3 de septiembre de 2011:
Un largo, laaaargo, larguísimo día...
Enfermeros improvisados, la tumba del rey y fuegos artificales.
Parte 2
Como ya os dije, llegamos a la estación de Delft sin problemas a las 16:02. Nuestros trayectos en tren eran de lo mejor que nos podía pasar durante el viaje. Primero, porque aquí en Tenerife no hay trenes y es un medio de transporte en el que disfrutamos como chiquillos. Segundo, porque los paisajes que ves durante los trayectos, que además suelen ser cortos y no cansan, son realmente preciosos en la zona del Benelux. Y tercero, porque siempre íbamos jugando a las cartas, nos picábamos mucho, lo pasábamos tan bien… Además de reírnos de los típicos personajes que suelen aparecer en los vagones de los trenes, y de flipar con las bellezas que subían de vez en cuando.
www.delft.nl/delften/
Esa es la web oficial de la Tourist Office de la ciudad, aunque solo está en inglés y en neerlandés. Delft, una ciudad situada justo en medio de La Haya y Rotterdam, es una buena excursión desde cualquiera de estas dos ciudades y puedes verla en apenas unas horas, porque todo su casco antiguo está muy juntito y no es demasiado grande.
Aquí os dejo también una web de donde podéis sacar muchísima información y cosillas curiosas sobre la ciudad, y sobre otras ciudades holandesas, en castellano!
www.holandalatina.com/ ..._delft.htm
Salimos de la estación y nos dirigimos al centro en busca de la oficina de turismo, sin mapa en mano, solo guiándonos por nuestro olfato (y por algún que otro cartelillo que había por la calle) :P. Entran Jaime y Joshua a la Oficina de Turismo para hacerse si era posible con un mapa en castellano o algún tipo de información, mientras yo me quedo en la puerta mirando el ambientillo, muy bueno por cierto, un mercadillo justo en la calle y mucha gente.
La Oficina de Turismo está situada a pocos minutos de la estación, en pleno centro de la ciudad, en la calle Voorstraat, a la vuelta de la esquina de la Grote Markt o Plaza Mayor de Delft.
Estando allí fuera, esperando a que éstos salieran, aparecen dos pibones en minifalda con una nevera de coca – cola y una cesta con chupa – chups. Se paran y me ofrecen un refresco y dos chupetes gratis, yo flipando los acepto y entro a la Oficina de Turismo con ello en las manos y una sonrisa de oreja a oreja, y cuando los chicos me ven con eso me dicen flipando: “¿De dónde sacaste eso tiooo?” y les digo: “Pues es gratis, y me lo acaban de dar dos chicas guapísimas que se acaban de ir en aquella dirección…”
Para que hace falta decir más nada… se largaron corriendo en busca de cosas gratis y de chicas guapas… si es que somos de lo que no hay… jajajaja
De allí, mapa en mano, vamos directamente a la plaza mayor. Solo tenéis que salir de la Oficina de Turismo e ir hacia la izquierda, y en el primer cruce a la izquierda de nuevo, por la Voldersgracht, y en 30 segundillos caminando estáis en medio del meollo.
La Plaza es preciosa, con la catedral y su torre enorme, estaban jugando a la petanca o algo parecido en medio de la plaza, había un buen ambiente, entorno a ella está también el Ayuntamiento, además de otros edificios de interés con esa típica arquitectura flamenca que te deja con la boca abierta mirando hacia todos lados. Si queréis saber un poco más sobre cada monumento, su historia y su utilidad hoy en día no tenéis más que entrar aquí, que como os digo tiene de todo, muy completo:
www.holandalatina.com/ ..._delft.htm
Nos decantamos por entrar en la Nieuwe Kerk (Iglesia Nueva) que es donde se encuentran las tumbas de la familia real holandesa, lo que vendría siendo un Escorial al más puro estilo flamenco. La entrada en aquellos momentos costaba 2 euros para estudiantes y 3.50 euros para adultos, los precios se siguen manteniendo, podéis ver un poco más sobre ello en la web oficial de las dos iglesias más importantes de la ciudad. A la torre no subimos, pues había que pagar otros 2 euros, y claro, la economía no estaba para derrochar según en qué cosas, tampoco fuimos a la iglesia vieja porque eran otros 2…
Solo entramos en la nueva, para ver las tumbas y demás, y fue un acierto, porque te daban un mapita con explicaciones en inglés, y habían incluso televisiones dentro en las columnas con un video del entierro del último monarca en fallecer, enseñando la ceremonia, con toda la parafernalia, guardia real, y demás… Esta muy guapa, merece la pena.
oudeennieuwekerkdelft.nl/
Incluso nos encontramos con que el órgano de tubos, enorme por cierto, que se encuentra dentro de la catedral, estaba siendo tocado y nos quedamos allí alucinados sentados en un banco escuchando ese mini concierto. Un placer para nuestros sentidos.
Salimos de allí y ojeamos en el mapa que a dos pasos se encontraba una plaza con buena pinta, la Beestenmarkt, y allí que nos fuimos. Paseamos por las agradables calles de Delft hasta llegar allí, donde nos sorprendimos por la gran cantidad de gente que había disfrutando al solecito en las terrazas de los bares, tomando una cerveza o un refresco, y charlando.
Nos dimos cuenta de que había una iglesia allí y nos encaminamos a ver si era gratuita, y así era. Entramos y “voilá”, había una boda!!! Jajajajaja. Y claro, nos quedamos allí detrás sentados, cotilleando cómo podrían ser las bodas holandesas, y prácticamente son iguales que las de aquí vamos…
Al salir callejeamos sin rumbo, y nos apetece tomarnos una cerveza, pero en vez de ir a un bar nos metemos en un supermercado y las compramos. Como tenían chapa y pensé que no habría abre botellas, me metí la botella en la boca e intenté abrirla con las muelas. Cuando el vendedor me vio suelta un “CRAZY SPANISH!!!!”, y saca un abre botellas y nos las abre jajajaja. Qué grande, nos reímos mucho.
Salimos y nos las tomamos sentaditos a pie de un canal precioso, y nos fumamos un cigarrillo, así sí que da gusto pasar un buen rato charlando sobre lo que ha pasado durante el día y respirando un ambiente sin igual.
Finalmente, caminamos sin rumbo hasta llegar a la estación de ferrocarril, pues aún teníamos que llegar a Rotterdam y echar un vistazo a la ciudad, que aún no habíamos ido a los lugares más emblemáticos. Cogemos el tren a eso de las 18:33 y llegamos a las 18:46 aproximadamente.
Cabe decir, que al llegar salimos por el lado equivocado de la estación, y nos piramos en dirección contraria al centro de la ciudad, tras caminar mucho rato no encontramos ninguna de las calles del mapa que teníamos y preguntamos a gente por la calle, porque estábamos cerca del zoo, y el zoo estaba a tomar por culo de todo.
Nos dijeron que estábamos en otra dirección, por lo que volvimos sobre nuestros pasos, pasamos de nuevo por la estación, y salimos por el lugar correcto. Si, qué despistados somos… A por Rotterdam!!!
Y como siempre hago, os dejo una web donde podéis encontrar mucha info:
www.rotterdam.es/
Y nos pusimos a ello, caminamos viendo rascacielos de la zona nueva de Rotterdam, flipando con esos edificios tan altos y con tanto cristal y metal en su arquitectura, totalmente diferentes de las casas flamencas que nos habíamos encontrado por el país. Pasamos por el Ayuntamiento y por la iglesia principal de la ciudad, la Sint Laurenskerk, íbamos paseando casi al atardecer viendo poco a poco todo lo que Rotterdam nos ofrecía.
Cada monumento tenía algo especial, pasamos por la biblioteca central, para finalmente llegar a las típicas e impresionantes casa cubo de Rotterdam.
Y alucinados vamos viendo terracitas con gente tomando algo al fresquito, calles enormes, y al fondo el impresionante puerto de Rotterdam. Nos dirigimos a él, sin pausa pero sin prisa, y cruzamos uno de los dos puentes que conectan la ciudad con una isla donde hay industria, hoteles, y más zonas del enorme puerto, que es el más grande de Europa.
Las distancias son un tanto grandes, porque la ciudad de por sí ya es grande, y después de todo un día pateando ciudades estábamos un poco cansados la verdad. Pero las vistas que habían desde allí y las ganas de conocer más nos impulsaban a seguir caminando. Eso sí, los calambres en las piernas eran insoportables, al menos para mí a estas alturas del viaje.
Tengo tropecientasmil fotos de este maravilloso atardecer, de un rascacielos cuya fachada se iluminaba haciendo formas como corazones por ejemplo, muy bonito. Y caminamos por el otro puente, y nos dirigimos al hostal que está muy cerquita de la zona del puerto, y vemos que se está liando una gorda porque hay muchísima gente asomada a ambos puentes, cogiendo sitio en la avenida del puerto, y con muchos barcos y escenarios en la zona. Preguntamos y nos dicen que se celebra una fiesta, que hay un espectáculo de fuegos artificiales, música y demás dentro del agua, y claro, no podíamos perdérnoslo.
Vamos al hostal, preparamos la cena, y luego piramos al puerto a disfrutar del espectáculo. Llenísimo de gente, hasta los topes, estuvimos un par de horas allí, incluso yo, que soy más bajo que Jaime y Joshua, no podía ver nada, y Jaime me subió a sus hombros jajajaja que crack!!!
Fue una pasada, los fuegos artificiales salían del agua al ritmo de músicas como la banda sonora de piratas del caribe, duró unos 15 – 20 minutos, pero antes habían conciertos y demás en barcos iluminados que pasaban por el agua frente al puerto.
Eso sí, cabe decir que en Los Realejos, mi pueblo, en el norte de la isla de Tenerife, se hace la mayor exhibición pirotécnica de España, pues estamos más de 4 horas seguidas quemando fuegos artificiales, en una fiesta el día 3 de Mayo, en honor de la santa cruz, donde 2 calles se pican a ver quién hace mejor espectáculo, una tradición de varios siglos… Y así se lo explicamos a una pareja de unos 50 y tantos que estaba a nuestro lado y con los que entablamos conversación tras finalizar la fiesta, pues nos preguntaron si nos había gustado, y les dijimos que sí pero que en comparación con lo que hacíamos en nuestra tierra, nanai de la china!!!
Estuvimos armándola durante toda la exhibición, cantando las músicas, diciendo: “Oh my god!!!” y los guiris se motivaban y se reían y aplaudían jajajajajaja. Y piramos al hostal, y cogimos la marihuana que nos quedaba de Amsterdam, y nos la fumamos por fuera, porque al día siguiente ya dejábamos Holanda, se acababa la visita al país de los zuecos, el queso, los canales y la marihuana…
Gastos del día:
- Souvenirs Frikis Rotterdam: 13.90 €
- Burger King La Haya: 5.45 €
- Entrada a Nieuwe Kerk Delft: 2 €
- Cerveza en Delft: 1.25 €
Total del día: 22.60 €