Occitania: 9 días recorriendo los pueblos más emblemáticos. ✏️ Blogs de Francia

Llegando al ecuador o poco más del viaje, consideramos hacer 2 noches en este destino, el día antes llegábamos tarde y después de hacer 2h 40’ de coche nos vendría bien coger el día de Saint-Cirque con más calma y hacer la excursión a pie que teníamos prevista


La visita a Saint-Cirque se puede acometer de cuatro maneras:
- En coche: dejándolo en cualquiera de los 5 aparcamientos repartidos por los alrededores. P1,2 y 3 en la parte baja. P4 en la alta.
- A pie desde Bouziès: Por el camino de Sirga o Chemin de halage, 4 km por el lado del río. Este paso fue abierto en 1845 por la mano del hombre con objeto de poder tirar desde la orilla con animales o personas las gabarras que navegaban por el. Es el que hicimos nosotros porque perdimos el barco y el fin de semana hay sólo uno de ida y otro de vuelta.
- En barco: con gabarra típica de estos ríos con poco calado. Ida y vuelta. Desde Bouziès a Saint-Cirque con varias de las modalidades que ofrece la empresa Les Croisières de Saint-Cirq-Lapoie. Las hay con viaje más turístico o sólamente el porte 1 hr.
- Mixto: barco y a pie (recomendado): Digo recomendado si se dispone de tiempo. Creo que es la mejor manera de disfrutar del paisaje desde el barco y también de una excursión a pie por la rivera del Lot para nada pesada pues son 4 km en llano y solamente los últimos (o primeros según se venga) 600 mt de fuerte pendiente pues hay que salvar los 100 mt de desnivel al que se encuentra el pueblo.

Voy a explicar el plan de excursión mixto.
Lo suyo es llegar al parking del embarcadero de Bouziès que si venís de Cahors tendréis que atravesar un puente tan estrecho que de lejos parece que sea hecho para bicicletas. Aquí dejad el coche 3 €/dia (si el coche lo dejáis en Saint-Cirq 6 €/dia), y embarcáis.
Contactar para reservar con la empresa de cruceros:Les Croisières de Saint-Cirq-Lapoie. Se puede y se recomienda reservar con antelación.
De todas las modalidades que véis en la página, el viaje que es únicamente llevaros hasta el embarcadero de Saint-Cirq es el llamado Croisière Rando 14 €/adulto sólo ida. Copio los horarios:

- Du 28 juin au 18 juillet tous les jours à 10H30 au départ de Bouziès et à 11H30 au départ de Saint-Cirq-Lapopie.
- Du 19 juillet au 22 août en semaine à 10H15, 13H30 et 16H30 au départ de Bouziès et à 11H15, 14H30 et 17H30 de Saint-Cirq-Lapopie. Le WE en haute saison, seuls les départs du matin (10H15 de Bouziès, 11H15 de Saint-Cirq-Lapopie) sont assurés.
- Du 23 août au 5 septembre tous les jours à 10H30 au départ de Bouziès et à 11H30 au départ de Saint-Cirq-Lapopie.

Fijaos que los horarios son distintos en fin de semana (WE) . El barco os dejará en la parte baja del pueblo por la parte Este.






Desde aquí subís dirección al pueblo entrando por la puerta de la Pelissaria o también llamada puerta de Rocamadour por la calle principal y la riada humana os llevará hasta la plaza del pueblo en la parte alta desde donde se accede, por unas escaleras estrechas, a las ruinas de la fortaleza lugar inmejorable para admirar las vistas del valle y del mismo pueblo.

A destacar Museo Rignault: antigua casa del siglo XV al borde del acantilado con un curioso jardín y que alberga una exposición de arte surrealista. La entrada es libre. También casas señoriales como el albergue de marineros, la iglesia del siglo XVI y el conjunto del pueblo en general.




Después de comer en el restaurante La Tonelle en la parte alta (ver apartado primero que le dedico al tema comidas), ver algunas tiendas y hacer algunas compras comenzamos la vuelta al coche. En la plaza principal por su lado oeste aparece indicado una senda GR36 que os llevará al camino de sirga que os comentaba antes. No os asustéis, sólo son 600 mt. de pendiente que llevan a un camino llano al lado del rio. Sólo tenéis que seguir aguas abajo durante 4 km. hasta el aparcamiento por un camino que luego se hace sendero bordeando el río. Las esclusas, rápidos, veréis un puente de hierro por la que circulaba el tren construido por Eiffel y las esculturas esculpidas en la roca por el artista de Tolousse Daniel Monnier entre 1985 y 1989.


A las 17:30 estábamos de vuelta y decidimos acabar el día en Cabrerets que está a 10’ en coche y nos habían dicho que era muy bonito. La verdad es que no nos pareció gran cosa, en realidad bastante soso. Nos hicimos una cerveza en la plaza principal para refrescar. En coche nos acercamos a las cuevas de los ingleses, construcciones excavadas en el hueco de la montaña al lado de la carretera, así que lo vimos sin bajar. Y poco más que me llamara la atención.

Lo que sí es importante de este pueblo es la cueva de Cuevas de Pech Merle, que tiene unas pinturas rupestres reconocidas mundialmente datadas de hace 29000 años, a parte de formaciones geológicas clásicas. Se puede llegar desde el pueblo a pie en 20’ por un camino de 1 km. con fuerte pendiente o en coche en 5’. Lo suyo era verlas por la mañana pues tienen el horario de 9:15 a 17 hrs. pero con tema Covid nos dijeron en la casa rural que no entraríamos sin reserva previa y además las visitas guiadas sólo se hacen en francés con lo cual descartamos la opción. Pero sigo pensando que si os encaja en vuestro itinerario sería muy interesante.

El día acabó con una cena en el único restaurante de St Géry sin nada particular.

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En un inicio estuvimos dudando en poner a Cahors en nuestro itinerario, pero nos venia de paso en nuestro viaje hacia el Sur y en los foros hablaban de su casco antiguo y el puente.
En 20' desde nuestra casa en Saint Gery siguiendo el curso del rio llegamos a Cahors. Fuimos directos al Parking Amphithéâtre justo en pleno centro de la ciudad (7’5 € por 4’5 hrs. aprox), y debe este nombre a que ahí se pueden observar ruinas romanas, pues fue en el siglo I ciudad romana. Dio la casualidad que había una exposición de coches de época, muy simpática con vehículos impecables la mayoría de la década de 1960/70

Imágenes de dos de Les jardins secrets, a la izquierda detrás de la catedral en lo que fue el claustro. A la izquierda L'hortus des dames o de los Benedictinos situado en el barrio de la Daurade.

Después de recibir información en la oficina de Turismo, fuimos directos a la catedral de Saint-Etienne. En la plaza hay mercado Miércoles y Sábado de interés turístico, era domingo o sea que no puedo dar opinión. Seguimos por las calles del lado opuesto a la entrada y recorrimos su parte Este donde se concentra la parte antigua de la ciudad con sus casonas medievales. Al mismo tiempo que descubríamos Les jardins secrets, pequeños jardines o huertos iniciativa de jardineros de Cahors en la que también hay cabida para exponer arte.
Cahors es también ciudad del Camino de Santiago, de hecho en una sus plazas nos encontramos a la asociación de amigos del camino que habian montado una pequeña exposición y con los que hablamos un rato cambiando impresiones de su viaje, porque no hay gente con más pasión por el Camino que los franceses.

Pont Valentre s. XV monumento emblemático de Cahors y el más visitado de la ciudad.

A destacar en Cahors el puente medieval sobre el rio Lot fortificado a consecuencia de la guerra de los 100 años, tiene un aspecto imponente.

Como habíamos comido de bocadillo en uno de los parques públicos del centro, después de la visita al puente fuimos a por el coche y pusimos rumbo a nuestro próximo destino: Toulouse.
A 1h 20’ por autopista llegamos al hotel que teníamos previsto: Ibis de la Gare Matabiau. A 15’ a pie del centro, era buen lugar para moverse. Aparcamos en el parking de la estación de tren y allí se quedó el coche el día y medio.
La tarde sólo daba para ver las calles comerciales que recorrimos hasta llegar a la plaza del capitolio pero como era domingo estaba todo cerrado.

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Siempre que podemos comenzamos la visita a una nueva ciudad con una free tour. En este caso contactamos con Civitatis vía web el día de antes pues no había podido hacerlo antes por estar cancelados todas las visitas a causa del Covid y de casualidad se habían reanudado el tour esa semana después de más de una año.
A las 11 hr. nos reunimos en la plaza del capitolio donde comenzaba la visita. Nuestra guía fue una estudiante peruana que hizo una explicación estupenda muy amena y completa en las 2 hr. que duró. Al final del trayecto hasta no repartió una hoja con lo que todo el mundo quiere saber "Dónde comer" "Qué ver" y que os he copiado en el apartado primero dedicado a este tema.



Mientras esperábamos al free tour aprovechamos para entrar en el Hôtel de Ville o
ayuntamiento. Es gratuita, pasas el control y llegas a un gran patio con dependencias oficiales y en el ala este por unas escaleras subes a la primera planta donde se visita distintas salas con grandes pinturas de artistas tolosanos, incluido la sala que utilizan para los casamientos civiles y el salón de plenos.




El tour comenzó con la historia de Toulouse y de la occitania en general, desde los romanos hasta nuestros días, con especial mención a los cátaros pues este movimiento/herejía de la edad media tuvo un gran impacto en esta comarca y marcó muy fuerte la historia de la ciudad. Continuamos a la Basílica de San Sernin donde nos dieron 15’ para visitarla por dentro (lo cual es de agradecer ya que estábamos allí), pero la verdad es que se merecía dedicarle más tiempo, no sólo por su magnitud si no por la colección que reliquias tan grande que alberga en sus catacumbas. Seguimos callejeando, pasando por puntos muy interesantes como la sede la UGT que se instaló en el exilio durante y después de la guerra civil. Pasando por el convento de los Jacobinos, sin entrar, hasta el rio Garona por el baluarte antes puerto y ahora pequeño jardín con kiosco al lado de la Basílica de la Dorada muy venerada en la ciudad. Callejeando hasta el Palacio Assézat convertido en hotel, mandado construir en el s.XVI por Pierre Assézat rico industril textil. El tour continuó desde aquí hasta llegar al Convento de los Agustinos, en esas fechas cerrado por reformas, donde acabó cuando eran las 13 hrs.



Para comer nos decidimos por el restaurante Les Americains, en su carta ponía especialidad de mejillones, pero nosotros decidimos comer por fin la Cassoulet porque ya era hora y no nos había apetecido por el calor. La verdad es que no me pareció gran cosa, creo que no era el sitio adecuado.

La tarde la pasamos deambulando por el centro comercial, aprovechamos para comprar unos vinos, los recuerdos, esas compras para llevar a los familiares que te lleva tanto tiempo y dolor de cabeza. Hasta que se hizo la hora cenar, las 20 hrs. o antes, y fuimos a parar a la crepería Le Sherpa ,francamente recomendable y que os cito en la parte 1 del diario que dedico a los restaurantes.


Después llegamos hasta el río pasando por el distrito universitario donde había una gran animación pues es el punto de encuentro de toda la juventud tolosana. Un bonito paseo con la puesta de sol como telón de fondo y los barcos turísticos de arriba a abajo. Era también una opción la de coger uno de esos barcos que te dan una vuelta mientras cenas o bien una excursión que te lleva por el canal de Brienne; son opciones que nos sugirieron en la oficina de Turismo, pero los horarios no nos cuadraban y descartamos esas opciones. Una copa en Le port de la Daurade y para el hotel.

No podíamos irnos de Toulouse sin ver el convento de los Jacobinos. Como los lunes cierran lo veríamos el martes antes de macharnos.

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