Prego, 3 semanas recorriendo parte de Italia (en construccion) ✏️ Blogs de Italia

El precio por cada viaje en vaporeto es de 7 euros, aunque ofrecen una tarjeta especial que te cubre viajes por 1, 3 o 7 días la verdad es que solo son útiles si planeas usar mucho este transporte. En lo personal hicimos cuentas y vimos que no nos sería útil, pues solo utilizariamos el vaporeo en dos ocasiones: al llegar a Venecia y al salir de la ciudad.

Andar en Venecia es fácil, en cada esquina hay señalización y te indican hacia donde vas o hacia donde quieres ir. Desde Plaza San Marcos te haces unos 15 o 20 minutos caminando hasta la estación de tren y en unas dos horas puedes moverte tranquilamente de un extremo a otro de la ciudad.

Es muy común que si vas te topes un día con el fenómeno de la marea alta, que según la intensidad puede inundar desde San Marcos hasta casi toda la ciudad, pero no teman que los venecianos siempre están preparados y acostumbrados a ello. En cuanto previenen que se acerca el "aqua alta" comienzan a tender una red de entablados para que la gente circule por ellos sin mojarse.

Si eres un poco mas atrevido puedes comprar unas botas desechables (y que muchas veces inútiles pues se rompen en seguida y se llenan tus zapatos de agua) por 10 euros con los vendedores ambulantes que abundan, para asi andar en medio de P. San Marcos sin preocuparte por el agua.

En Venecia tomamos una mañana el tren que nos llevaría a Verona, donde pasaríamos todo el día. Los trenes hacia esa ciudad salen cada hora y generalmente hacen parada en Padua, Vicenza y un par de ciudades un poco mas pequeñas.

Llegar al centro de Verona desde la estación de tren es muy sencillo, a pie solo necesitas cruzar el estacionamiento y dirigirte a la derecha para encontrar Croso Porta Nuova, una calle que te llevará directo al centro histórico. La otra opción es tomar en el estacionamiento un bus de las muchas rutas que pasan por ahí. Al subir depositas en la maquina 1.5 euros y listo, cuando veas el foro de Verona te bajas y a caminar para conocer la ciudad.

Algo que me saltó a la vista es que la gente de esa ciudad no viste de color, parece que en su guardarropa solo existen el negro y gris, ¡vamos! ya se que es otoño pero no hay que exagerar, así que mi hermana con su blusa amarilla y sueter azul y yo con camisa naranja y chaqueta cafe desentonábamos con la ciudad (y ni hablar de que todos nos veían raro). La ciudad es pequeña y en un solo día puedes recorrerla fácilmente.

La casa de Julieta es de lo que mas turistas atrae y tomarse la foto con la estatua de ella agarrándole una teta es un clásico (tan clásico como la foto deteniendo la torre de Pisa). Puedes comprar un ticket combinado para visitar su casa y su tumba, que está a unos 15 minutos caminando.

El foro de Verona es un coliseo pero bien conservado y todavía funcionando, vale la pena visitarlo, dense tiempo para caminar por via Giuseppe Mazzini y tomarse un cafe en alguno de los lugares que están a lo largo de esa calle peatonal.

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Florencia me ha encantado por mucho, aun mas, que Venecia. Habíamos hecho reserva en el hotel Benvenute, que aunque en el mapa se veía aun dentro de centro histórico de la ciudad la verdad es que estaba bastante alejado caminando de la estación de tren. El día en que llegamos aprendí que no vuelvo a viajar sin una maleta de "rueditas". El hotel muy cómodo y excelente precio (Después del de Venecia fue el de mejor precio que encontramos). La atención por parte de todos fue excelente, incluye desayuno, el cual no pudimos probar porque para evitar filas en los museos preferíamos salir muy temprano del hotel y desayunar después de visitar el museo que nos tocara según el día.

No describiré mucho la ciudad porque sé que ya hay muchos diarios respecto a ella y se ha hablado ampliamente en los foros de la región pero si daré algunas recomendaciones que a mi por lo menos me funcionaron.

Para desayunar encontramos un lugar frente al vellocino de oro (famoso por meterle la mano en la boca para asegurar tu regreso), frecuentado por los locales. Chocolate caliente y un croissant, una galleta o panecillo de postre por menos de 4 euros.

Para comer y cenar encontramos un lugar sobre vía Cavour llamado La Campana, su especialidad un corte fiorentino delicioso. En el hotel donde nos hospedamos reservamos un par de excursiones. La primera fue para visitar San Giminiamo, Siena, Monteriggioni y al final una visita a la granja Casanova por una degustación de vinos, aceites y quesos. Vale la pena. Precios muy accesibles y Alessandro, el guía, sumamente divertido y atento. La operadora fue MyTour y se las recomiendo ampliamente

En florencia solo una atracción nos ha decepcionado, y quiero creer que fue por la época en la que fuimos, Los Jardines de Boboli. Vaya que ni una flor hemos visto en toda la tarde que ahi pasamos.

No es necesario reservar para ver Il Davide o algún museo de su interés, si es que como nosotros son capaces de estar formados a las 8:30 para ser los primeros en entrar y aprovechar el día, el cual nos duraba poco pues fuimos en noviembre y a las 5 de la tarde todo estaba ya oscuro.

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