de que anocheciera, nos duchamos y cenamos algo a la puerta de la tienda, como estaba haciendo todo el mundo. Un día en el que no estuvimos muy ágiles de mente, se nos pasaron varios sitios que queríamos visitar, tampoco nos importó demasiado, se trata de disfrutar de lo que ves, no de pensar en aquello que no has visto. Yosemite, un parque nacional con mayúsculas: lagos, montañas, bosques, paraíso de senderistas y escaladores, pero y sobre todo la Tioga Road, para nosotros un punto por encima del valle. El único pero es que es un parque que está más masificado que los anteriores, por lo que se hace “imprescindible”, madrugar y alejarse de los sitios más concurridos para disfrutarlo más si cabe. Etapas 13 a 15, total 19
Madrugamos, desayunamos en la tienda nuestros frapuchinos, zumos y bollos varios. La temperatura baja mucho por las noches en el valle, ya que seguimos estando a unos 1.200 metros de altitud y a pesar de que durante el día se alcanzan treinta y tantos grados al amanecer no hará más de 8-10º.
Y a las siete y media estamos bajando del autobús en la parada 16, Happy Isles. Queremos hacer el Mist Trail o camino de la niebla en la que el objetivo es ver las cascadas Nevada y Vernal. Iniciamos el camino en constante subida, atravesando puentes, saltos de agua. A estas horas apenas hay gente y como cada uno va a su ritmo, prácticamente todo el camino y sobre todo a partir de la primera cascada nos encontramos solos, además a estas horas da la sombra. Alcanzamos el lugar desde el que ver por primera vez la Nevada Fall. Desde este punto y hasta que alcanzas el tramos de escaleras con pasamanos, el spray que desprende el agua cayendo te salpica., formando una especie de neblina que da nombre al trail. Llegamos hasta que las aguas del rio Merced, se precipitan formando la Nevada fall, que todavía trae bastante agua. A partir de este punto ya empieza a dar el sol, con lo que nos preparamos para el asunto, pantalón corto, camiseta manga corta, gorra y mucha protección. Nos adentramos en un bosque desde el que vemos por primera vez la Nevada. Caminamos por terrenos empedrados Es un camino muy bonito, cruzas bosques, subes por peldaños tallados en la roca. Pasamos por delante del camino que lleva al Half Dome y finalmente llegamos hasta nuestro objetivo, el top de la Vernal Fall. El río Merced antes Y después Buscamos una sombra y picoteamos algo, contemplando las vistas del valle. En vez de volver por el camino que traíamos ahora nos volvemos por el John Muir Trail, haciendo un recorrido circular, la bajada es más larga pero más tendida, además así disfrutamos de otras vistas. En primer plano la nevada fall, al fondo el Half Dome. Y poco a poco, llegamos de nuevo al inicio de la ruta. Ahora ya nos cruzamos con hordas de de gente subiendo. Hemos tardado unas cuatro horas y cuarto con las paradas y han salido unos 650 metros de desnivel. Para nosotros una excursión muy recomendable. Cogemos el autobús que nos lleva al Curry Village. Después de ducharnos nos vamos a comer una pizza y luego cogemos el autobús que nos lleva al hotel Ahwahnee, histórico hotel de cuatro estrellas, tan bonito como caro. Satisfecha nuestra curiosidad, cogemos de nuevo el autobús que nos devuelve al Curry Village. Metemos la nevera en el coche y nos vamos hacia Glacier Point, pero antes volvemos a parar en Tunnel View, hoy tenemos mejor luz que la de ayer. Las vistas son de quitar el hipo. Atravesamos el túnel, vamos por carreteras de montaña hasta que a mano izquierda tomamos el desvío que marca Glacier Point. Un poco antes de llegar a este punto, paramos en el parking desde el que se inicia los trails a Taft Point y Sentinel Dome. Son las cinco y cinco de la tarde cuando empezamos a caminar dirección a Taft Point. Es un camino muy bonito, se nota que esta zona de Yosemite está menos masificada que el valle. Vas atravesando bosques en completo silencio. Es un paseo sin ninguna dificultad que te lleva a las fisuras. Y finaliza en ese mirador. Con vistas al valle y a las Yosemite Falls, esta es la upper. En total ida y vuelta, estuvimos una hora y cuarto. Muy recomendable. Cogemos el coche y recorremos los últimos kilómetros que nos faltan para llegar a Glacier Point, otro de los puntos estrellas de Yosemite y del que dicen que se puede ver unos de los atardeceres más bonitos del mundo. Lo que no se puede negar es que el paisaje es bestial. Desde aquí podemos observar la Vernal y Nevada Fall, por dónde estuvimos esta mañana Primer plano del Half Dome. También se observa un kilómetro más abajo el parking del Yosemite Village. Y seguimos con nuestra tradición y es que en alta montaña es muy importante la hidratación. El logotipo de North Face Y así pasamos el rato, haciendo fotos, pinchando algo de la nevera y sobre todo disfrutando del paisaje, saboreando el estar aquí y ahora en este lugar. Y ya de noche cerrada llegamos al Curry Village, descargamos la nevera en la caja antiosos (¡aquí van a bajar los osos, con la cantidad de gente y de ruido que hay!) y dejamos recogido el equipaje que mañana hay que madrugar otra vez. Un día en el que disfrutamos enormemente de Yosemite, por la mañana viendo sus cascadas, por la tarde haciendo el trail de Taft Point y disfrutando las vistas desde Tunnel View y Glacier Point del Capitán y del Half Dome. Las sensaciones que nos llevamos de Yosemite es que a pesar de ser un Parque Nacional con mayúsculas, que nos ha gustado mucho lo que hemos hecho y visto, no es tan diferente/impactante como puede ser Arches, el Gran Cañón, etc. Además en este parque se nota que hay mucha afluencia de gente, tienes que “buscarte” tu espacio. La Tioga Road y los diferentes trails y vistas que oferta el parque justifican por si solo la visita a Yosemite. Un imprescindible. Etapas 13 a 15, total 19
ITINERARIO DEL DÍA
A las siete menos diez de la mañana abandonamos nuestro hogar de las últimas dos noches, hemos desayunado, hecho el check-out y nuestro siguiente destino es Mariposa Grove. Pasamos por delante del hotel Wawona, de estilo victoriano y muy bonito, no paramos pues queremos llegar cuanto antes al aparcamiento de Mariposa Grove. Es temprano pero no queremos arriesgarnos a que el parking esté lleno. Son las ocho menos diez de la mañana cuando aparcamos el coche, sólo hay otro coche que ya está allí. Vemos el cartel que indica las secuoyas a visitar por esta parte. Aunque nosotros hicimos el recorrido sin orden ni concierto, yendo por dónde nos iba pareciendo mejor. La primera secuoya que encontramos es el Fallen Monarch, que dicen que cayó hace más de trescientos años y en el que se pueden apreciar sus impresionantes raíces. Más tarde aparecen ante nosotros “El soltero y las tres gracias”. Dicen que si uno de estos árboles cayera, arrastraría a los otros tres debido a que sus raíces están entrelazadas The Bachelor and three Graces abajo Y arriba Continuamos y emerge majestuoso ante nosotros el Grizzly Giant, el árbol más antiguo del parque y el segundo en tamaño. Las ramas son cómo árboles. Muy cerquita de éste, vemos ahora el California Tunnel Tree. Disfrutamos mucho de este paseo por el bosque, en completa soledad, con los rayos de sol filtrándose entre las secuoyas, “oyendo” el silencio del bosque roto por el trinar de los pájaros y el golpeteo de los pájaros-carpinteros. Proseguimos, ahora toca la Faitful Couple. Arriba Y abajo Reanudamos la marcha, parece que has sido teletransportado al jurásico. El turno de la Clothespin Tree, el árbol pinza de ropa. Cuando llegamos al Telescope Tree, decidimos que nos dábamos la vuelta, se nos había pasado el tiempo volando. Ahora fuimos por otro camino, ya de vuelta nos empezamos a encontrar gente que subía por el sendero. Dos horas y media después de haber empezado la visita a Mariposa, llegábamos al aparcamiento, completamente abarrotado y con un par de autobuses de chinos dispuestos a acabar con la paz del lugar. Nos alegramos de haber madrugado. Una visita que cerraba nuestro periplo por los parques nacionales de esta parte de USA y que cumplió ampliamente nuestras expectativas y una lástima que desde el 6 de julio esté cerrado por obras durante dos años. Al poco tiempo de tener planificado el viaje con la distribución de días, saltó la noticia del cierre de Mariposa Grove por obras, se preveía que durasen dos años, meses más tarde demoraban el cierre hasta el 6 de julio, así que por pocos días hemos tenido la fortuna de poder observar la inmensidad de estos árboles. A las once menos cuarto de la mañana, abandonábamos definitivamente Yosemite, nos dirigíamos ahora a la ciudad a la que más ganas teníamos de este viaje, San Francisco, a la que habíamos reservado las últimas 4 noches. Tenemos por delante casi cuatro horas hasta llegar a San Francisco, atravesamos pueblos, ranchos, es una zona de muchos árboles frutales, manzanos en su mayoría. Empieza a haber mucho tráfico, después de conducir casi en solitario por los parques nacionales, se nota que nos aproximamos a una gran ciudad, aunque aún faltan casi doscientos kilómetros para San Francisco. Hay obras en la autopista con los consiguientes parones. El tráfico lento es ya una constante hasta San Francisco. Aquí y debido a las obras el gps en vez de llevarnos por arriba se hizo un lío y nos metió por San Francisco, y lo que hasta ahora había sido tráfico lento se convirtió en un atasco impresionante, en el que avanzar unos metros era todo un triunfo. Eran las 16:45 cuando atravesamos el Golden Gate, habíamos tardado seis horas en llegar desde Mariposa Grove. Hicimos coincidir este momento con la canción “If you are going to San Francisco”, al igual que habíamos hecho en Las Vegas con “Viva las Vegas” y en Monument Valley con música de Western. Paramos en Vista Point, nuestro primer mirador del Golden Gate. Aquí paramos poco tiempo, a pesar de lo soleado del día hacía muchísimo frío, el viento parecía que te iba a levantar en cualquier momento, así que entre lo desagradable del tiempo y el hambre que teníamos, pusimos camino a Sausalito, queríamos dar cuenta de las famosas hamburguesas. Incautos de nosotros, todavía no sabíamos que sería nuestro primer y último mirador del Golden Gate. En cinco minutos estamos en Sausalito, localizamos Hamburguers, (737 Bridgeway, Sausalito) la afamada hamburguesería reconocible por su toldo verde. Encontramos un sitio donde aparcar, echamos un par de “quarters” y a pedir nuestras hamburguesas. Tuvimos mucha suerte, ya que a las 17:00 cierran. Cogimos nuestro pedido y nos vamos a comerlo con el skyline de San Francisco de fondo. Y es que Sausalito no tiene nada que ver con San Francisco, climatológicamente hablando, aquí el viento no sopla tan fuerte y hay un tiempo más agradable. Tenemos que decir que sin lugar a dudas, para nosotros esta fue la mejor hamburguesa del viaje, muy jugosa y muy rica, se lleva nuestra particular medalla de oro. Nos disponemos ahora a volver hacia San Francisco, parando en los diferentes miradores: Battery Spencer, Hendrick Point….pero nos confundimos, y sin saber ni cómo ni por qué :roll:, estábamos de nuevo atravesando el puente en dirección a la ciudad. Como el tráfico continúa siendo horroroso decidimos sobre la marcha aprovechar para ir al hotel a hacer el check-in y dejar el coche. Mañana haremos otro intento antes de dejar definitivamente el coche. Empezamos a ver estampas típicas de la ciudad. Finalmente, después de unas cuantas vueltas por las obras que colapsan el centro de San Francisco llegamos a nuestro hotel, cansado y deseando dejar el coche. San Francisco en una ciudad agresiva para conducir, van mucho más rápido que en el resto de ciudades, además aquí tocan la bocina y pitan constantemente. A lo mejor es por esto por lo que dicen que San Francisco es la ciudad más europea de Estados Unidos. Nuestro hotel, EL ASTORIA, ubicado justo al lado de la puerta que da acceso a Chinatown, sin duda alguna lo mejor del hotel es esto. Por lo demás, un “hotel” para olvidar, bajo nuestro punto de vista no se lo recomendamos a nadie. Huele mal, las paredes de nuestra habitación, 5ª planta, están llenas de salpicaduras, el techo también, los baños tienen humedades, las toallas, blancas, blancas no son. Sin duda el peor hotel en el que nos hemos alojado. Y por si fuera poco son unos impresentables. Al entrar y decir que teníamos una reserva, el chico de recepción (regentado por chinos), nos empieza a decir que ha habido un cambio de propietario y que ha establecido nuevos precios, nosotros le decimos que no lo entendemos, que hace 4-5 meses que tenemos hecha la reserva a un precio y que en ningún momento se han puesto en contacto con nosotros para avisarnos de las nuevas tarifas y así tener la oportunidad de elegir. El chico nos dice que son las nuevas reglas, 20 dólares más por noche. Que si no estamos de acuerdo podemos irnos. Después de un montón de horas en el coche, con sus correspondientes atascos, lo único de lo que teníamos ganas era de soltar el equipaje, dejar el coche aparcado hasta el día siguiente y pegarnos una ducha. A ver quién es el guapo que a las siete de la tarde de un viernes, se pone a buscar alojamiento en San Francisco. Además había otros chicos españoles en recepción que nos confirmaron que a ellos les habían hecho lo mismo. No nos quedó más remedio que aceptar sus chinescas condiciones. Pagamos también la estancia en el garaje con el que tienen un convenio, 450 Sutter St, 26 dólares por día, te dan un boleto para que lo entregues al llegar al garaje y te olvidas del coche, ellos lo aparcan y te lo entregan cuando lo necesites. Es cierto que el “recibimiento” que tuvimos en San Francisco no fue de lo más agradable y que eso condicionara nuestra posterior valoración de la ciudad, pero me sigue pareciendo una ciudad sobrevalorada, muy sobrevalorada. Como estábamos justo al lado de Chinatown, allí nos dirigimos a dar una vuelta por Grant Avenue. Estos sitios cada vez me aburren más, lo veo todo como un inmenso todo a 100. Seguro que conocieron tiempos mejores y más auténticos. Después estuvimos dando un paseo por Market Street y empiezas a ser consciente de los Homeless de San Francisco, mira que lo has oído, que hay muchísimo indigente que duerme y vive en la calle, pero una cosa es que te lo digan y otra muy diferente es verlo. Entramos en un seven-eleven, compramos algo para picar en la habitación y allí nos dirigimos, con la esperanza de que en San Francisco lo mejor estuviera por llegar. El Hotel Astoria, no se lo recomendaría a nadie, quizás por el precio inicial 75 dólares pudiera ser una buena opción, por 95 la noche, opino que ya puestos, pagas un poco más por noche y tendrás un hotel en condiciones, cuando menos limpio. San Francisco, nuestra primera impresión no ha sido la mejor: tráfico caótico, la gente no es tan amable como en el resto del viaje, hay muchísimas cuestas lo que la hacen una ciudad incómoda para andarla, aunque tiene un buen sistema de transporte público, está llena de mendigos y por consiguiente de policía, nos han estafado en el hotel nada más llegar, y eso que todavía no sabíamos que el icono de la ciudad, el Golde Gate es más difícil de ver que un billete de quinientos euros. Etapas 13 a 15, total 19
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