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Nuestro último día en Londres empezó en el Madame Tussauds. Es un museo de cera, y la entrada es carísima (28 libras por persona) aunque por suerte hay 2x1 (sigue siendo caro, pero nunca habiamos estado en un museo de cera y nos hacía ilusión).
Abría a las 9.30 y nos hablaron de interminables colas así que llegamos a las 8.40 o así... y tampoco había mucha gente, aunque es cierto que alrededor de las 9.00 fue llenándose la cola.
En general es bastante variado, incluyendo una zona opcional de "terror", un recorrido en trenecito histórico y casi al final del recorrido hay un espectáculo 4D de Marvel Superheroes, que la verdad estaba bastante curioso el efecto, pero no sería nuestro único 4D del día!
Al salir, teniamos pensado ver Regent's Park pero como hoy teniamos la hora un poco ajustado, pues queriamos intentar de nuevo el Tour de Covent Garden a las 15.00 preferimos dejarlo para otra ocasión.
Cogimos el metro... y estuvimos con retraso de media hora. Al final llegamos a la estación de Waterloo, donde cogimos un barquito de Thames Clippers (con un 33% de descuento por tener Travelcard) hasta Greenwich (allí se pronuncia Gren-ich y no como yo pensaba en un principio :P)
Una vez allí, dimos un paseo por la zona, bastante bonita con muchos jardines y algo menos de gente que en Londres. Nuestro objetivo era el Royal Observatory donde se ubica el mítico Meridiano
Cual fue nuestra sorpresa cuando al llegar nos dimos cuenta de que para ver el meridiano la zona estaba rejada, y habia que pagar la entrada al museo del observatorio (7 libras, o 5 si se es estudiante) para poder ver el meridiano en sí mismo. "Ya que estamos aquí..." pensamos, aunque el museo no era santo de nuestra devoción.
Aún así, estuvimos un buen rato por la zona, y ya era casi las 14.00 así que nos comimos nuestro Meal Deal en los jardines.
Al ver la hora descartamos el tour de Covent Garden ya que pensabamos que el trayecto a London duraría bastante. Seguimos paseando por alli hasta que decidimos volver, para lo cual cogimos un cercanías (también incluido en la travelcard). Al final llegamos a las 15.00 a Londres, habiendonos entretenido bastante más ya que pensabamos que no llegabamos al tour (si que nos hubiera dado tiempo al final) pero bueno, ya lo haremos algún día
Al volver al centro de Londres no teníamos muy claro el objetivo ya que nuestro itinerario estaba casi completo, aunque nos faltaba una cosa importante: Abbey Road
Al llegar, había muuuucha gente, y como curiosidad, si entran en www.abbeyroad.com/visit/ podrán ver en directo el famoso paso de cebra. Una buena oportunidad para llamar por teléfono a familiares (en mi caso mis padres) y hacer la gracia de verlos en directo.
Ya era cerca de las 16.00 y aprovechamos para visitar un museo que se nos había quedado pendiente Imperial War Museum que cerraba a las 18.00
Impresionante, sobre todo para los amantes de la historia (bélica en particular). Muy impactante la zona del holocausto
Antes de salir de España habiamos reservado un ticket para London Eye durante este día, a la hora que eligieramos, así que fuimos hacia allí
Antes o después de subir, hay una experiencia 4D disponible en el mismo edificio de los tickets. No está mal, ya que está incluido con la entrada.
Sobre el London Eye en sí, pues bueno, para mí es como la Torre Eiffel, es de esas cosas que hay que subir 1 vez en la vida, pero realmente si no lo haces no te pierdes gran cosa, pues hay vistas más baratas (sin ir más lejos, la catedral de San Pablo, que además ves la propia catedral).
Aún así, las fotos salen bastante bonitas.
Al terminar, ya se notaba el ambiente de despedida de Londres, estuvimos un ratillo por la zona, bastante animada hasta que decidimos donde cenar. Cogimos un autobús y nos plantamos en Leicester Square, para llegar a Chinatown, donde nos habian recomendado un par de restaurantes el otro día.
Al final nos metimos en el más barato: Mr Wu, con buffet libre por 4.95 libras. No creo que se pueda encontrar nada más barato por la zona, aunque claro, no hay tanta variedad como habrá en los restaurantes normales o en los buffets de 10 libras, que habia a patadas.
También es verdad que el ambiente puede resultar extraño a algunos, es el tipico sitio donde te puede tocar sentado al lado de otro, pues es pequeñito, se llena enseguida y suele estar lleno casi siempre.
De comida se podia coger arroz con huevo, tallarines, alitas de pollo, pollo al curry, rollito de primavera, cerdo agridulce, ternera, sopa y poco más.
Desde luego, como los chinos de España ninguno, pero por el precio y considerando que estaba en Londres no estaba nada mal.
Al terminar nos tomamos un helado en la carísima Häagen-Dazs que quedaba muy cerquita. Como curiosidad, Häagen-Dazs no significa nada en ningún idioma ni existe ninguna palabra por separado. Es una marca estadounidense que pretendía sonar "exótico" a los consumidores de allí.
Nuestra estancia en Londres acabó aquí, cogimos un metro, nos plantamos en el hotel e hicimos la maleta.
Al día siguiente, cogimos otro easyBus al aeropuerto, y al final llegamos a las 16.15 a Málaga. La diferencia de temperatura fue brutal, ya aconstumbrados al clima londinense
Como dije al principio, esto solo pretendía ser un mini-diario esquematizado con información muy muy básica, pero espero que al menos a alguien haya podido servirle para hacerse una idea de lo que tiene Londres que ofrecer a un visitante.
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