Día 4 (Domingo).-
Fuimos caminando hasta San Paolo Fuora Muri, unos 10 minutos. Solo voy a decir una cosa, impresionante templo, no hay que perdérselo.
Luego, después de desorientarme un poco, vamos a la estación de metro hasta Circo Massimo, lo vemos hacemos unas fotos y, directos a las Termas de Caracalla, ya empecé a darme cuenta que iba a tener que ir recortando sitios a visitar porque se nos estaba yendo más tiempo de lo que yo creía. Termas de Caracalla en profundidad, hacía bastante calor, por cierto, vaya como pica el sol allí, hacía menos grados que en Sevilla pero el sol picaba bastante más, sin embargo en la sombra hasta podías tener fresco. Al salir de las Termas, en un puesto ambulante que había en la puerta compramos una cerveza Peronni grande que nos cobró 5 euros pero, estábamos fritos. Una curiosidad, yo hago atletismo y ese día se veía que había terminado una carrera popular en las pistas que hay junto a las Termas, normalmente viajo y corro a la vez (Venecia, Viena, Praga, Estocolmo, Berlín...) pero una lesión este año me lo ha impedido, ¡que pena!
Bueno, ahora vamos andando hasta San Juan de Letrán, las distancias son cortas para coger bus y algo largas para andar pero allá que vamos, San Juan es también espectacular, nos querían cobrar 3 o 4 euros por ver el claustro y decidimos que no. Ahora ya es hora de comer, busco un sitio que tenía anotado pero no lo encuentro pero cerca hay un Pastarito y comemos allí, muy bien por cierto, algo caro pero es que no nos cortamos en nada, queríamos comer bien. 50 euros (bueno 46 más el servicio) Ensalada Bufalina, Crepe tornado, espagueti profuso di mare, 2 cervezas grandes a 4,10 euros y una piccola a 3,40, tartufo clasico y 2 cafés, ¡cómo estaban los espaguetis!
Con la barriga llena fuimos a Scala Santa y Porta Asinaria, que está al lado, para ir luego hacia Santa Croce in Gerusalemme (empezaba acto religioso y nos tuvimos que ir rápido), Porta Magiore, un buen paseito de nuevo y Piazza V. Emmanuelle II, Arco de Galieno, Sta. Mª Magiore, Piazza Esquilino, Sta. Prassede, San Pietro in Vincoli, aquí tengo que decir de nuevo IMPRESIONANTE, la estatua de Moises no me cansaba de mirarla.
De aquí ya tiramos para el centro, saliendo al Coliseo donde hicimos varias fotos, descansamos un ratito y emprendimos camino por Foro Imperiali que al parecer el domingo se hace peatonal y daba gusto estar por allí, pasamos junto al foro y a las muchas ruinas de por allí y como era buena hora, y aún de día, decidimos tirar para el Capitolio, ascendiendo por la parte de detrás que tiene vistas al foro, muy guapo todo.
Llegamos a la plaza del Campidoglio, y allí sentados admiramos todo su entorno, los museos capitolinos, la estatua central, las escalinatas y sus estatuas, luego roca tarpeia, pasamos por la insula romana, hasta llegar a Piazza Venezia una vez más con el monumento a Victorio Emmanuelle II, el Palacio y demás. Autobús 170 y al hotel, pasando previamente por nuestro sitio de cena IDEM, donde comeríamos esta vez Pizzas y un dulce que también preparan, todo muy rico una vez más.