El día amaneció despejado y decidimos poner rumbo al Este. Nos detenemos en Ponta do Cintrao, en un mirador en el que se observa la silueta ondulante de la costa, tapizada de verdes campos cercados con piedras, y las olas golpeando incesantes los acantilados.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Un poco más adelante paramos en el mirador de Santa Iria, perfectamente acondicionado, con mesas y bancos, muy limpio todo y desde donde las vistas de la costa, nuevamente son fabulosas.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Entramos en la localidad de Porto Formoso, que tiene un curioso puerto pesquero que cae de manera abrupta sobre el acantilado, quedando en lo alto la fachada de la iglesia y algunas casas. Bajamos cerca del agua, con la esperanza de ver algún pescador y entablar conversación, pero sólo encontramos algunos patos.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Salimos en coche y preguntamos a un hombre en la carretera que muy amablemente nos indicó la ubicación de la fábrica de chá, como llaman los portugueses al té, próxima a las plantaciones. Aparcamos en la entrada, donde vemos una curiosa tetera que cuelga de la pared.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El sitio parece desierto y decidimos pasar a conocerlo. En un panel explican que el recinto incluye la fábrica de té, espacio museológico, jardines panorámicos, tienda y sala de chá. La entrada es gratuita e incluye una degustación del producto.
Pronto nos recibe una mujer que nos hace la visita guiada explicando los distintos tipos de té que se producen, el uso y origen de las máquinas en que se procesa y luego nos sirve una taza humeante de chá de las Azores que nos reconforta un montón. Nos sentamos en un salón muy agradable, con las paredes de piedra y chimenea; allí mismo despachan los paquetes y hacemos acopio de unos cuantos para familia y amigos. No somos mucho de té pero nos resultó muy agradable el sabor.[
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Salimos a una especie de terraza desde donde se observan las plantaciones con el pueblo de Porto Formoso al fondo bañado por el vasto océano. Son las únicas plantaciones de té de Europa para fines industriales. El clima templado y el rico suelo volcánico de la isla es ideal para el cultivo de plantas tropicales y la exuberante vegetación que crece en ella.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Se cree que las primeras semillas de la planta de té fueron traídas desde Brasil a las Azores en la segunda mitad del s. XVIII. Durante mucho tiempo se usó sólo como planta ornamental pero, a mediados del s.XIX y por iniciativa de la Sociedad promotora de la agricultura de Sao Miguel, vinieron a la isla dos chinos para enseñar la transformación industrial del té y llegaron a existir hasta 6 fábricas además de los pequeños productores.
La recogida se hace a mano entre abril y septiembre, coincidiendo con la época de menos lluvia y los tipos que aquí se producen son: orange pekoe,pekoe y broken leaf, este último es el más suave de todos.
Esta fábrica de Porto Formoso funcionó dese los años veinte hasta 1980 y desde hace una década se iniciaron labores de recuperación. Se pueden consultar los horarios en la web porque cambian de la época estival al invierno. También están las plantaciones y fábrica de Gorreana pero nosotros no la visitamos.
Nos detenemos en el mirador do salto da Farinha, desde donde se observa una cascada que cae a 40 metros de altitud, en un espacio rodeado de hortensias que todavía conservan la flor a pesar de estar en diciembre.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Continuamos hasta otra zona de merenderos denominada Ribeira dos Caldeiroes, con los característicos tejadillos rojos y mucho musgo por todas partes.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Entramos en Nordeste, localidad famosa por sus preciosas puestas de sol y bonitos amaneceres. Llegamos a la plaza de la República, vemos la fachada del ayuntamiento y el resto de construcciones donde predomina la piedra negra con el encalado blanco.
La iglesia de Sao Jorge se presenta también de color blanco con adornos barrocos de basalto. Hicimos un alto en el camino para comer y continuamos con el recorrido.
A la salida del pueblo de Nordeste se encuentra Ponta do Arnel, uno de los salientes más especiales de toda la isla y que acoge el faro más antiguo del archipiélago.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Una sinuosa carretera nos conduce hasta el faro y un pequeño puerto pesquero en el que se agolpan las barcas blancas pintadas con franjas de colores.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Desde lo alto cae una cascada hacia el mar, algunas casas encaramadas a las rocas y un ambiente muy tranquilo. La pendiente es muy acusada así que decidimos dejar el coche en la parte alta de la carretera aunque algún valiente sí bajó en su vehículo teniendo serios problemas a la hora de subir.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El cuerpo se inclinaba de manera natural hacia delante y había que poner el freno en las zapatillas. Observamos el faro desde el exterior y bajamos al embarcadero de piedra, un rincón que hicimos nuestro por un buen rato, saltando, haciendo fotos, mirando cómo las olas chocaban con las rocas, y disfrutando de un atardecer precioso en ese pequeño paraíso.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Con la caída del sol dimos por terminada la jornada y nos pusimos en marcha para subir todo lo que habíamos bajado antes, la interminable cuesta con curvas imposibles.
Iniciamos el día poniendo rumbo al centro de la isla para visitar Lagoa do Fogo. Este místico lago está rodeado de montañas y el agua ocupa el suelo del cráter de un extinto volcán.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Hay una pequeña península con arena formando playa y algunos caminos que permiten bajar a la orilla. Cuando llegamos, la niebla lo cubría por completo, pero pronto fue clareando el ambiente y pudimos contemplar su curiosa silueta. Lo bordeamos andando y permanecimos en silencio y casi solos en este lugar con una magia especial, un sitio capaz de transmitir una paz increíble.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Accedimos por la carretera atravesando la Serra de Agua de Pau. Desde aquí la vista es fantástica, el verde intenso de los prados, el color del océano y las casas diminutas, parece de postal.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Nos detenemos en el mirador Ponta da Galera desde donde se ve el pueblo de Caloura, se aprecia alguna piscina, y las casitas al lado de la recortada y escarpada costa.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Nos dirigimos a la localidad de Vilafranca do Campo, un hermoso y tranquilo pueblo que fue la primera capital de la isla. Vemos la fachada del ayuntamiento en una de las plazas, callejeamos sin encontrarnos apenas con gente y nos dirigimos hacia el paseo marítimo.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En el puerto preguntamos a unos pescadores si se puede ir a Ilheu y nos contestan que sólo en verano. Así que nos conformamos con ver desde la orilla el islote en frente de Vila Franca, ubicado a un kilometro de la costa. Se trata del cráter de un extinto volcán, clasificado como reserva natural y que presenta una forma curiosa visto desde el aire.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Entramos al obrador de queijadas Do Morgado, donde elaboran una estupenda receta de este postre típico desde 1961., en la Rua do Penedo nº 20 de Vila Franca do Campo. Según cuenta la historia las hacían las monjas del convento de San André a partir de 1533. La receta es sencilla, a base de huevos, leche, azúcar, manteca y harina de trigo tipo “55” y el resultado es delicioso, tanto, que compramos una docena para llevar a casa pero nos la zampamos antes de abandonar la isla y hubo que aprovisionar otra en el aeropuerto.
Otro de los atractivos del pueblo es la ermita de Nuestra señora de la Paz, erigido el templo actual en el s. XVIII en ese lugar por haber encontrado un pastor, de forma milagrosa, una imagen de la virgen.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El templo se sitúa en un enclave privilegiado desde donde se obtienen vistas al pueblo y zonas limítrofes con el islote al fondo. A nivel arquitectónico llama la atención su escalinata en forma de zig-zag. Ascendimos por una carretera ganando altura y aparcamos en una explanada a los pies de la escalera. Subimos cada uno por un lado y nos encontramos arriba, girándonos de vez en cuando para observar las vistas. [
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Una cruz de piedra enorme se yergue en mitad de una plaza, pasamos al interior de la capilla y, desde las puertas abiertas de par en par, contemplamos el islote en mitad del agua.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
De camino a Ponta delgada paramos a comer en Lagoa, en el restaurante paladares da Quinta un establecimiento del que habíamos consultado la web desde casa y disfrutamos de un almuerzo muy rico. Tiene un bonito jardín rodeando el local y aquí probamos la morcela con ananás o morcilla con piña, uno de los platos típicos de la isla.
Luego paramos en una terraza frente al mar, para tomar un café que, en estas latitudes, sabía a gloria.
Ya en Ponta Delgada, aparcamos el coche frente al Museo de las Azores, creado por el Dr. Carlos Machado en las instalaciones del Liceo Nacional de Ponta Delgada. En su interior se pueden encontrar colecciones de Zoología, Botánica, geología y mineralogía. También hay muestras etnográficas, de historia natural y exponen pinturas los artistas locales.
Como curiosidad, vemos una furgoneta aparcada en la puerta, se trata del Museo móvil, un proyecto itinerante que vio la luz en 2008 para acercar las colecciones a las zonas más alejadas de la isla como una forma de inclusión y un buen servicio de extensión cultural.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Muy cerca se encuentra el jardín de Antonio Borges, con una muestra de exóticas plantas traídas de Nueva Zelanda y Australia fundamentalmente. Este parque pertenece al concello de Ponta Delgada y su entrada es gratuita. Nos sorprendemos con un Ficus cuyas raíces sobresalen de la tierra y proporcionan un perfecto escondite a los niños que juegan en los alrededores.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Lo recorremos entero, se trata de un entorno muy agradable, con algún estanque y construcciones de piedra volcánica por las que se puede subir y entrar en pequeñas cuevas. Cerca de este parque se encuentra el Jardim botánico José do Canto, con más extensión y donde cobran entrada. Decidimos no visitarlo.
Dedicamos esta jornada a conocer en primer lugar el pueblo de Furnas. Desde el mirador y con bastante niebla, observamos parte del lago en el que se aprecian las fumarolas. Justo al lado un extenso tapiz verde aparece poco a poco entre la bruma.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Bajamos a conocer tan peculiar destino y aparcamos justo al lado de la oficina de turismo y nos la encontramos cerrada por ser día festivo. Muy cerca está el restaurante O Miroma, uno de los que ofrecen el famoso cocido das furnas entre sus platos. Entramos a reservar y nos comentan que sobre las 14:00h podemos bajar a comer.
Callejeamos por el pueblo, casi desierto a estas horas, tan sólo vemos a un pequeño perro moviendo continuamente la cola y que se acerca a nosotros acompañándonos durante el recorrido. Pasamos cerca de una panadería y entramos a comprar bolos do lévedo, un pan dulce típico de la isla. Lo probamos y resultó delicioso, el perro nos miraba con ojillos expectantes y le dimos un trozo, a nuestro amigo también le gustó.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Continuamos el paseo por cuidados parques donde vemos una noria, fuentes con los típicos azulejos portugueses en motivos azules y blancos, y un riachuelo que seguimos en compañía de nuestro anfitrión perruno en Furnas.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Justo al lado del canal podemos ver el agua sulfurosa que brota del suelo o en pequeñas fuentes con fuerte contraste entre el color claro del arroyo y color ocre que sale del suelo.
En el ambiente se percibe un olor peculiar sin llegar a ser molesto. Desembocamos en una especie de balneario y en un espacio donde el agua brota del suelo en ebullición provocada por la actividad volcánica del subsuelo.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En corros circulares las burbujas saltan en mitad de las fumarolas, aportando un aspecto casi fantasmagórico al entorno. Paseamos por el lugar y vemos algún presepio o nacimiento, dispuesto con cuidado entre las piedras del suelo.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Regresamos al pueblo acompañados como no, del perro que no nos perdía la pista. En la entrada del Parque de Terra Nostra nos despedimos del animal, que se quedó tirado en el suelo donde lo encontramos antes.
Sacamos la entrada al parque, a cinco euros por cabeza, y pasamos a conocerlo.
Nos sorprende la cantidad de flores que vemos a nuestro alrededor, algunas orquídeas agrupadas en racimos, helechos arbóreos con hojas enormes, palmeras y camelias de distintos colores.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
La humedad se percibe en el ambiente, favoreciendo la presencia de hongos y setas de distintas formas y tonalidades. Descubrimos curiosas figuras esculpidas a base de vegetación, desde orangutanes, hasta flamencos pasando por dinosaurios que parecen transportarnos a tiempos prehistóricos en mitad de tanto verde.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Se acercaba la hora de destapar los cocidos y decidimos salir y visitar por la tarde las zonas del parque que nos quedaban por ver. Con el coche nos acercamos a la Lagoa das Furnas, un lugar con mucho encanto, como el resto de paisajes que habíamos disfrutado hasta entonces.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El lago, sereno y con algunas nubes bajas, está rodeado de altas y verdes criptómeria y salpicado por fumarolas y charcos en el suelo. Nos encontramos también con los hoyos habilitados para depositar las ollas en las que se prepara el cocido. Un ejército de patos deambula por la orilla y finalmente se lanzan al agua. Dos caballos pasan al galope por un camino y un corrillo de gatos reposa sobre el musgo verde.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Pronto llegan las furgonetas de los restaurantes y entre varios hombres sacan de los agujeros las ollas de aluminio que se habían introducido 6 horas antes. Cocido a fuego lento, se cocina en el subsuelo con el calor de la tierra y, algo que nos sorprendió, es que los alimentos se introducen en seco, sin echar agua.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El personal de Tony´s, el restaurante más famoso de Furnas, recoge sus cocidos ante la mirada curiosa de los que estamos por la zona.
Bajamos al pueblo y entramos en el restaurante O Miroma, donde habíamos reservado por la mañana. En el comedor encontramos a gente que habíamos visto en el avión, casi todos turistas.
Nos sirven una bandeja para los dos con pollo, batata dulce, chorizo, morcilla, oreja, repollo, todo muy rico y abundante.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Para bajar el cocido nos dirigimos de nuevo al Parque de Terra Nostra, recorriendo los caminos arbolados. El jardín abarca una superficie de alrededor de 12 hectáreas y su creación está íntimamente ligada al desarrollo del pueblo de Furnas como centro balneario y de recreo, convertido en un destino vacacional. Thomas Hikling, natural de Boston y residente en Ponta Delgada, se interesó por el lugar y mandó construir una casa conocida en la isla con el nombre de Yankee hall. La rodeó de un lago artificial y se encontraba en el lugar que hoy ocupa la casa del parque. Vendió la propiedad al vizconde de Praia, un amante de la botánica, que fue introduciendo nuevas especies y ampliando los jardines.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A mediados del siglo pasado se construyó el hotel Terra Nostra, como destino termal, aprovechando la piscina con agua ferruginosa. Rodeamos el estanque apreciando el color ocre y viendo cómo algunas personas se bañaban y nos decían que el agua estaba buena, pero al final no nos metimos.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Seguimos por el cauce de agua que recorre el jardín y que termina en una gruta de estilo romántico. Algunos patos se acomodan en el mullido césped, y coquetas flores adornan el lugar. Atravesamos la avenida de los Ginko biloba, un árbol de origen asiático conocido como fósil viviente por pertenecer a una familia de árboles extintos. Son conocidas también sus propiedades farmacológicas y es ampliamente utilizado por ser rico en flavonoides que neutralizan los radicales libres.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
La altura de los árboles es considerable y en suelo caminamos por una alfombra amarilla formada por la curiosa hoja del Ginko, mostrando un entorno muy peculiar.
Desde un rincón del parque alcanzamos a ver la iglesia matriz de Furnas.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Al salir del parque y de camino al coche, nos encontramos con una curiosa casa, que pertenece a una empresa de energía de la isla.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Nos dirigimos hacia Povoaçao, la primera localidad en poblarse de la isla. Se asienta en un bonito valle, por el que discurren riachuelos que corren ladera abajo para ir a morir al mar. Aparcamos y recorremos las calles del pueblo descubriendo una plaza rodeada de árboles con una pérgola en la parte central, no hay mucha animación, pero los pocos lugareños que vemos por las calles parecen serenos y tranquilos, como el resto de las amables gentes que pueblan la isla. Nos dirigimos hacia el paseo marítimo donde descubrimos un gran arco, como puerta de entrada al mar, se trata del monumento a los primeros colonos, con las caras talladas en piedra a lo largo del marco.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
En un extremo se abre la playa de guijarros y nos sentamos en un improvisado banco, un tronco de madera frente al agua. El atardecer está en todo su esplendor, la luz se hace cada vez más tenue, de nuevo solos, en silencio, sólo roto por el rumor de las olas.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Seguimos la ruta y continuamos hacia Faial da Terra. Por la carretera nos detenemos en el mirador Ponta da madrugada desde donde se disfrutan los más bellos amaneceres de Sao Miguel. Llegamos ya con poca luz al área acondicionada como merendero y vemos deslizarse el sol entre los acantilados, con las sombras de los árboles como marco.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Más adelante, Ponta do Sosego, precisamente eso es lo que transmiten las vistas desde este mirador, tranquilidad, paz, sosiego.
La carretera continúa hacia Faial da Terra, con un pronunciado desnivel y bastantes curvas por lo que estamos a punto de dar media vuelta, pero, estando tan cerca, decidimos bajar.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Un breve paseo por el pueblo encajado entre las montañas y arrinconado por el mar y ponemos rumbo a Capelas terminando este animado día.
Me ha encantado tú diario. Maravillosas fotos y un narración del viaje muy entretenida y con muy buena información para preparar mi viaje. Gracias por compartir este diario. Saludos
Buen diario que me viene muy bien para mi viaje a la isla de San Miguel. En 10 días vamos para allá y estamos muy ilusionados de ver esos maravillosos paisajes. Además, estaremos en el mismo hotel que vosotros. Esperemos que el tiempo nos acompañe.
Muchas gracias jomireal, Sao Miguel tiene unos paisajes preciosos y el pueblo de Capelas un restaurante estupendo, si visitas O Emigrante el chuleton de ternera es excelente!
El tiempo en estas islas es variable, para que esté todo tan verde tiene que nublarse de vez en cuando, pero forma parte del encanto del lugar.
Saludos y a disfrutar en destino!
SÃO MIGUEL (AZORES): ESTA ISLA ES LA LECHEUna semana en São Miguel, la mayor de las islas del archipiélago de las Azores...⭐ Puntos 4.94 (49 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 448
Perfecto, muchas gracias, voy a pedirles presupuesto
Hola, he estado leyendo tu post anterior, nosotros también somos de Alicante y estamos valorando ir. ¿Al final lo has organizado por libre o con la agencia que te recomendaron? Un saludo.
Hola Enfoquita, pues les pedí presupuesto y ni me contestaron, miramos por libre hicimos cuentas y nos decantamos por Martinica y Guadalupe que nos salía casi alismo precio.
Salodari Moderador de Diarios 03-04-2009 Mensajes: 18778
Hola Enfoquita, pues les pedí presupuesto y ni me contestaron, miramos por libre hicimos cuentas y nos decantamos por Martinica y Guadalupe que nos salía casi alismo precio.
Hola, gracias por la información!!
Voy a mirar por libre pero creo que para 7 días y que no se nos suba mucho de precio e ir tranquilos solo visitaremos San Miguel.
Últimos comentarios al diario SAO MIGUEL: LA ISLA VERDE DE LAS AZORES
carrabouxo 07/10/2013 08:46
📚 Diarios de carrabouxo 
ANGEMI 24/04/2015 19:54
SÃO MIGUEL (AZORES): ESTA ISLA ES LA LECHE
Una semana en São Miguel, la mayor de las islas del archipiélago de las Azores...
⭐ Puntos 4.94 (49 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 448
Escapada de Semana Santa por Oporto y alrededores
La Semana Santa de 2022 hicimos una escapada a Oporto y alrededores tras...
⭐ Puntos 5.00 (5 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 405
Vacaciones en las Islas Azores: Sao Miguel y Terceira.
Relato de diez días de vacaciones en julio en las Islas Azores, seis días...
⭐ Puntos 5.00 (18 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 396
Una semana de mayo por el Algarve (Portugal) en nuestro coche.
Recorrido de una semana por el Algarve portugués. Fuimos en...
⭐ Puntos 4.62 (13 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 351
Por las diferentes islas de Azores: Terceira, San Jorge,Faial,Flores,San Miguel
Cada isla de las Azores tiene su encanto, son...
⭐ Puntos 5.00 (3 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 321
Foros de Viajes
Tema: Viajar a Las Azores: Qué ver, rutas - Portugal
Foro Portugal: Foro de viajes por Portugal: Lisboa, Oporto, Evora, Braganza, Faro, Estoril, Sintra, Coimbra, Algarbe, Alentejo, Madeira...
Ir a tema del foro
Galería de Fotos 
