Sudáfrica, desde Kruguer hasta Durban. Agosto 2016 ✏️ Blogs de Sudáfrica

Por tercera vez consecutiva decidimos pasar las vacaciones en Sudáfrica, esta vez en una zona diferente aunque incluyendo de nuevo el Kruger.
Como siempre contacte con Virginia, de la agencia RithmAfricantours, y, como siempre también el trato y el resultado fueron absolutamente magníficos.
En esta ocasión íbamos 5 personas, por lo que decidí hacer la mayor parte con guía-conductor para disponer de un pequeño autobús donde poder ir todos cómodos además del equipaje y olvidarnos de conducir.
Reservé, por lo tanto, todos los alojamientos para 23 días, los transportes (2 con conductor y uno sin él), un vuelo interno y alguna actividad concreta para evitar sorpresas de última hora.
Como siempre, recordar que allí es invierno durante nuestro verano, y, aunque no hace mucho frío si conviene llevar algo de abrigo y ropa por capas para los distintos climas que hay en la ruta que haremos este año. Además repelente para mosquitos y Malarone para el Kruguer.
El vuelo Madrid-Johanesburgo lo saqué en el mes de febrero, nada más descubrir que Iberia volvía a recuperar este destino después de suspenderlo hace unos años. El precio fue de un poco menos de 500 euros, además reservé los asientos de antemano para asegurar los que queríamos.

Día de salida: El vuelo de Iberia salía casi a las 11 de la noche. Llegamos al aeropuerto 3 horas antes, plastificamos las maletas, facturamos y pasamos a la zona de embarque, hay que recordar que es la satélite, por lo que tuvimos que coger el tren que comunica las terminales. Hicimos una cena ligera, compramos tabaco y embarcamos sin retraso rumbo a Johanesburgo. En el vuelo nos dieron, casi a la 1 una cena caliente, luego me tomé una pastilla y se me pasó el vuelo en un suspiro. A las 10 de la mañana estábamos aterrizando.

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Día 1: Todo había salido estupendamente hasta que llegamos a la cola de control de pasaportes. Estuvimos 2 horas de reloj en ella. Desesperante. Más tarde nos comentaron que incluso tuvimos suerte pues algunos días la gente esperaba unas 4 horas.
Recogimos el equipaje y a la salida nos esperaba Nkuli, iba a ser nuestra guía en la primera etapa. Había pedido a la agencia que fuera ella pues la conocimos el año anterior y hubo muy buen feeling. Sacamos algo de dinero de los cajeros y salimos en ruta hacia Bela-Bela, a menos de 2 horas de viaje, hacia el norte, a una reserva privada donde estaríamos 2 noches.
Llegamos al Itaga Lodge sobre las 2 de la tarde. Tras una ducha rapidísima y un pequeño buffé frío, nos fuimos en el game-drive incluido en el precio del hotel. La verdad es que la idea era pasar la tarde descansando en el lodge, pero como habíamos dormido bastante durante el vuelo estábamos deseosos de empezar a ver animalitos.
Este parque tiene a los leones separados del resto de los animales, es un lugar de fin de semana de la gente de Johanesburgo y Pretoria, para disfrutar de la naturaleza y de actividades como montar a caballo o paseos por la sabana. Teniendo esto en cuenta el game drive se nos dio bastante bien, antílopes de varios tipos, chacales y, lo más espectacular, al menos para nosotros: un cerdo hormiguero, animal nocturno, muy muy difícil de ver, nosotros llevamos 20 años haciendo esto por media África y era la primera vez que veíamos uno, además en la cuneta comiendo tranquilamente. Es cierto que tuvimos que parar el coche bastante lejos porque son extremadamente asustadizos, pero fue muy emocionante.
De vuelta en el lodge nos tomamos una copa de vino junto al fuego y después de cenar nos tiramos en plancha a la cama.

Día 2: En este lodge ofrecen una actividad dos días a la semana que consiste en ver cómo alimentan a los leones. La llevábamos reservada porque hay pocas plazas. Nos despertaron a las 6 de la mañana, tomamos antes de salir un café con unas galletas y llegamos al lugar donde tienen a 2 leones y, en otro recinto 2 hienas. Les dieron de comer enormes trozos de carnes sobre los que se abalanzaban entusiasmados. Nada que destacar, podíamos haber prescindido de esto, es el mismo espectáculo que puedes ver en muchos zoos, pensábamos que igual estaban en zonas mucho más abiertas y que la experiencia tendría algo novedoso, pero no es así, en fin, hay cosas que hasta que no las haces no sabes si merecen la pena o no, y esta no la merece.
De vuelta, vimos hipopótamos en un lago y un poco de todo, cebras, jirafas, facoceros, antílopes, el paisaje es bastante bonito, el parque está rodeado de montañas con vegetación baja, muy seca en esa época, y con distintos hábitats con su fauna correspondiente.
A la vuelta tomamos un desayuno completísimo y abundante y nos dimos al relax. Lectura frente a la sabana, con algún que otro impala y kudu que venía de visita, y un relajante masaje en la zona de la piscina.
De nuevo un pequeño almuerzo frío y salida a ver animales. Esta vez le tocó el turno a los rinocerontes blancos, espectaculares y muy cerca.

*** Imagen borrada de Tinypic ***
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Día 3: Tras el desayuno salimos hacia Tzaneen. A mitad de camino teníamos una parada en Polokwane, en el centro cultural Bashoto, es un museo al aire libre donde reproducen un poblado Bashoto, una arqueóloga te explica la forma de vida y cómo estaba organizado este pueblo que aún sigue ocupando la zona y mantiene muchas de las antiguas costumbres. Aquí compré una reproducción, hecha con ceniza, de botes para alimentos, muy bonitos, pintados a mano y ligerísimos.
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Desde aquí empiezas a subir hacia las montañas, una carretera muy espectacular, paramos a comer en un restaurante con look alpino, muy concurrido y con buena comida. Antes de llegar a nuestro destino hicimos una parada en unas cataratas, poco espectaculares pero muy bonitas. Allí también vimos nuestro primer Blue Monkey.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Al caer la tarde llegamos a Tzaneen, a la Barune Guest Hose, una casa de huéspedes agradable, con muy pocas habitaciones y estupendos desayunos junto a la piscina. Nos dimos una ducha y salimos a cenar a un restaurante del pueblo, con buen ambiente y abundante y baratísima comida.

Día 4: Desde Tzaneen teníamos planeado un día de excursión por los alrededores. Empezando por una visita a los badobelu, un pueblo muy conocido entre los antropólogos por la tradición de la Rain Queen, es decir, una monarquía que se traspasa de madres a hijas, cosa muy poco común, y en la que se hereda, además del cargo, el don de convocar la lluvia, por eso se la llama Reina de la lluvia. En la actualidad la reina es aún una niña, pues su madre murió en el parto, y se encuentra estudiando en Johanesburgo, como no puede reinar hasta la mayoría de edad en estos momentos existe un Consejo Regente.
Le había pedido a la agencia que nos consiguiera un buen guía para esta parte, mi marido es antropólogo y estaba interesado en obtener una buena información. Nos quedamos encantados con la persona elegida, un hombre mayor, balobedu, profesor local y miembro del Consejo Regente, fantástico. Estuvimos un par de horas oyendo sus explicaciones, visitando las zonas de los ritos de lluvia, los tambores rituales, la casa de la reina y la suya propia. Nos explicó la ubicación de las distintas viviendas según el clan, las pinturas simbólicas, etc.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
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Tras esta visita nos acercamos al bosque de cícadas, una planta bastante llamativa, el bosque está muy alto y el paisaje es espectacular, merece la pena un paseo entre esta vegetación tan poco corriente.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
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En el camino de vuelta paramos en uno de los baobabs más grandes que existen. Dentro hay un pequeñísimo bar que hoy en día sólo está de “museo”, para que se aprecie el diámetro del tronco. Es espectacular y muy bonito.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Llegamos a Tzaneen un poco tarde para comer así que nos tomamos unas raciones rápidas. Por la tarde nos fuimos a un pequeño zoo donde podías tocar distintos tipos de cachorros, lo más espectacular un montón de leoncitos pequeñísimos a los que pudimos coger y acariciar. También había cachorros de caracal, de chacal, de vervet, de coatí (aunque sea americano), etc..
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Cenamos estupendamente en un sitio de carnes a la brasa.

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