El dia 7 nos dedicamos a ver Bergen, quizás la ciudad mas bonita de Noruega, se puede visitar andando. Es la capital del condado de Hordaland, 256.000 habitantes. Empezamos por la oficina de información turística, donde encontramos una chica de Barcelona, que nos estuvo explicando todo; nos chocó que nos dijo que en Noruega no hay las ventanillas y despachos de los bancos españoles, todo se hace por Internet, el dinero se saca de los minibanks, cajeros automáticos, y el cambio de moneda se hace en las oficinas de turismo y en correos, mejor que en las casas de cambio de divisas que te cobran grandes comisiones.
Al lado de información y turismo está el famoso mercado de pescado, una serie de puestos callejeros, en los que entramos muchos vendedores españoles jóvenes, algunos con licenciaturas y master. La razón dicen que es que sirven de cebo a los cruceros de españoles, que son los que compran pescado. Era temprano y dejamos el aperitivo para mas tarde.
Seguimos vistando el Briggen, el paseo portuario donde estan todas las casas que salen de portada de Bergen. Al final del Briggen hay una fortaleza, y detrás están las casas de madera del famoso barrio Hanseático ( Aleman) que tanta importancia tuvo a nivel comercial en los siglos de esplendor económico, del XIII al XVI, de Bergen, muy bonito.
Después subimos con el funicular( 10 euros) hasta el monte Floien ( 320 m.), desde donde pudimos disfrutar de las mejores vistas de Bergen. Decidimos hacer la bajada andando y desde luego acertamos con un precioso paseo en medio de los bosques por un camino ancho y muy bien señalizado.
Despues fuimos a tomar un aperitivo en el mercado de pescado, unas gambitas y unos trozos de salmon. Nos atendió un joven arquitecto alicantino. Los precios están indicados y en Noruega no existe el regateo.
Por la tarde después de descansar fuimos a cerciorarnos de la salida de del ferry que teniamos que coger al dia siguiente a las 8 de la mañana para recorrer el Sognefjord, este billete lo habiamos reservado por Internet, consistia en recorrer los 200 km. del Sognefjord en ferry hasta Flam, y allí coger el famoso tren de Flam a Myrdal, una maravilla, y desde Myrdal volver en tren a Bergen. El precio por persona es de unos 180 euros.
Seguimos paseando por el puerto y pudimos comprobar la “marcha” que tienen los noruegos, por ser sábado.