[align=justify]Nuevo día en París, aun estamos aquí, esto parece un sueño, después de la noche anterior, nos parecía una peli que nunca quisieramos que acabara.
Bueno tempranito arriba y al desayuno, abundante, estupendos los Creeps, umm, aun recuerdo su sabor, y los viajes que peque al plato pa rellenar.
Salimos equipados hacia el metro y directos a Madelene, esta vez entramos y degustamos su interior, y su majestuosa custodia de columnas. (Digno de visitar).
Magnificas vistas desde Madelene...
Seguimos el itinerario paseando hacia el Palacio de la Opera Garnier, 8€/pers.; merece la pena, nos tomamos nuestro tiempo, te quedas impresionado en la escalera, pomposidad y suntuosidad al máximo, galerías, estancias y por supuesto el interior de la zona de butacas y palcos.
Salimos y lo prometido es deuda, a muy pesar mio, no encaminamos a Galerias La Fayette (Opera), mi intención era un vistazo rápido y echarle una instantánea a la cúpula y azotea, pero aqui las respectivas señoras no pueden dejar de darse gusto a la vista y mirar y mirar... pero nada mas, es casi prohibitivo, todo carisimo, hasta los souvenirs eran caros.
Por fin consigo sacar al grupo, después de unas cincuenta amenazas de abandonarles allí mismo, no encontramos en renombrado Café de la Paix...
Bajamos la Avenida Royale dirección a Plaza de la Concordia, y encontramos una pastelería segun bajas a la izda. a la que no pudimos resistirnos, nos dejamos seducir por las tan conocidas galletitas redondas de colores..., bueno un surtidito que fue cayendo de camino a Concorde, algunas muy buenas, otras no tanto.
Una vez frente al Obelisco de Luxor, no puedes menos que dejarte llevar por las tremendas dimensiones de la Plaza y el entorno.
Tengo que apuntar, que estábamos a 13 de Julio, vísperas del 14 de Julio, Fiesta Nacional de la Bastilla, y los preparativos eran evidentes, toda la plaza acordonada con la tribuna preparada para el Sr. Oland y el desfile venidero.
Mas souvenirs, mas lluvia, pero liviana y cortita, y a seguir...
Tomamos dirección al Puente de la Concordia, y frente a nosotros el Edificio de la Asamblea Nacional.
Como otros edificios, no escatiman en dimensiones, todo en esta zona es monumentalmente grande, las distancias también, y nuestro objetivo, Les Invalides.
Tremendo el despliegue de seguridad que vamos observando por los jardines de Invalides, helicopteros a bajo vuelo, patrullas de la gendarmería y unidades militares de diferentes cuerpos, con exposiciones al publico en lugares estratégicos.
Todo el ejercito en la calle, incluso patrullas de seguridad armadas hasta los dientes.
Por fin llegamos a Invalides, fue un trecho ancho ehh....
Comenzamos la visita al Museo de las Armas (PMP), pero ya teníamos bastante hambre, asi que decidimos hacer un alto y reponer fuerzas, en las mismas instalaciones, (quien se marchaba a buscar donde comes), pues allí mismo tomamos algon, de lo que era un Shelf service, pagas según cojas. Yo me lance de cabeza a por la jarra de rubia que vi desde la entrada... Ya hacia falta un refrigerio.
Pues ya llenos, y somnolientos, nos arengamos unos a otros para continuar, y nos acercamos a la Tumba de Napoleón (PMP); bueno que decir si esta allí, no vas a dejar de ir, pero tampoco me quito el sueño.
Finalizamos en Invalides y emprendemos el camino a la inversa, dirección al Puente mas pesioooso de Paris, Alejandro III, sin duda este paseo y el Pequeño y Gran Palacio al fondo, si me despertaron, si que es bonito er condenao.
Bajamos por su lateral derecho y encontramos siguiendo la rivera del rio, un mercadillo de tenderetes y puestos de antigüedades, pinturas, objetos artesanos... muy divertido y colorido, nos hizo terminar la pesada digestión, y consiguió espabilarnos.
Seguimos el margen del Sena dirección hacia la Plaza de la Concordia, que encontramos mas atiborrada aun de preparativos para el desfile, y alcanzamos a ver los Campos Elíseos, todo engalanados y listos para el 14 de Julio.
Localizamos la entrada del metro, no sin alguna dificultad, y pa casita, al hotel, que toca relax, Hamman, Jacuzzi y demás, todo es poco pa los dolores de pies y piernas.
Cambio de ropa, de tiros largos y segundo homenaje par cuerpo.
Teniamos contratado por internet un pack, France Tourime Illuminación Tour+Moulin Rouge+transfer a tu hotel al finalizar el espectaculo, 109€/pers. Aqui tiramos los trastos por la ventana, pues pensamos que merecería la pena...
Os cuento: Metro hasta Saint Michel, por allí comimos en la misma calle, bajo la lluvia, la tarde se metió en agua y no paraba...
La comida fabulosa, unos bocatas y una buena lata de 50 cl de birra fresca por 6 €, prueba evidente de que en Paris tambien puedes comer de forma económica, cada cosa en su lugar, no comparemos con "Le Train Bleu" , pero es como tu te lo montes.
Haciendo tiempo nos acercamos a la terminas del Bus, para el Tour, allí cerca de Saint Michel. Pschhhh mala pata la nuestra, bus descubierto, que tuvieron que techar con un toldo transparente, pero la lluvia no cedía, y no dejaba ver bien las cosas...
La tarde empezó mal, el Tour muy bien salvando la fastidiosa lluvia, y que empezaban a formarse goteras en el bus.
Finalizamos en Plaza Pigalle, frente al Moulin Rouge.
Y nos acercamos, la sesión anterior estaba saliendo del local, y mi asombro fue que la cola de entrada era descomunal, y encima bajo la lluvia.
Como todo en la vida, hay cosas que abren puertas o evitan colas, y no me refiero a la (PMP), un compañero de Tour, bien trajeado y su esposa, se acercaron al fornido guardia de seguridad y le aflojaron un guapo billete de 20€, que instantaneamente le ahorraron como unos 300 mts de cola... jeje. precioso ¿verdad?.
En fin, sin comentarios; decidimos entrar al Moulin Rouge, lanzandonos un poco a la aventura, pues desconociamos si aquello valdría la pena, y como sería la acomodación.
Respondiendo a lo primero, os dire que para mi, y a pesar de los pesares y llovizna incluida, SI valió la pena, no había visto un espectáculo parecido, salvo en peliculas, estupendo, animado, las chicas autenticas atletas y el show, impresiona.
Los Peros, ... la promesa de la Empresa de que tendríamos reservada mesa con buena visibilidad, toooo mentira...., cuando fue tragando aquello, fuimos entrando y según entrabas te iban colocando.
Nos pusieron en un lateral del escenario, muy esquinados y en una mesa con otras cuatro personas, en total ocho personas, y de espaldas al escenario...
Bueno que deciros, salimos con dolor de cuello, la botella de champagne que prometían si que fue real, de hecho, trajeron conforme se consumía.
Con respecto al espectáculo, he de reconocer que me gustó, las chicas muy glamurosas y coquetas, con sus pechos de atleta, y autenticas deportistas todas, a cual mas sexy. Números variados de humor, equilibristas, chicas de revista, chica en un inmenso acuario con serpientes de agua enormes, en fin... puro show.
Tendréis que sopesar, es una inversión quizás excesiva para algunos, y para otros lo merece.
Yo lo hice, pero cierto es que no lo repetiría.
Al salir, seguía lloviendo, y el transfer menos mal, nos esperaba en la puerta, en un rato nos acercó a nuestro hotel y otro día mas completo, con objetivos cumplidos, a descansar, y reponerse para mañana, 14 de Julio.-
[/align] Bueno tempranito arriba y al desayuno, abundante, estupendos los Creeps, umm, aun recuerdo su sabor, y los viajes que peque al plato pa rellenar.
Salimos equipados hacia el metro y directos a Madelene, esta vez entramos y degustamos su interior, y su majestuosa custodia de columnas. (Digno de visitar).


Magnificas vistas desde Madelene...

Seguimos el itinerario paseando hacia el Palacio de la Opera Garnier, 8€/pers.; merece la pena, nos tomamos nuestro tiempo, te quedas impresionado en la escalera, pomposidad y suntuosidad al máximo, galerías, estancias y por supuesto el interior de la zona de butacas y palcos.




Salimos y lo prometido es deuda, a muy pesar mio, no encaminamos a Galerias La Fayette (Opera), mi intención era un vistazo rápido y echarle una instantánea a la cúpula y azotea, pero aqui las respectivas señoras no pueden dejar de darse gusto a la vista y mirar y mirar... pero nada mas, es casi prohibitivo, todo carisimo, hasta los souvenirs eran caros.


Por fin consigo sacar al grupo, después de unas cincuenta amenazas de abandonarles allí mismo, no encontramos en renombrado Café de la Paix...

Bajamos la Avenida Royale dirección a Plaza de la Concordia, y encontramos una pastelería segun bajas a la izda. a la que no pudimos resistirnos, nos dejamos seducir por las tan conocidas galletitas redondas de colores..., bueno un surtidito que fue cayendo de camino a Concorde, algunas muy buenas, otras no tanto.
Una vez frente al Obelisco de Luxor, no puedes menos que dejarte llevar por las tremendas dimensiones de la Plaza y el entorno.

Tengo que apuntar, que estábamos a 13 de Julio, vísperas del 14 de Julio, Fiesta Nacional de la Bastilla, y los preparativos eran evidentes, toda la plaza acordonada con la tribuna preparada para el Sr. Oland y el desfile venidero.
Mas souvenirs, mas lluvia, pero liviana y cortita, y a seguir...
Tomamos dirección al Puente de la Concordia, y frente a nosotros el Edificio de la Asamblea Nacional.

Como otros edificios, no escatiman en dimensiones, todo en esta zona es monumentalmente grande, las distancias también, y nuestro objetivo, Les Invalides.


Tremendo el despliegue de seguridad que vamos observando por los jardines de Invalides, helicopteros a bajo vuelo, patrullas de la gendarmería y unidades militares de diferentes cuerpos, con exposiciones al publico en lugares estratégicos.
Todo el ejercito en la calle, incluso patrullas de seguridad armadas hasta los dientes.
Por fin llegamos a Invalides, fue un trecho ancho ehh....
Comenzamos la visita al Museo de las Armas (PMP), pero ya teníamos bastante hambre, asi que decidimos hacer un alto y reponer fuerzas, en las mismas instalaciones, (quien se marchaba a buscar donde comes), pues allí mismo tomamos algon, de lo que era un Shelf service, pagas según cojas. Yo me lance de cabeza a por la jarra de rubia que vi desde la entrada... Ya hacia falta un refrigerio.
Pues ya llenos, y somnolientos, nos arengamos unos a otros para continuar, y nos acercamos a la Tumba de Napoleón (PMP); bueno que decir si esta allí, no vas a dejar de ir, pero tampoco me quito el sueño.




Finalizamos en Invalides y emprendemos el camino a la inversa, dirección al Puente mas pesioooso de Paris, Alejandro III, sin duda este paseo y el Pequeño y Gran Palacio al fondo, si me despertaron, si que es bonito er condenao.



Bajamos por su lateral derecho y encontramos siguiendo la rivera del rio, un mercadillo de tenderetes y puestos de antigüedades, pinturas, objetos artesanos... muy divertido y colorido, nos hizo terminar la pesada digestión, y consiguió espabilarnos.


Seguimos el margen del Sena dirección hacia la Plaza de la Concordia, que encontramos mas atiborrada aun de preparativos para el desfile, y alcanzamos a ver los Campos Elíseos, todo engalanados y listos para el 14 de Julio.

Localizamos la entrada del metro, no sin alguna dificultad, y pa casita, al hotel, que toca relax, Hamman, Jacuzzi y demás, todo es poco pa los dolores de pies y piernas.
Cambio de ropa, de tiros largos y segundo homenaje par cuerpo.
Teniamos contratado por internet un pack, France Tourime Illuminación Tour+Moulin Rouge+transfer a tu hotel al finalizar el espectaculo, 109€/pers. Aqui tiramos los trastos por la ventana, pues pensamos que merecería la pena...
Os cuento: Metro hasta Saint Michel, por allí comimos en la misma calle, bajo la lluvia, la tarde se metió en agua y no paraba...
La comida fabulosa, unos bocatas y una buena lata de 50 cl de birra fresca por 6 €, prueba evidente de que en Paris tambien puedes comer de forma económica, cada cosa en su lugar, no comparemos con "Le Train Bleu" , pero es como tu te lo montes.
Haciendo tiempo nos acercamos a la terminas del Bus, para el Tour, allí cerca de Saint Michel. Pschhhh mala pata la nuestra, bus descubierto, que tuvieron que techar con un toldo transparente, pero la lluvia no cedía, y no dejaba ver bien las cosas...
La tarde empezó mal, el Tour muy bien salvando la fastidiosa lluvia, y que empezaban a formarse goteras en el bus.
Finalizamos en Plaza Pigalle, frente al Moulin Rouge.
Y nos acercamos, la sesión anterior estaba saliendo del local, y mi asombro fue que la cola de entrada era descomunal, y encima bajo la lluvia.
Como todo en la vida, hay cosas que abren puertas o evitan colas, y no me refiero a la (PMP), un compañero de Tour, bien trajeado y su esposa, se acercaron al fornido guardia de seguridad y le aflojaron un guapo billete de 20€, que instantaneamente le ahorraron como unos 300 mts de cola... jeje. precioso ¿verdad?.
En fin, sin comentarios; decidimos entrar al Moulin Rouge, lanzandonos un poco a la aventura, pues desconociamos si aquello valdría la pena, y como sería la acomodación.
Respondiendo a lo primero, os dire que para mi, y a pesar de los pesares y llovizna incluida, SI valió la pena, no había visto un espectáculo parecido, salvo en peliculas, estupendo, animado, las chicas autenticas atletas y el show, impresiona.
Los Peros, ... la promesa de la Empresa de que tendríamos reservada mesa con buena visibilidad, toooo mentira...., cuando fue tragando aquello, fuimos entrando y según entrabas te iban colocando.
Nos pusieron en un lateral del escenario, muy esquinados y en una mesa con otras cuatro personas, en total ocho personas, y de espaldas al escenario...
Bueno que deciros, salimos con dolor de cuello, la botella de champagne que prometían si que fue real, de hecho, trajeron conforme se consumía.
Con respecto al espectáculo, he de reconocer que me gustó, las chicas muy glamurosas y coquetas, con sus pechos de atleta, y autenticas deportistas todas, a cual mas sexy. Números variados de humor, equilibristas, chicas de revista, chica en un inmenso acuario con serpientes de agua enormes, en fin... puro show.
Tendréis que sopesar, es una inversión quizás excesiva para algunos, y para otros lo merece.
Yo lo hice, pero cierto es que no lo repetiría.
Al salir, seguía lloviendo, y el transfer menos mal, nos esperaba en la puerta, en un rato nos acercó a nuestro hotel y otro día mas completo, con objetivos cumplidos, a descansar, y reponerse para mañana, 14 de Julio.-