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Nuestra escapada se acaba…desayuno y emprendemos viaje de vuelta.
Antes, y para “no perder el tiempo” un par de paradas…
La primera en Santo Domingo de la Calzada, “…donde cantó la gallina después de ser asada…”
Un poco de historia…
Domingo García, hijo de labradores y después de la muerte de sus padres decide ingresar en los benedictinos de Valvanera y de San Millán de la Cogolla. En ambos monasterios es rechazado y decide ayudar a los peregrinos que acuden a Santiago. Construye una calzada de piedra desviándose del tradicional paso entre Logroño y Burgos, construye también un puente de piedra, un hospital de peregrinos y un albergue.
De ahí que sea considerado el patrón de los Ingenieros Técnicos e Ingenieros de Caminos, Canales y puertos.
El apellido “de la Calzada” ya sabéis de que viene ¿no? Pero y eso de “…donde cantó la gallina después de ser asada…”
Es uno de los muchos milagros atribuidos a Santo Domingo.
Cuentan que una familia alemana que caminaba hacia Santiago de Compostela al pasar por Santo Domingo se alojaron en un mesón donde la moza de la casa sintió una fuerte atracción por el hijo de la familia y se lo hizo saber. Pero el joven resistió los avances de la moza y ésta, humillada y rencorosa, escondió un vaso de plata en el zurrón del peregrino. En cuanto salieron los peregrinos a continuar su camino, ella le acusó de haberle robado el vaso.
Los oficiales de la ciudad prendieron y ahorcaron al peregrino. Los tristes padres siguieron su peregrinaje y de regreso de Compostela, descubrieron que su hijo seguía vivo en la horca, milagrosamente sostenido y protegido por Santo Domingo. Fueron a decírselo al juez del pueblo, que en aquel momento estaba en la mesa a punto de comer un plato de pollo. Al oír lo que le afirmaban los padres, replicó con ironía: "Esta historia es tan verdadera como que este gallo y esta gallina van a levantarse del plato y cantar." Y así lo hicieron las aves, ante el asombro de todos.
Desde entonces se dice “Santo Domingo de la Calzada….donde cantó la gallina después de ser asada”
Y para mantener vivo el milagro, la tradición o la leyenda, dentro de la catedral de Santo Domingo podréis ver un precioso y curioso gallinero con un bonito marco gótico y unas rejas detrás de las cuales viven un gallo y una gallina y según cuentan son descendientes de las famosas aves que “cantaron después de ser asadas”
En Santo Domingo se pueden ver muchas fachadas nobles como las Casa de los Trastamara,, hoy sede de la oficina de Información y Turismo, la casa de las Antiguas Carnicerias, la fachada del Ayuntamiento y por supuesto su catedral.
En la catedral no os podeís perder todos los capiteles historiados del deambulatorio, el coro del siglo XVI de estilo plateresco, el sepulcro del santo y el claustro del siglo XVII donde se exponen trípticos flamencos , orfebrería y piezas escultóricas.
¡Ah se me olvidaba! En Santo Domingo hay un postre típico de la ciudad, se llaman “Ahorcaditos” por si los queréis probar.
Seguimos ruta y ya en la provincia de Soria una pequeña parada en el mirador de la Galiana desde donde se aprecia una vista estupenda de lo que sería nuestra próxima visita: El Cañón del río Lobos.
El río Lobos durante milenios ha erosionado y ha formado un profundo cañón con altas paredes y farallones que incluso llegan a alcanzar unos 200 metros de altura y en el cañón la ermita de San Bartolomé, un enclave templario.
¿Queréis conocer algunas curiosidades de la ermita?
La ermita está a la misma distancia de los dos extremos más septentrionales de la Península, es decir desde la ermita hay la misma distancia al cabo de Creus que al cabo de Finisterre…..¿Por que precisamente construirla ahí? San Bartolo quizás fuera un lugar tranquilo y secreto para los ritos de iniciación de los Caballeros Templarios....¿ por que no?
Si uniéramos con una línea recta la iglesia de Santa Maria de Siones en Burgos con Santa Maria de Eunate en Navarra y la ermita de San Bartolomé se formaría un perfecto triangulo isósceles…No hace falta decir que las tres son Templarias….. ¿ Casualidad ? En las construcciones templarías nada era “casual”
También cuentan que en la noche de San Juan se ve desde este enclave la constelación Sagitta (La Flecha) señalando al norte el camino de Santiago.
En los sillares de la ermita podéis buscar también marcas de cantero…..hay muchas. Y en la columna de la izquierda de la portada una marca con mucho simbolismo.
Si rodeáis la ermita podéis descubrir muchos canecillos en los aleros del tejado…
El pulpo…solsticio de verano (signo de Cáncer), un Crismón Templario uno de los pocos crismones que está en un canecillo, la cabeza del “Magíster muri” ….maestro de obras, unos gemelos….la dualidad, un canecillo con la letra H en honor a Hiram, el arquitecto del templo del rey Salomón, otro canecillo representando un cordero….símbolo de Cristo, una figura humana..un hombre agarrándose la garganta…. ¿garganta generadora de voz con la cual podemos trasmitir conocimiento? Podría ser también Adán tapándose con pudor al ser descubierto y con el trozo de manzana en la garganta (Esto me recuerda a San Juan de la Peña) Un Laberinto, la Luna y el Sol…el día y la noche… el bien y el mal…
Pero sin duda lo que más llama la atención en sus fachadas, son dos óculos con el pentáculo invertido y los diez corazones entrelazados, también con mucho simbolismo, pero tampoco es cuestión de aburrir ¿No?
Junto a la ermita y tras cruzar por un puente de madera el río, podemos entrar en la Cueva Grande, nada especial nos sorprenderá en ella, eso sí desde el interior de la cueva se puede hacer una de las fotos más emblemáticas del cañón, la ermita enmarcada por las paredes de la cueva. Si os animáis a visitar el cañón probad.
Nuestra escapada de otoño a la Rioja, eso si pasando por Soria para no perder el tiempo, se acaba….
Mañana…..!A pensar en el próximo viaje!
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