ISLANDIA INSPIRA ✏️ Blogs de Islandia

Amaneció con un sol precioso, así que decidimos volver a Gullfoss para verla en todo su esplendor. Mereció la pena nuestra decisión, estaba preciosa, con un pequeño arco iris y todo. Gracias “Lorenzo”!!!


Hoy tocaba un día duro, atravesar la isla por el medio de los glaciares Langjökull y Holfsjökull, por la carretera 35, un día movidito!

Según pasaba el tiempo, el paisaje se hacia cada vez mas desértico, no se veía ni un alma en kilómetros a la redonda. Solamente un camino pedregoso, los dos glaciares a cada lado y nosotros con los ojos como platos mirando por la ventana.


El plan era visitar la zona geotermal de Hveravellir pero decidimos cambiar de planes y visitar Kerlingarlfjöll, una montaña con glaciar los 12 meses del año alrededor de una zona geotermal. La carretera para llegar es la F347 y esta zona es accesible solo en verano, donde los días despejados son escasos, y los días sin viento se cuentan con la mano. Por suerte, era uno de esos días. Tras comernos los sándwiches, tiramos para arriba del monte, el camino era para 4x4, menuda cuestecita que subimos con el coche.

El lugar es impresionante, montañas con una paleta de colores dignos del mejor pintor, fumarolas, pozas calientes y el glaciar a escasos metros. Uno le los lugares mas bonitos que he estado sin duda! Estuvimos unas 3-4 horas por la zona, arriba y abajo visitando las diferentes zonas.


Nos tomamos un baño en una poza natural bien caliente, una experiencia única! Eso si, nos llevamos un poco de barro con nosotros al salir, nada que no se pudiera solucionar con una ducha y un buen lavado de la toalla!

Tras un largo día, llegamos a la zona norte de la isla ¡por fin algo de asfalto! El paisaje había cambiado por completo, otra vez había cogido un tono verde, con innumerables ríos y el mar al fondo.


Esa noche dormiríamos en una casita de madera en Leifshus, rodeada de vacas y caballos, que se situaba en el fiordo Skagafjordur, entre las carreteras 75 y 76, en medio de una isla fluvial.

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Amaneció lluvioso, el cielo estaba de un gris plomizo. A pesar de todo, nos dimos una vuelta a lo largo de playa de Saudarkrokur, en la zona norte de la 75. Era la primera vez que tocábamos el mar, estaba helada!!!

Visitamos unas casas de turba en Glaumber, llegando por la 75. Nos gusto mucho conocer como vivían en aquella época, la estructuración de la familia dentro del hogar, fue muy curiosa. Al lado hay un bar-restaurante en otra casa bastante antigua y una pequeña iglesia muy bonita.


Hacia el mediodía, llegamos a Akureyri, por la ring road o carretera 1, la ciudad principal de la zona norte de la isla. Tras informarnos un poco de la ciudad en el centro de visitantes nos dirigimos hacia el jardín botánico, un orgullo para los ciudadanos de Akureyri. www.lustigardur.akureyri.is La entrada es gratuita y nos sorprendió gratamente lo bien cuidado y diverso que era, hay flores y plantas de todo el mundo. Es bonito para dar un pequeño paseo.


La calle principal se llama Hafnarstraeti, paralela al mar y en buena parte peatonal. En ella encontramos muchas tiendas, bares y restaurantes. Subimos y bajamos la calle, no sin antes pararnos en el nº11 de esta misma la calle, la cual es la casa mas antigua del lugar.

Era la hora de comer y escogimos el Bautinn, situado en el extremo sur de esta calle. Buena calidad precio, nos tomamos tres menús para seis personas. Cada menú incluya un plato a escoger y dos sopas y buffet de ensalada, acabamos llenos hasta arriba!

Por la tarde y hacia el este de la 1, fuimos a visitar las cascadas de Godafoss, la “catarata de los dioses”. El color del agua es blanco lechoso por ser del deshielo del glaciar y con el negro de las columnas de basalto es un paisaje espectacular. Es impresionante el caudal y la fuerza que lleva el río. Visitamos primero la oeste y después la este de ancho.


Para acabar el día, llegamos al lago Myvatn por la ring road. Realizamos una pequeña excursión por Skutustadir, ruta 27 de la guia Rother, alrededor de unos falsos cráteres o pseudocráteres creados por la expulsión de gas subterráneo. El paseo es precioso, los cráteres están cubiertos por un verde manto, rodeando el lago Staholstjörn y el Myvatn, y con aves acuáticas.

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Como habían anunciado que el día de hoy no sería muy bueno, cambiamos los planes y decidimos visitar el P.N. de Jökulsargljufur el cual significa “cañón del río glaciar” y dejar para el próximo día la visita a los volcanes, ya que habría niebla en su cima.

Primero fuimos hacia las cascadas de Dettifoss y Selfoss, por la carretera de tierra F862. Del parquing, donde hay baños, sale un sendero balizado hacia las cascadas, se tarda unos 15 minutos en llegar al río. Primero visitamos la cascada de Selfoss, la más pequeña de las dos. Las columnas basálticas de color gris oscuro, junto a las innumerables caídas de agua que forman el conjunto de la cascada es impresionante. Como había estado lloviendo los días anteriores, el camino estaba bastante empapado y tuvimos que pasar un riachuelo para poder acercarnos hasta la misma cascada. Después, por un sendero que iba paralelo al río, nos acercamos a Dettifoss, la cascada más caudalosa de Europa. Tiene 44 metros de altura y 100 de ancho.


También visitamos un poco mas adelante la cascada de Hafragilfoss con el precioso cañón Jokulsa.

Después, por la misma carretera, visitamos la zona de Hljodaklettar, es decir, “las rocas del eco”, donde encontramos enormes columnas y estructuras caprichosas de basalto. La zona la rodea el río Jökulsa, por la cual transcurre el sendero, ruta 23 del Rother. Hay un camino circular que se hace en un par de horas y las formaciones que se ven a lo largo de el son muy bonitas. Decidimos comer en una cueva que se sitúa a mitad del camino circular y así guarecernos del viento. La cueva es preciosa, llena de columnas basálticas poligonales.


Tras la comida, alargamos la excursión a unas 3 horas más, para visitar Raudholar, la “colina roja”. Al principio, el tiempo no nos acompaño mucho, pues empezó a caer una lluvia fina, pero a los 20 minutos paro y no volvió a llover hasta llegar al parquing. El desnivel es de unos 150 metros, por un camino muy bien balizado hasta la cumbre. La llegada es espectacular, el color rojo de la montaña es impresionantemente vivo o si no juzgar vosotros mismos la foto inferior. ¡Al estar mojado el terreno, los colores se hacen aun mas vivos!


Por ultimo, y por la carretera 85, vimos Asbyrgi o la herradura del caballo de Odin, con la formación rocosa de Eyjan en el medio y un bosque de abedules importante. Dice la leyenda, que la forma de U del valle, lo creo la pisada del caballo de Odin. Odin es el dios de la sabiduría, la guerra y la muerte. Como dios de la guerra, se encargaba de enviar a sus hijas, las valquirias, a recoger a los guerreros heroicos muertos en batalla,los einherjer, que se sientan a su lado en el Valhalla donde preside los banquetes. En el final de los tiempos Odín guiará a los dioses y a los hombres contra las fuerzas del caos en la batalla del fin del mundo.
Hay un par de miradores, uno al lado del lago y otro un poco mas arriba donde puedes imaginar la forma de U del valle. En la época del deshielo, se crea una cascada que cae al mencionado lago, aunque nosotros no lo vimos.


Antes de regresar al albergue, llegando por la misma 85, dimos una pequeña vuelta por Husavik. Pequeña localidad del norte de Myvatn, a las orillas de la bahía de Skjálfandi, donde destaca su iglesia del siglo XIX.

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