Riviera Maya Junio 2013: una buenísima experiencia ✏️ Blogs de Mexico

7Am así que a levantarse!!! Este madrugón no estaba justificado por excursiones, pero si queríamos cenar en Punta Emilia estaba claro que había que ir pronto a reservar. A las 7.20 estaba en el lobby del Riviera y ya había 2 personas antes que yo. Cuando me tocó, reservé cena para las 21.30 (para las 21 ya no había, tremendo)...el consejo aquí está claro: hay que madrugar para reservar, no queda otra.

Éste fue el único día que estuvimos completo en el hotel. No habíamos parado desde que llegamos y necesitábamos descanso.

Aprovecho esta etapa para comentar lo que nos ha parecido el hotel. Nunca habíamos ido a un todo incluido (ya comenté al principio que no nos va de primeras) así que no tenemos referencias para comparar, pero en nuestra opinión:

- En general, ofrece lo que promete y en ese sentido no defrauda. El sitio en sí es espectacular. Su ubicación para excursiones (a medio camino entre Playa y Tulum) es buena, así como que la federal quede a un paso para coger los colectivos. La comida nos pareció buena...habrá quien diga que es repetitiva, pero todos los días había algo distinto (aunque es verdad que el 'grueso' de la oferta del buffet es la misma). No nos pusimos hasta arriba de bebida pero lo que tomamos nos gustó (oímos quien decía que el alcohol no era muy allá....supongo que si te lías de cócteles el cuerpo lo nota de todos modos). Ah! nos respetaron la petición de villa (habíamos pedido la 6 o 7 y nos dieron la 7).

- Algunos detalles por otra parte no nos gustaron: las dos camas de 135cm nos dejaron fríos el primer día (luego oímos que no fuimos a los únicos). El personal, pues hay de todo, normal al haber tanta gente. Nos chocó que lo poco que hablamos con las relaciones públicas no eran precisamente las personas más simpáticas del complejo. En los buffet de comer y cenar tenían poca agilidad para reponer las bebidas, pero nada que no se arreglara levantando la mano. En cuanto a los temáticos, la reserva de mesa se hace según orden de llegada y basada en disponibilidad. Antes de ir, habíamos leído que el tiempo de espera normal era de unos 15 minutos. Nosotros todo lo que vimos no bajaba de 1 hora y lo normal eran 2 horas. Seguro que depende mucho del nivel de ocupación del complejo pero en cualquier caso creo que el sistema no es muy práctico. ¿La solución? Ni idea, la verdad...en un complejo tan grande las esperas deben ser normales, pero no deberían ser tan largas. Claro, si limitaran los temáticos a 3 por estancia seguramente habría más quejas, así que como digo no sé qué alternativas pueden tomar pero para nosotros el sistema actual no nos pareció el mejor.

En fin, dicho todo esto, la conclusión de todos modos es que nos ha gustado mucho el hotel. No hay sitio perfecto y desde luego son más las cosas positivas que las negativas que hemos podido percibir.

Total, que este día anduvimos de playa a piscina (consejo si quieres tranquilidad: la de adultos cerca del colonial...la otra de adultos está cerca del lago y a veces ese agua no huele del todo bien). Y otro consejo: si la ubicación de vuestra villa os lo permite, la zona del Riviera es mucho más tranquila que la del Colonial tanto para desayunar como para comer/cenar (desayunamos un día en el Colonial y vaya jaleo había).

Cenamos en el buffet del Riviera, después dimos un paseo por allí y a descansar. Al día siguiente volvíamos a ver las tortugas a Akumal!

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7:30Am...hoy no madrugamos!!! jajajaajaja . Fuimos a desayunar al Riviera y tras coger los abalorios de snorkel, nos fuimos a buscar un colectivo dirección Tulúm. Consejo: hay un túnel que cruza la federal para que no haya que jugarse el pellejo cruzando por arriba. Sale en frente del lobbby del Kantenah y va a dar a unas viviendas que da la impresión de que son donde viven los trabajadores del complejo.

Cogimos la van y en menos de 10 minutos estábamos en Akumal (20 pesos cada uno nada más). Volvimos a coger chalecos y taquilla y al aguaaaaaa!!!

El mar estaba algo más movido que cuando estuvimos la primera vez, pero aún así vimos varias tortugas, peces....Qué sitio. Volvería ahora mismo .

Me queda de todos modos la sensación de que los turistas estorbamos demasiado a las tortugas. Es mucha gente la que va a verlas y no todo el mundo respeta unas mínimas normas. Yo misma tuve que echar la bronca a un par de chavales que estaban tratando de tocar una tortuga con las aletas. Si hubiera estado más cerca la piragua de los vigilantes...en fin.

Total, que estuvimos por allí toda la mañana y nos dimos dos baños larguíííiísimos haciendo snorkel. A las 13.30 nos fuimos para el hotel a comer.

La tarde la echamos en la piscina de adultos del Colonial. Qué tranquilidad.

La cena la teníamos reservada del día anterior en el Punta Emilia. Teníamos las expectativas muy altas con el sitio y, bueno, no se cumplieron del todo. Está en la playa, pero unas cortinas impiden que veas el mar, así que lo oyes pero no lo ves...una lástima. La comida correcta sin más. Pero vamos, bien. El tema está en que con las opiniones que hay nos habíamos montado una película demasiado grande.

Cuando estábamos cenando oímos que había música hacia la piscina de las rocas y resultó ser la White Party! . Así que fuimos para allá justo cuando empezaba el show con fuego. Está chulo, merece la pena (y caímos ahí casi por casualidad!).

Luego dimos un paseo por la playa y a dormir. Al día siguiente era nuestro último día allí

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7.30 y arriba! Había que aprovechar lo que se pudiera. Nuestro vuelo salía a las 20.30 y nos venían a buscar a las 15.30, así que teníamos toda la mañana.

Desayunamos en el Riviera y al ir a la habitación a por los bañadores empezó una buena tormenta. Duró cosa de una hora, tal vez algo más, y cayó agua como si la tiraran con cubos. Pero como el caribe es así, cuando se acabó el agua salió algo de sol y se estaba de lujo.

Llamamos a los botones para recoger las maletas (tardaron algo más de 30 minutos...si os dicen entre 10-15 no os lo creáis ) e hicimos el check out. Eran sobre las 11, así que indicamos que luego nos querríamos duchar y necesitaríamos también toallas para la playa/piscina. Lo que hacen es no entregarte el documento de salida hasta que tú devuelves las toallas.

Dejamos las mochilas de mano en la consigna y fuimos hacia la playa para darnos el último baño. De ahí, a la piscina a despedirnos .

Antes de comer fuimos al lobby de nuevo para cambiar las toallas de playa por las de baño, nos dimos una ducha al lado de la sala de consigna y al devolver todo ya nos dieron nuestro documento de salida.

Comimos y ya a esperar el bus. La organización para montar en él fue....un desastre, no hubo organización. Quien más corriera cogía el primer bus. Creo que los de Pullmantur deberían pensar algún sistema para el 'embarque' en el bus.

Poco más. De ahí a Cancún con medio autobús dormido, compramos algo en el aeropuerto para beber y merendar (más caro que Barajas...2.40 eur al cambio una botella de agua) y al avión, que salió más o menos puntual (embarcamos bien pero luego estuvimos más de 30 minutos dentro hasta que despegó). El viaje se pasó rápido porque nos dormimos bastante rato, así que a las 13.30 estábamos en España, no sé si tristes porque se había acabado ya o contentos por haber disfrutado tanto.

En resumen: un gran viaje en el que vimos un montón de cosas, hicimos mucho snorkel, la decisión del coche fue acertadísima y en el que también disfrutamos del hotel el tiempo que estuvimos descansando.

Como nos quedaron cosas por ver (ayyyy Ek Balam!!) habrá que repetir!!!

Hasta aquí este diario. Espero que sea de utilidad y disfrutéis leyéndolo tanto como yo escribiéndolo.

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