24/12/2012 Chefchaouen
Karim muy amable y con ganas de ayudarme en todo lo posible, me vino a buscar por la mañana, para llevarme a una tienda de bicis, para reparar mi rueda. Como había explicado, se habían petado los engranajes de dentro, pero al entrar en la tienda, pude comprobar que era una tienda con recursos, como cualquier de las que pueden haber en España. Tenían bicis de mas de 2000 Euros, el mecanico me explico, todo en un castellano perfecto, sabía que estaba dejando la rueda en buenas manos de profesionales.
Karim me llevó a la terminal de bus de Tetuán, para allí poder dirigirme a Chefchaouen, al entrar en la terminal, vino como es de costumbre, como los podríamos llamar?
Intermediarios, altruistas, buena gente, especuladores, no sé!! El hombre que me acompañó a la ventanilla, para comprar el billete y luego quería enseñarme el camino, donde estaba ubicado el autocar, para ir a Chefchaouen, me gustaría saber porqué? Se largó cuando le dije al buen hombre que no le iba a dar dinero.
Intermediarios, altruistas, buena gente, especuladores, no sé!! El hombre que me acompañó a la ventanilla, para comprar el billete y luego quería enseñarme el camino, donde estaba ubicado el autocar, para ir a Chefchaouen, me gustaría saber porqué? Se largó cuando le dije al buen hombre que no le iba a dar dinero.
Este es un tema que en Marruecos me enfada bastante, el tema del transporte público, está muy mal gestionado y pirata suelto, además del descontrol en paradas etc…
Precio del billete de ida 10Dh.
El trayecto de Chefchaouen es de 50 kilómetros, el bus te dejaba en cualquier parte de la carretera, el pueblo es precioso, entrañable y curioso como tenían pintadas las calles, pero me gustó mas las callejuelas de Rabat, la verdad sea dicha, aquí se podía comprobar que había muchos turistas.
Precio del billete de ida 10Dh.
El trayecto de Chefchaouen es de 50 kilómetros, el bus te dejaba en cualquier parte de la carretera, el pueblo es precioso, entrañable y curioso como tenían pintadas las calles, pero me gustó mas las callejuelas de Rabat, la verdad sea dicha, aquí se podía comprobar que había muchos turistas.