DOMINGO 22
Sobre las 5,30 a.m me levanté con la intención de fotografiar el amanecer.- Que ilusa.- A esa hora el Sol ya estaba en lo alto.- O amanece muy pronto o lo hace muy deprisa.- En la próxima ocasión en lugar de madrugar lo que haré será trasnochar.-
Primera visita a efectuar: el Museo, que recoge las piezas descubiertas en las excavaciones que se realizan.- Cuenta con estatuas, relieves, mosaicos, piezas de cristal, vajillas y momias halladas recientemente.- Me pareció muy interesante.-

Siguiente paso: la necrópolis.- La tumba torre que visitamos tenía 3 plantas y además de contener los sarcófagos de su constructor, el resto de la tumba se compartimentaba en nichos que eran vendidos a otras personas.- El primer servicio de pompas fúnebres de la historia.-
Visitamos una que conservaba magníficas pinturas y otra con la original puerta de piedra que con una “mínima” ayuda conseguí abrir.-

El Templo de Baal tal vez sea la construcción mas importante de Palmira y estaba también dedicado a Yarhibol, dios del Sol, y a Aglibol, diosa de la Luna.-

El recinto es mas o menos cuadrado y cerrado por una muralla.- Las columnas corintias estaban decoradas con estatuas de personalidades nobles.-



Una vez al año, en el patio, eran sacrificados miles de animales en honor al dios Bal, y la carne era posteriormente repartida entre los fieles y gentes necesitadas.-
En el centro del patio se levanta el recinto mas sagrado al que se accede a través de una altísima puerta.- Dentro el templo encontramos dos altares, uno al norte y otro al sur.- En el primero un gran un bloque monolítico en el techo representa los 7 planetas rodeados de los 12 signos del zodíaco, así como motivos geométricos y florales.-
En el segundo, formado también por un solo bloque de piedra y dedicado al dios Baal, podemos contemplar una gran flor abierta y al alrededor adornos y símbolos religiosos.-
A la vista de tantos restos, el reino de Zenobia y Palmira debieron ser fabulosos.-
Entramos en la Vía Columnada pasando bajo el Arco de la Victoria que aun conserva preciosos relieves geométricos y florales.- Con 1.250 m de longitud tenía el pavimento de arena y no cubierto de losas de piedra, con el fin de que los animales no se quemaran las patas.-
Las columnas tenían ménsulas que soportaban las estatuas de las personas mas importantes como se deduce de las inscripciones que aun se conservan.- Al final del segundo de tramo de la vía se encuentra el tetrapilo constituido por 16 columnas de granito (solo queda 1 original) situadas sobre 4 pedestales cuadrados que contenían cada uno de ellos una gran estatua.-
El Teatro data de mitad del s.II d.C. y se conserva en muy buen estado.- El escenario esta decorado por esbeltas columnas y se conserva casi intacto, así como las gradas y la zona de la orquesta.-

El Ágora, lugar donde se efectuaban las transaciones comerciales, era una amplia plaza rodeada por muros porticados y con 11 puertas.- En uno de ellos figura la primera Ley Fiscal escrita en griego y palmirense.-
Frisos ricamente adornados, hermosos capiteles, conducciones de agua, los baños de Zenobia, etc hacen de Palmira un lugar increíble y merecidamente declarado Patrimonio de la Humanidad.-
Subimos al Qalaat ibn Maan que perteneció al emir libanés Fakhr el-Din y desde se disfruta de una estupenda vista de las ruinas.- La bajada la hicimos a pié por la ladera.-

Emprendemos viaje de regreso a Damasco con parada en el Bagdad Café (imprescindible el stop y el té) y otra fotográfica de la puesta de Sol.-
Algo más de las 7 de la tarde llegamos al hotel Semiramis donde Ayman nuevamente nos sorprendió con “detalles fuera de programa”.- Chapeau.-